Countdown mortal
Ya es una constante ver a Cobresol con voluntad de hacer bien las cosas en el gramado, aunque con la misma se le "agota la gasolina". Ello se repitió esta tarde ante la Vallejo que, de hecho, al final lo tuvo sobre las cuerdas y le ganó con absoluta justicia. No obstante, es el equipo al que más le afecta el rigor de jugar a mitad de semana, y tal situación se traduce en un aspecto fundamental: el equipo, agobiado ante la falta de pago y el total abandono dirigencial, tampoco entrena; es decir, se reune como un grupo de amigos en algunos días de la semana y con la misma emprende viaje y salta al gramado. Una situación terrible e insostenible.
En esa línea, el otro detalle que es insostenible y que está por mandarlo a la horca es el tema económico. Es sabido que desde hace menos de un mes el equipo ya no tiene el apoyo de la Universidad Alas Peruanas (por culpa de su presidente Luis Murillo, quien jamás tuvo la voluntad de formalizar el convenio), y lo cierto es que el conjunto moqueguano está a la deriva: algunos de sus jugadores (como Israel Tordoya y Omar Zegarra) ya anunciaron que se regresan a Lima y, de hecho, tienen hasta problemas de alojamiento. Lo lamentable, eso sí, es que la existencia de Cobresol en el fútbol ya entró en el conteo regresivo: tiene como máximo hasta el 30 de julio para abonar una de las cuotas que fraccionó ante el Safap y también para presentar la planilla por la remuneración correspondiente al mes de julio. Como se recuerda, el equipo moqueguano ya incumplió con dos de estos requerimientos mensuales (y en primera instancia ya le restaron cuatro puntos); por ende, está al filo de la navaja.
De acuerdo a una comunicación con nuestro colega moqueguano Ronnie Flor, la suerte de Cobresol ya está echada: hasta el lunes 30 del presente tiene plazo pagar 126 mil dolares al Safap por los tres meses que está adeudando, y también 273 mil soles que constaten las remuneraciones de tres mensualidades (sin contar que la directiva anterior del equipo dorado dejó una deuda de 370 mil dólares). En ambos casos, no hay nadie que quiera meter la mano al bolsillo para cubrir con ese monto, por lo que su estadía en el fútbol está con las horas contadas. De acuerdo al artículo 127 de las bases del Descentralizado 2012, al producirse un tercer incumplimiento en el pago de remuneraciones mensuales, la CJ-ADFP debe sancionar al equipo con el retiro del torneo y la correspondiente pérdida de la categoría.
Es, sin duda, la crónica de una muerte anunciada para Cobresol. Como van las cosas, le quedan solo dos partidos más en su existencia: el del miércoles ante Unión Comercio en Tarapoto y el del próximo fin de semana ante Sport Huancayo en casa, aunque el trascendido es que por fiestas patrias el grueso del plantel ya no va a regresar a Moquegua. Igual, el 30 de julio, día en el que también se cumplen tres meses de deuda, el plantel queda en condición de libre y puede marcharse con tranquilidad. A Cobresol se le viene una semana clave en su historia, pero sin visos de salvación.
Fotos: diario La Prensa Regional de Moquegua
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la copa peru tendria que volverse profesional para que vean cuanto gastan deben crear 4 regiones(metropolitana,norte,centro y sur) con 8 equipos cada uno con ascenso-descenso de uno por zona si fuera profesional ya habrian desaparecido la mitad o mas clubes
por eso se salva la copa peru por ser simplemente amateur.
para que la copa peru sufra tienen que ser profesional cuando llegan a la regional para que vean su situacion asi burguita perderia algunos votos.
saludos
