Sin querer queriendo
El Boys - Vallejo fue un partido altamente emotivo, por lo que ambos se jugaban -abajo y arriba- y por el ida y vuelta que tuvo. Quedaba la impresión de que el que anotara primero podría llevárselo, pero los tantos llegaron de manera atípica.
La Vallejo pegó primero cuando un desborde de Cedrón, a quien Flores salió a tapar el ángulo, acabó con un tiro que sobró al golero y encontró al bisoño Níger Vega junto al segundo palo. El mediapunta poeta quiso pegarle de lleno con derecha, pero acabó pifiando la pelota y enredándose para tocarla con izquierda. Se metió al arco casi con pelota y todo y celebró así su primer gol en la máxima categoría.
El empate rosado llegó a través de otra jugada extraña. El ' Huevito' Ruiz sacó una especie de tiro - centro que sobró a la zaga poeta y fue conectado de cabeza por Carlos Orejuela. Con la pelota en dirección al arco, Ricardo Caldas quiso intervenir para conectarla; pero le pegó al aire, no obstante lo cual su movimiento acabó descolocando a Éder Hermoza.
Caldas tuvo otro "error" que casi es decisivo minutos después: enfiló al arco por izquierda y le pegó en diagonal, pero lo hizo de forma tan imperfecta que acabó dándole un súper pase a Orejuela. Este anotó, pero el asistente Jorge Yupanqui sancionó un offside que solo él vio y anuló el tanto. Sucede que la cuarteta no se quiso quedar atrás con los errores: Víctor Hugo Rivera no cobró en el primer tiempo un penal de Mogollón a Guizasola por claro empujón y luego no expulsó a Víctor Cedrón, a quien apenas le sacó amarilla por un codazo flagrante. Yerros que, a diferencia de los de Vega o Caldas, no sumaron sino más bien restaron en el Grau.
Fotos: José Salcedo / DeChalaca.com
