El primer merengue que bailó Matute

El 27 de diciembre de 1974 se inauguró el estadio Alianza Lima, que luego fue renombrado como Alejandro Villanueva. Los invitados de lujo para la apertura fueron Nacional de Uruguay, Independiente de Argentina y el rival de siempre, Universitario. Aquel día el campeón del torneo amistoso fueron los cremas que le amargaron la fiesta al rival. Sin embargo, los compadres no se enfrentaron directamente ya que cada equipo jugó dos partidos y los peruanos solo chocaron con argentinos y uruguayos.
Así, el primer clásico que se jugó en Matute fue en 1975 y Alianza se llevó la victoria por 3-1 ante Universitario. Los siguientes años en La Victoria siguieron siendo positivos para los blanquiazules, que mantenían el invicto sobre sus clásicos rivales. Hubo un triunfo crema, legendario, en la Libertadores de 1979: un 3-6 inolvidable. Pero en Primera División, la 'U' nunca pudo conseguir un triunfo en la casa de su rival hasta el 1 de noviembre de 1983.
Nada trucho
Ambos equipos llegaban necesitados ese martes 1 de noviembre a Matute. Alianza tenía 25 puntos y necesitaba el triunfo con urgencia ya que estaba al borde de la eliminación de las liguillas. Universitario, por su parte, peleaba en la parte de arriba de la tabla y también quería el triunfo para no perder el paso a los tres líderes: Municipal, Cristal y Torino. Ya se habían enfrentado dos veces en el año y en ambas ocasiones los de Odriozola se habían llevado el triunfo.
En la previa del partido jugaron CNI y Huaral -empate a cero- y se dio un hecho curioso: tres hinchas de Universitario con una banderola amarrada se sentaron tranquilamente entre la barra aliancista. Si bien se les permitió desplegar su bandera cuando los cremas saltaron al campo de juego, el jefe de la barra blanquiazul les indicó que debían permanecer callados durante todo el partido. Así lo hicieron y al final del encuentro -sanos y salvos- volvieron a desplegar su bandera para celebrar el triunfo merengue. Claramente eran otros tiempos.
Volviendo al partido, igual de temerario salió Universitario en los primeros minutos. Apenas iniciado el encuentro, una buena combinación entre Percy Rojas y Miguel Seminario casi termina en el primer gol de la ‘U’. Alianza no tuvo reacción y a los 6’ se culminó la insinuación merengue. Una buena jugada individual del ‘Diablo’ Drago le permitió al ‘Trucha’ encontrarse solo ante Gonzales Ganoza. El delantero definió defectuosamente y su remate chocó en el cuerpo del arquero. Rápido de reflejos, Rojas aprovechó el rebote y marcó el primero. El primer tiempo fue de dominio visitante. Resaltó Leo Rojas en la banda derecha y poco a poco fue construyendo su actuación como el mejor del partido.
Con un ‘Patrón’ Velásquez desaparecido, Alianza no encontraba manejo en el mediocampo. Las crónicas de la época criticaron el poco juego ofensivo blanquiazul que parecía más de un visitante que de local. Aun así, a los 51 encontraron el empate. Freddy Ravello cobró un tiro libre que se estrelló en el travesaño y terminó al fondo de la red.
La respuesta de la ‘U’ no demoró en llegar. Habilitación precisa de Carlos Palacios para Juan José Oré y el goleador no falló. Era 1-2 para la ‘U’ que no se movería más y que tampoco fue amenazado. La ‘U’ terminaría llegando a la liguilla, pero el campeón sería Sporting Cristal. Alianza acabaría en noveno lugar como los casi nueve años que le costó a la ‘U’ triunfar en Matute ante Alianza. Como los nueve partidos invicto que tienen ahora los cremas en el Alejandro Villanueva que definitivamente hoy son posibles gracias a ese 1-2 hace 30 años que enseñó el camino.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: revista Ovación, diario La Crónica
