Aguas turbias

A menos de dos meses para el inicio de las eliminatorias hacia Brasil 2014, Argentina, Paraguay y Colombia han cambiado su cuerpo técnico. Tras la paridad de fuerzas que dejó la Copa América, el cambio de timón en dos de las selecciones “fijas” -Argentina y Paraguay- para clasificar al próximo mundial deja abierta las posibilidades que tienen otras selecciones de acceder a alguno de los cuatro cupos y medios que tiene la Conmebol. Esto se debe al poco tiempo de trabajo que tendrán tanto Alejandro Sabella y Francisco Arce al mando de la albicelestes y la albirroja respectivamente. No obstante, pese a trabajar contra el reloj, la llegada de ambos estrategas puede potenciar en gran medida a dos selecciones que dejaron grandes interrogantes luego de su participación en el certamen continental.
Cabeza fría
Por el lado de Argentina, Alejandro Sabella puede proporcionarle al equipo un mayor equilibrio en su juego. La albiceleste dejó en la última Copa América grandes dudas en materia defensiva, y es que tanto la zaga como la primera línea de volantes, no estuvieron a la altura de las circunstancias. De igual modo, el ex técnico de Estudiantes deberá ratificar su temple ante las grandes presiones que se tienen en el puesto. Los equipos de Sabella se han caracterizado por presentar una buena defensa, un mediocampo aguerrido y un ataque agresivo. Por lo tanto, el juego al ras de piso y la idea de jugar ultraofensivos con todos los ‘enanos’ arriba puede ir olvidándose en tierras gauchas para dar paso a un equipo que privilegie el cero en su arco y sea más práctico en ataque. Si Sabella logra corregir las deficiencias en defensa que presenta Argentina, podría hacer que la albiceleste sea una selección más competente y volvería a ratificar su chapa de candidato para clasificar.
Mientras tanto en Paraguay, tras la salida de Gerardo Martino, la AFP decidió apostar por un hombre de la casa como el Francisco Arce para dar paso a una nueva generación guaraní. El ex seleccionado nacional y ex entrenador del Rubio Ñu, club en el que dirigió por cuatro temporadas, llega a la albirroja con el objetivo de iniciar un recambio generacional que vaya de la mano con la continuación del trabajo realizado por el ‘Tata’ Martino. A pesar del corto tiempo que tiene como técnico, el ‘Chiqui’ Arce ha logrado formar una identidad en sus equipos, los cuales tratan de neutralizar al rival mediante un trabajo de pressing, y basa sus ataques por los extremos. Luego del exitoso paso de Martino, no le sienta nada mal a Paraguay tener un técnico joven, con nuevas propuestas pero que entienda cómo es el futbolista paraguayo. Al tener Arce todas estas condiciones, sólo queda esperar los resultados de su trabajo.
No se olviden de ellos
En tierras cafeteras, la intempestiva cesión del ‘Bolillo’ Gómez ha dejado un vacío que todavía no ha podido ser ocupado. Mientras los nombres de Eduardo Lara, Leonel Álvarez e incluso el ‘Tata’ Martino, suenan para reemplaza al ‘Bolillo’, los días pasan sin que Colombia consiga técnico. Sin embargo, independientemente de quién sea elegido, el próximo técnico tendrá que lograr que Colombia consolide una propuesta futbolística, que bien podría significar la continuación del interesante 4-1-4-1 visto en la Copa América.
Los norteños no pueden seguir improvisando tácticas, y ante la falta de gol que poseen, el panorama se torna sumamente complicado. Si Colombia aspira a clasificar -era una de las selecciones llamas a hacerse con el quinto puesto y el repechaje-, a priori, resultaría más sensato apostar por el trabajo de Lara o Leonel Álvarez, quien fue asistente del ‘Bolillo’, debido a que son hombres que conocen al equipo.
Composición Fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
