Brasil - Perú 1970: Di, di que se podía

Perú había pasado la fase de grupos de México 70 con relativa dificultad, ya que se complicó demasiado -aunque con final de hazaña- ante un equipo búlgaro que era de los europeos más débiles en el Mundial. Seguidamente consiguió la tranquilidad contra la discreta selección marroquí y no le tomó mucha importancia último partido ante Alemania, pues ya estaba clasificado.
No obstante, cabe señalar que para cierto sector de la prensa, la desidia del seleccionado peruano ante los teutones fue parte de buscar la revancha ante Brasil por lo sucedido en la recordada bronca en el Maracaná en 1969 contra el Scratch. Algo tirada de los pelos fue esta hipótesis: aquel equipo alemán venía de ser subcampeón del mundo y contaba con grandes figuras como Gerd Müller y Franz Beckenbauer.
Contra-fáctico
Este tipo de rumores no eran raros en la época, pues el técnico Waldir Pereira 'Didí' no gozaba de gran apoyo popular por ser extranjero en el contexto nacionalista que predominaba. Por ello, las críticas se pronunciaron cuando el DT de la selección sorprendió ante Brasil alineando a Julio Baylón, Eloy Campos y José Fernández; los dos primeros apenas habían jugado 29 y 45, respectivamente, ante Bulgaria, mientras que el sobrino de Lolo no jugó un solo minuto en la primera fase del Mundial. En cambio, salieron tres jugadores que fueron claves en la clasificación a Cuartos de Final; Hugo Sotil, Orlando de la Torre y Javier Gonzales, todos confinados al banco ante la verdeamarelha.
Los ingresos de Baylón -que no había llegado físicamente entero al Mundial- y Campos, en realidad, eran más que nada para disponer dos jugadores más veloces y fuertes. La salida de La Torre, en cambio, obedeció a que se entendía que podía tomar represalias ante Gerson, quien le había fracturado la pierna en el "amistoso" jugado en Rio de Janeiro hace un año atrás. Ante la inclusión de las tarjetas para ese Mundial, era arriesgado para Didí hacer jugar al defensor peruano. No faltaron entonces los rumores de que el siempre irascible Chito, al saberse que cambiaría la oncena, habría golpeado al DT brasileño en la concentración.
Como fuera, Didí fue duramente criticado por hacer un esquema muy débil defensivamente de acuerdo con el rival al que se enfrentaba. Como es obvio suponer, se indicó que por su nacionalidad, no trabajó como tuvo que hacerlo para este partido. Finalmente, el dos veces campeón del mundo como jugador con Brasil salió del país tras la eliminación en el Mundial con rumbo a Argentina, país en el que dirigió a River Plate. No volvió al Perú sino hasta 1986, para -ya sin militares de por medio- dirigir a los 'Potrillos' de Alianza Lima.
Soñando el batacazo
¿Pero qué habría ocurrido si el partido era, por esos azares del destino, diferente y Perú le ganaba a Brasil? Según como se dio el encuentro, esto habría requerido, de modo indispensable, que Luis Rubiños mostrara seguridad en el arco; que Javier Gonzales estuviera en una gran noche junto a Chito de la Torre -ambos titulares-; que Héctor Chumpitaz ratificara su gran nivel; que Nicolás Fuentes controlara al milímetro a Jairzinho- algo no tan lejano a lo ocurrido en la realidad-; y que el Cholo Sotil arrancara en la delantera, en vez de Baylón, junto a Perico, Gallardo y Cubillas.
Bajo todos estos supuestos, el partido podría haber comenzado igual, con Brasil abalanzado sobre Perú, pero la blanquirroja tendría mejor soporte por tener a una zaga más cuajada y con más minutos junta. Con ello, el gol de Rivelino comenzando el partido quizá no se habría dado: el Muerto Gonzales, con el ritmo de competencia con el que llegaba, no habría sido protagonista de tamaño blooper. Asimismo, la segunda anotación desde una desatención de un córner era poco probable, pues la zaga entera y especialmente el Chito y Gonzales, por ese lado, tenían una comunicación más directa y coordinada.
Lo demás pasa por suponer generosamente. Que el árbitro belga Vital Loraux hubiera cobrado a favor de Perú un penal (en el caso real lo cambió por un tiro libre indirecto, injustamente) y que Cubillas hubiera puesto el primero para que los peruanos se fueran con la ventaja a favor ante la sorpresa de los brasileños y el público en general. Que en la complementaria, en un partido jugado al límite por los nuestros, habría algunas amarillas de por medio, como alguna sobre De la Torre sobre Gerson, tras lo cual -entonces sí- se lo sustituiría por José Fernández. Que con una defensa a ultranza Perú mantendría el marcador, quizá con el 'Colorado' Cruzado como segundo relevo, o que quizá algún contragolpe hubiera permitido esbozar otra sonrisa como la de los dientes del 'Nene'. La imaginación aguanta todo.
Destinos diferentes
Sin duda, el éxito habría llevado a Didi a lo más alto en el termómetro popular. Y, sin duda, su estancia en el Perú habría sido más larga, quedándose con la selección para las Eliminatorias a Alemania 1974 y, posiblemente, clasificando a una gran camada de jugadores a este Mundial. Esto, claro, si Brasil no lo hubiera llamado antes para recomponer su selección.
Con la resaca de lo ocurrido, los jugadores peruanos se alistarían para enfrentarse a Uruguay en las semifinales, tratando de avasallar a su rival con toda la confianza que le significaba haber derrotado al favorito del torneo. Es imposible prever cómo podría haber terminado ese partido, pero aquel Uruguay de Máspoli era tan sólido que creer en dos hazañas mundialistas seguidad (o tres, considerando la de Bulgaria) suena algo difícil.
Lo que sí resulta concreto vislumbrar es que el impacto mediático de Perú habría traído rumbos diferentes para los jugadores más destacados de la selección. Teófilo Cubillas no habría esperado mucho para irse al extranjero y al termino del Mundial, quizá habría estado en un equipo europeo de más envergadura que el FC Basel -al cual se marchó en 1973- o en el mismo Brasil. Roberto Chale no habría esperado tanto para tener su primera incursión en el extranjero (recién salió en 1978 a la Universidad Católica de Quito) y, por qué no, se habría unido al Nene y a Ramón Mifflin, quien habría adelantado su paso por el Santos brasileño. Así el mercado brasileño habría estado más abierto a los futbolistas peruanos, reforzado esto por la influencia de Didí.
¿Seguiría siendo el Rei?
Si bien no se puede afirmar rotundamente que la no obtención del título del Mundial México 1970 habría significado una gran merma en la exitosa carrera de Pelé, es necesario señalar que su figura como máximo exponente de este deporte hubiera entrado en cuestionamientos producto de lo conseguido por Diego Armando Maradona años después.
Más allá del fabuloso equipo brasileño conformado por el gran Roberto Rivelino -con sus precisos pases largos-, Eduardo Gonçalves 'Tostao' -con su habilidad para jugar de espaldas-, Jairzinho -un rematador de primera clase- y un largo etcétera, Pelé era sin lugar a dudas el estandarte del que quizá haya sido el mejor equipo de todos los tiempos. Y algo muy importante es que si bien ORei ya había obtenido los Mundiales de 1958 y 1962, en ambas competencias su papel no fue precisamente el principal.
En tierras escandinavas, fue un prometedor joven que deslumbró al mundo; pero la figura máxima de ese Mundial, según la prensa de la época, fue nadie menos que el propio Didí, quien acabó siendo contratado al término del torneo por el Real Madrid de Di Stéfano y compañía. Y en Chile, como es sabido, una lesión lo marginó del torneo en primera fase y acabó siendo reemplazado por Amarildo. Por eso, la obtención de la Copa del Mundo en tierras aztecas es el evento principal que hace que Pelé sea considerado el mejor futbolista de todos los tiempos.
Dejando de lado los favoritismos hacia la figura del brasileño o Maradona en la discusión sobre el mejor jugador de la historia, el hecho no ganar el Mundial de México -y de perder contra Perú- le habría significado un gran "pero" a Pelé en la comparación. Quién sabe: si Zinedine Zidane no le hubiera propinado el cabezazo a Marco Materazzi -otro Virtual Replay para dentro de unos años-, quizá el francés habría sido el único campeón del mundo en dos ocasiones siendo indiscutida figura en ambas.
Ni Galeano podría haberlo ilustrado
En cualquier caso, la eliminación del 'Scratch' en cuartos de final ante la selección peruana habría desencadenado una crisis de proporciones en el fútbol brasileño. Tras el golpe que había significado Inglaterra 1966, solo el 'Maracanazo' habría podido ser comparable con la magnitud de la debacle verdeamarelha quedándose fuera ante un Perú, por más que este entonces hubiera tenido también jugadores de excelsa calidad.
Lejos de la alegría del jogo bonito, la apresurada y sorpresiva eliminación habría hecho que los nombres de Rivelino, Tostao o Jairzinho hubieran sido tratados como parte de la historia negra del balompié de ese país. Ya Eduardo Galeano había compuesto una memorable frase para ilustrar la desazón y tristeza del pueblo brasileño: Los moribundos demoraron su muerte y los bebés apresuraron su nacimiento. Río de Janeiro, 16 de julio de 1950, estadio de Maracaná: la noche anterior, nadie podía dormir; y la mañana siguiente, nadie quería despertar. Solo que ahora el 14 de junio de 1970 y la cuidad de Guadalajara serían el tiempo y el lugar prohibidos de recordar.
Finalmente, Mario 'Lobo' Zagalo no habría podido transformarse en el primer personaje en levantar la Copa del Mundo como entrenador y jugador. Su nombre como campeón de Suecia 1958 habría quedado en la anécdota, y de ningún modo habría participado en las campañas del 'Scratch' en 1994 y 1998. Eso sí: no lo habría investigado el Congreso de su país. El de acá, en cambio, no habría podido hacer senador vitalicio a Didí porque entonces no operaba debido al gobierno militar.
Composición fotográfica: Gian Saldarriaga / DeChalaca.com
Fotos, recortes e imágenes: libro 'Goles con Historia', Teodoro Salazar Canaval; taringa.net; om4ever.com; arkivperu.com; lt-footballprogrammes.co.uk

Muchas felicitaciones dechalaca, los sigo desde el 2007 y se estan convirtiendo en grandes, sigan con la buena actitud y felicitaciones a aquel que pudo convertir esos goles en un virtual riplay. Saludos.
¿Qué tal? Saludo tu interesante comentario y reafirmo varias partes de este; sin embargo, tengo una corrección que hacer: Pedro González, ex jugador de Sporting Cristal, Universitario, Defensor Lima y Sport Boys (club en el cual se retiró), no jugó un solo minuto en México 1970.
Un abrazo y sigue leyéndonos.
Didi hizo lo que pudo y no creo que le podamos reprochar una presunta debilidad hacia su pais de origen al punto de perjudicar tacticamente a la seleccion que le daba de comer.
Qué Peru estuvo en cuartos? Estupendo pero en esa época bastaba superar la primera fase para llegar a esas instancias, en todo caso mejor me quedo con la primera vuelta del Mundial de 1978 donde Peru quedo primero en un grupo dificilisimo. Si hacemos abstraccion de Alemania que siempre fue potencia el grupo de 1970 era asequible para cualquier equipo sudamericano relativamente decente lo que a mi juicio relativiza la performance del combinado nacional en aquella justa.
COINCIDO CON EL AMIGO VILLANUEVA CON NUETROS QUERIDOS BARRIOS ALTOS (CHOCATELA),HASTA HACE POCO EL CLUB LUSITANIA ERA SOLO UN CLUB DE REUNIONES Y TIMBEO AHORA NO SE Y POENSAR QUE ESE CLUB IGUAL QUE EL UNION AMERICA DE LOS BARRIOS ALTOS JUGARON EN LA PIMERA PROFESIONAL Y CUNATOS BUENOS PROYECTOS DE BUENOS FUTBOLISTAS SE HAN PERDIDO EM EL VICIO Y EL CRIMEN.
Acabo de conocer este blog. Que bueno que se revalore con el
excelente nombre Dechalaca, el footboll peruano que tanto ha
dado a este deporte.
Ahora escuchamos a periodistas peruanos (que sin sustento -quiza
un buen estudio de la historia-) le llaman chilena a la chalaca, increíble
(el último caso ha sido el de Berrenechea en su programa Los Titulares).
En cualquier momento se despierta el Mocho Rosaco y con un cocacho
lo manda a comer sus choritos a la chilena.
El football es mi deporte y lo aprendí en el Callao.
Felicitaciones
José Delleìane
http://antesqueseacabe.lamula.pe/about/