El mejor ataque es...
Máximas en el fútbol hay muchas. Que la mejor defensa es el ataque, que el mejor ataque es la defensa o, como más propiamente se dice de un tiempo a esta parte, que la mejor defensa es la defensa. Eso último claramente piensa Diego Umaña, quien cerró tácticamente el partido durante el segundo tiempo y con ello hizo negocio hasta que Pablo Escobar anotó el segundo tanto, que selló la victoria por 2-1 de The Strongest sobre el 'Ciclón'.
Pero en realidad, la evidencia estadística de cuadros provincianos jugando en La Paz revertiría todas las máximas anteriores a una más sencilla: el mejor ataque es el ataque. Así, resulta que cada vez que un club del interior visitó la capital boliviana por Libertadores recibió dos goles. Le ocurrió a UTC, en 1986, cuando cayó 2-1 ante Bolívar, y al propio Aurich hace dos años, en 2010, cuando perdió 2-0 ante la propia 'Academia' paceña. Hubo un tercer caso: Cienciano en 2007, siempre ante Bolívar, recibió dos goles... Pero salió celebrando del Hernando Siles, porque devolvió tres a cambio. Aquel 2-3 con goles de Juan Carlos Mariño, Juan Diego Gonzales Vigil y Julio Edson Uribe le da crédito a la prédica "decente" de Julio César Uribe sobre el fútbol destructivo que más bien identifica a Umaña; debate añejo, como el de las máximas futboleras.
Foto: AFP
