Chaca Shakhtar
Shakhtar Donetsk es uno de los equipos que más ha asombrado Europa en las últimas temporadas. El cuadro minero ha demostrado una personalidad muy peculiar en el juego y en la conformación de su equipo, bastante disímil a la identidad de los tradicionales cuadros de Europa Oriental,
La llegada, en 1996, de Rinaj Ajmétov, magnate y empresario ucraniano, dio pie a una nueva era, en la que Shakhtar ganó 18 de los 19 títulos que ostenta desde la independencia de Ucrania de la Unión Soviética. El más importante, sin duda, fue la Copa UEFA 2009.
No solo la importante inyección económica que recibió el club fue clave para los logros obtenidos; lo es, asimismo, la capacidad de Ajmétov de rodearse de profesionales competentes en los puestos administrativos y directivos del club. No por ser prácticamente el dueño del Shakhtar, lo maneja a su antojo o cumple sus caprichos.
El director deportivo, Sergei Palkin, es la conexión entre el equipo y las oficinas del club. El entrenador, desde 2004, es el rumano Mircea Lucescu, entrenador con vasta experiencia y multicampeón en distintos países. Lucescu tiene el respaldo absoluto de la dirigencia y ha llevado a cabo un proyecto exitoso dentro de la cancha.
Shakhtar Donetsk vivió por mucho tiempo, como casi todos los clubes ucranianos, bajo la sombra del poderoso Dynamo de Kiev, que no solo dominó en lo deportivo, sino también en el mercado de fichajes. Por ello, Shakhtar tuvo que buscar nuevos nichos, encontrando una nueva fuente de jales: el fútbol brasileño.
No se lleva a las joyas más preciadas del Brasileirao, pero sí a jugadores con mucha proyección, que no son tomados en cuenta por los más poderosos del Viejo Continente. Ha potenciado sus aptitudes con la disciplina y rigor de la competencia europea.
La contracara de este proyecto está en la pérdida de identidad del Shakhtar Donetsk. Su apodo de ‘cuadro minero’ obedece la zona geográfica en que se encuentra: Donbass, una región dedicada a la minería. Muchos de sus ciudadanos no se ven representados por un cuadro repleto de foráneos y con un juego prácticamente sudamericano.
Al mejor equipo en Europa Oriental, le cuesta llenar el Donbass Arena en un partido cualquiera, a pesar de la racha impresionante que lleva de más de veinte victorias consecutivas en casa. A pesar de la atractiva propuesta que presenta, esta situación no cambia ni contra los rivales más pintados.
Los logros de Shakhtar en el siglo XXI, y los que puedan llegar más adelante, quizá le sirvan para colocarse en lo más alto de la esfera europea, sosteniendo, en paralelo, el buen trabajo que realiza en sus canteras.
Por lo pronto, Shakhtar Donetsk combina dos escuelas en sus facetas importantes: una defensa netamente de la Europa Oriental y un ataque plagado de brasileños. En cuanto a la organización de sus diferentes áreas, no tiene nada que envidiarle a clubes como Barcelona, Arsenal, Ajax o Manchester United.
En la actual Champions League lidera el grupo E, por encima de equipos como Chelsea y Juventus. De Shakhtar depende seguir dejando al continente europeo con la boca abierta.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: AFP, shakhtar.com