Chávez que hace milagros
Un milagro, por definición, es un “suceso inexplicable, extraordinario o maravilloso que se atribuye a intervención divina”. Usar el término en el fútbol más que un exceso puede parecer una herejía, pero a veces parece que vale la pena cometer el sacrilegio verbal. Porque no se puede explicar cómo un jugador que pasa desapercibido 90 minutos y que no se caracteriza por ser goleador, le dé un triunfo celestial a su equipo en los descuentos. Parece regalo de los dioses, digan que no.
Esta vez le tocó hacer el milagro, me animo, aunque alguno me diga blasfemo, a Éver Gustavo Chávez Hernández (Ica, 28 de diciembre de 1984) quien hizo el único gol del discreto partido que entregó León ante Inti Gas cuando casi se sumaban 92 minutos en el choque. “Es lo único que hizo; no hizo nada, solo el golazo” decía Michel Tarazona en la narración radial de Studio 5 de Huánuco, frase que acompañó el tremendo grito, atronador, que soltó el narrador Roberto Usuriaga cuando cayó el tanto de la victoria.
No es la primera vez que Chávez logra algo así y causa el descontrol de parte de los colegas que transmiten los juegos de León. En el 2009, en los octavos de final de la Copa Perú, los huanuqueños debían vencer por dos goles de diferencia a otro club ayacuchano, Froebel, para avanzar a la siguiente etapa. Y ese segundo gol cayó, como hoy, en los descuentos, y más tarde aún. Fue a los 93’+ que Éver Chávez puso ese gol que arrimó un poco más a su equipo al retorno a la Primera (para ser después subcampeón nacional y clasificado a la Sudamericana). Y así como hoy emocionó hasta sus límites a Usuriaga, en el 2009 hizo literalmente llorar de alegría a un buen amigo de esta página, Roberto Li, quien narró aquel choque de octavos de Copa Perú. ¡Quién sabe! Podría ser una señal divina.
Foto: diario Ahora de Huánuco
