El indiscutible cabecilla
Nunca a lo largo de su carrera tuvo los boletos comprados Franco Giovanny Mendoza Breña (Lima, 23 de enero de 1977). Ni en Unión Minas, ni en Wanka, ni en Áncash ni en Juan Aurich fue indiscutido titular; no por falta de talentos, sino porque en la posición de creativo siempre encontró competencia más renombrada en esos clubes. Solo en Atlético Minero se hizo de un espacio estable y, sobre todo, lo consiguió ya pasados los treinta, cuando recaló en Ayacucho en 2010 para enfundarse la '10' de Inti Gas.
Desde entonces, el 'Cabezón' sacó chapa de ídolo en Ayacucho, como no lo había conseguido en ningún otro lado. Perfeccionó su milimétrica precisión en los tiros libres y potenció su pase colocado. Fue la manija gasífera en las campañas de 2010 y 2011 y, aunque la regularidad siempre fue su enemiga, los números lo avalaron: hizo 14 goles en 36 partidos, con promedios anuales de 13.80 y 13.27 para DeChalaca.com. Por eso, sorprendió que a inicios de este 2012, tras haber hecho la pretemporada con Inti Gas, se anunciara que el 'Cabezón', junto a Éxar Rosales, se marcharía a jugar a Los Caimanes de Puerto Etén, que andan en el limbo entre su posible participación en Segunda División y la Copa Perú. Al parecer, el volante no estuvo de acuerdo con la anunciada reducción de sueldos en Inti Gas luego de la huelga de futbolistas y por eso decidió irse.
No obstante, se agotaron gestiones para su vuelta y, ante la incertidumbre en Los Caimanes, se concretó su regreso a Ayacucho. Reapareció hace dos fechas ante Melgar y esta vez, tras superar una lesión, volvió a ser el conductor que el Ciudad de Cumaná esperaba. Recolocado en primera línea, desde allí condujo al equipo, y como la última vez que había anotado un doblete, el año pasado ante Melgar, abrió el camino con un penal bien ejecutado. Luego le pegó bien de tiro libre y la cancha hizo lo suyo para complicar a Libman con un rebote. Y así, el 'Cabezón' volvió a ser figura ante su gente, esa a la que en este tramo final de su carrera se metió en el bolsillo.
Foto: Ciro Madueño

Lástima que sea tan infravalorado y por eso nunca lo han convocado a la selección.