Cuando la forma importa poco
Hay veces en que cuesta anotar, incluso cuando se domina el partido con bastante notoriedad. Tal situación, por ejemplo, se produjo esta tarde en Huánuco, con un León que encaró el partido con su 4-2-3-1 que parece ser el principal estandarte que posee el 'Maño' Ruiz para sobrepoblar la volante y, de paso, alimentar al indicado a ser el hombre gol de los cremas del centro, o sea Sergio Almirón. En esa línea, esta vez los huanuqueños se toparon con un rival como Sport Huancayo que le leyó bien el partido y que le cerró los espacios, además de obstaculizar la labor creativa de Gustavo Rodas, quien no pudo lucir en su reestreno con la afición huanuqueña.
Tal razón, pues, obligó al DT local a salir a buscar el resultado, y por ello tuvo que hacer un sinfín de variantes para vulnerar el plan estratégico del 'Rojo Matador' y sumar de a tres. De hecho, el transcurrir de los minutos fue su principal enemigo, situación que puso en evidencia una desconexión entre el mediocampo y el ataque. Cuando apenas iban 33'', Aníbal Ruiz sacó a Guillermo Salas por Luciano Cardinali y ello trastocó la formación del elenco local: pasó al 4-cuadrado-2, con Víctor Peña como lateral derecho. Más adelante, cuando ingresó Johan Vásquez por Carlos Zegarra, el sistema varió a un 3-2-3-2 para, finalmente, sobre los 78', cuando el marcador seguía 0-0, meter a Pedro García por Minzúm Quina y pasar el 4-3-3, está vez con mayor persistencia al ataque.
Ha de estar en el pellejo del 'Maño' Ruiz, pero la primera sensacion que se le ocurre a cualquier mortal es que el DT de León debería haber pateado el tablera ante la pésima puntería de sus dirigidos. Y es que el entrenador local lo buscó de mil maneras, y jamás encontró sociedas en ataque y mucho menos volumen ofensivo. No obstante, lo que probablemente no estuvo en su planteamiento estratégico es encontrar el triunfo e irse a los vestuarios con un tanto agónico, de un defensor como Roller Cambindo y que se produjo tras un tiro libre que, casi se manera fortuita, fue interceptado para desviar la trayectoria y demostrar que, a veces cuando se pretende aplicar mayor estrategia, los goles -o el gol, en este caso- llegan como caídos del cielo.
Foto: diario La Crónica de Huánuco
