Buen sorbo para el mal rato
Dada la prematura eliminación de Aurich, esta tarde noche no hubo mucha concorrencia en el Elías Aguirre; es más, por momentos, de acuerdo a las diversas tomas que captó la señal televisiva, dio la impresión de que habían más aficionados del Inter de Porto Alegre. Sin duda, la decepción del aficionado chiclayano fue total con la irregular campaña del 'Ciclón', tanto como que la expectativa para este compromiso fue escasa. No obstante, si los ojos del continente estuvieron puestos en la resolución del cotejo entre Santos y The Strongest, los que mostraron su "fidelidad" para con los dirigidos por Umaña pueden sentirse privilegiados: se obtuvo un resultado inusual para el fútbol peruano, aunque el contexto no lo amerite.
Este miércoles 19 de abril, Juan Aurich se convirtió en el segundo equipo provinciano que derrotó en casa a un brasileño; lo hizo con angustia, pero con suficiente vergúenza deportiva como para despedirse con la frente en alto del torneo continental. El gol del 'Pana' Luis Tejada bastó para sellar el 1-0 ante Internacional, que no solo la pasó mal en el Elías Aguirre, sino que -a la par- estuvo con la atención puesta en el Vila Belmiro.
¿Cuándo fue la primera vez que un elenco del interior bailó samba? Fue hace poco más de diez años; exactamente el 2 de abril de 2002. Aquella vez, por el Grupo 2 de la Libertadores, Cienciano derrotó por 2-1 a Gremio -el otro equipo popular de Porto Alegre- con goles del uruguayo Ernesto Zapata y el mexicano Gerardo Fernández (descuento de Rodrigo Mendes). Se trata, pues, de un "evento" extraordinario en la trayectoria copera de un equipo de provincia, y hasta en el plano general, ya que los triunfos de equipos peruanos ante sus pares de Brasil no se dan todos los días. Aurich, pese a su eliminación, dejó una marca que probablemente tarde mucho en volverse a repetir. Al menos esa es la tendencia.
Foto: AFP
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