Rarezas: El Perú como trampolín
Jugaban el Descentralizado, y aun así los convocaron a sus selecciones.
Fotos: diario El Bocón, diario Líbero, revista Once, revista Don Balón Perú
Que el campeonato peruano sea desorganizado e indigente no ha sido óbice para que algunos extranjeros que pisaron sus canchas pudieran encontrar el trampolín del ascenso o consolidación, según el caso, en sus respectivas selecciones. A continuación, se recordará a aquellos jugadores que paseaban su juego en selecciones competitivas mientras hacían sus pinitos en los Descentralizados de los últimos 15 años. La mayoría de ellos llevaba la aguerrida sangre guaraní en las venas, aunque también hubo algunos ecuatorianos, bolivianos, colombianos, venezolanos y hasta hondureños que engrosaron esta lista.
DE PARAGUAY
Posiblemente sea el primer nombre que se viene en mente. Jorge Amado Nunes había llegado en los descuentos de su carrera a Universitario de Deportes (1993). Llevaba un mundial a cuestas (México '86) y varias canas confundidas con una prematura calvicie, pero aún así el técnico de la selección paraguaya, Alicio Solalinde, lo incluyó en su nómina para la Copa América de Ecuador: el centrocampista fue titular ante Brasil y Ecuador, con sendas derrotas de su equipo por 3-0, e ingresó en el segundo tiempo del empate ante la selección peruana (1-1).
Más consolidado como titular era Estanislao Struway, batallador volante de marca de Sporting Cristal en 1996, quien alineó en prácticamente toda la eliminatoria a Francia '98. Por esa misma época, su compatriota Gabriel ‘El Loco’ González, quien era el '10' de Universitario de Deportes, también fue llamado por Paulo César Carpeggiani, aunque su avanzada edad y exasperado carácter no le permitieron alternar demasiado.
El último paraguayo en ser citado por su selección mientras jugaba en el Perú fue Carlos Lugo (2004), aunque aquella convocatoria se debió, sobre todo, a motivos prácticos. Paraguay jugaba en La Paz por las Eliminatorias y el zaguero de Cienciano, familiarizado con la altura, era un arma de la cual no se podía prescindir. Solo jugó aquel partido, sellado con victoria boliviana por 2-1.
El caso más paradójico resultó, sin embargo, el de Édgar Denis, delantero paraguayo que, inmediatamente después de alternar en la Copa de América de 1995, recaló en Universitario de Deportes. Su olfato goleador se mitigó al saldo de dos anotaciones en toda la temporada. Otros paraguayos que llegaron luego de haber sido seleccionados fueron Justo Jacquet (Sport Boys, 1992) y César Zavala (Deportivo Sipesa, 1993).
DE BOLIVIA
Fernando Ochoaizpur, argentino nacionalizado boliviano, era un rudo volante de Universitario de Deportes (1997), que también alternaba como lateral derecho. No marcaba la diferencia en el torneo local -incluso fue cesado fechas antes del final del torneo- pero aún así fue llamado a la selección altiplánica, donde destacó mucho más que con el cuadro crema. Incluso, ese año le anotó un gol a su país de origen -Argentina-, el cual le permitió a Bolivia alzarse con un triunfo por 2-1.
Otros bolivianos que fueron jugadores de su selección y pasaron por estas tierras fueron Martín Menacho (Sport Áncash, 2005) y Gonzalo Galindo (Alianza Lima, 2006). Antes y después de pertenecer a dichos equipos estuvieron en la nómina de sus respectivos países, pero, curiosamente, no fueron llamados mientras duró su aventura peruana. El primero, por una suspensión de 6 meses que acarreaba en el torneo boliviano. El segundo, por estar confinado a la banca de suplentes del equipo blanquiazul.
DE ECUADOR
En 2000, la hinchada de Sporting Cristal gritaba los goles de Carlos Juárez. El argentino nacionalizado ecuatoriano era una de las figuras del campeonato local y ello le permitió ser convocado por Hernán ‘Bolillo’ Gómez. En la selección de Ecuador, el 'Cuqui' Juárez no tuvo tanta suerte como en Cristal y sus participaciones se tornaron aleatorias.
Otra pareja ecuatoriana que la rompió en nuestro país fue la constituida por Luis Fernando Saritama y Johnny Baldeón, que jugaron los últimos meses de 2004 por Alianza Lima, cedidos a préstamo por el Deportivo Quito. En aquel final de 2004, ambos fueron convocados a su selección, aunque solo Baldeón, el delantero, llegó a arrancar como titular en un par de partidos. Saritama -quien volvió al cuadro íntimo el año pasado- tuvo mejor suerte tiempo después, cuando estuvo en la nómina del Mundial de Alemania 2006.
DE OTROS LADOS
Mahler Tressor Moreno es, posiblemente, el jugador extranjero que más despegó luego de jugar en el torneo casero. Llegó como un desconocido a Alianza Lima y terminó convirtiéndose en uno de los delanteros colombianos más cotizados. 
Durante su periplo por La Victoria, en 1999, fue convocado a la selección juvenil colombiana Sub-21 que disputó y se alzó con el “Mundialito de la Esperanza” en Toulón, Francia. En dicho certamen, Tressor jugó al lado de dos aliancistas del presente: Johnnier Montaño y Jorge Serna.
Un caso paradójico fue el de Daniel ‘Cari Cari’ Noriega. Llegó al Perú en el año 2000 como la principal carta de gol de Sporting Cristal. Sin embargo, en el torneo peruano no ató ni desató, y su cuota goleadora quedaba opacada por la de Carlos Juárez. Aún así, y ante la escasez ofensiva que entonces ostentaba Venezuela, era delantero titular e inamovible en la selección llanera.
Finalmente, a nivel centroamericano, destacó la actuación de Mario Eugenio Dolmo (Flores era su apellido materno), recordado delantero de Universitario de Deportes (1994) que fuera bautizado como el “Demonio del Caribe”, y quien tuvo que viajar algunas veces a su país para incorporarse a la selección de Honduras, donde era titular habitual. Su compañero de equipo y compatriota César Obando también recaló en tienda crema en aquel 1994, pero su rendimiento anduvo muy por debajo del de Dolmo, a pesar de que ambos fueron titulares en las Eliminatorias rumbo a EE.UU. '94.
Posiblemente falten algunos nombres en esta lista, que se ha restringido a los últimos 15 años del campeonato local. Si su memoria se lo permite, sírvase completarla en los comentarios. Ayudará, en algo, a mejorar la autoestima de nuestro alicaído torneo.
Mostrar/Ocultar comentarios
