Universitario 1974: Las estrellas del 74
La década de los setenta no fue particularmente buena, en materia de títulos, para Universitario de Deportes. Si bien consolidó una imagen, hoy algo desteñida, de ser un cuadro copero gracias a sus destacadas intervenciones en la Copa Libertadores, en los torneos Descentralizados logró dos títulos. No es poco, pero tampoco puede apreciársele tanto cuando se recuerda que Alianza Lima y Sporting Cristal consiguieron tres títulos cada uno. Eso cuando se revisa la década en conjunto, pero en 1974 la familia crema sí que se dio el gusto de disfrutar uno de los mejores equipos que tuvo en su riquísima historia: mantuvo un invicto de 36 partidos que recién resignó cuando ya se había hecho del título de campeón. Contó con un gran técnico, un conocedor como Juan Eduardo Hohberg. Tuvo una delantera temible a la que si le dabas un ‘cachito’ te llenaba la canasta. Y al fondo, presentó una defensa de granito que recibió menos goles que los partidos que jugó.
El ‘Verdugo’ oriental
El director técnico de este gran equipo merengue fue el uruguayo Juan Eduardo Hohberg, aquel que cuatro años antes dirigió a su selección en el Mundial de México y que cuatro años después conseguiría el bicampeonato con Alianza Lima. Cuando jugador, se lo conoció como el ‘Verdugo’. Entonces jugó el Mundial de Suiza, donde marcó tres goles, y ganó siete veces el campeonato uruguayo -del que fue goleador en dos oportunidades-, además de la Copa Libertadores de 1960.
Como entrenador del equipo que aquí recordamos, supo emplear oportunamente los sistemas que en ese entonces predominaban en el universo fútbol. Hohberg hacía jugar a la 'U' con un 4-3-3 como también mandaba un 4-2-4 según las necesidades del partido. Incluso intercambiaba estos esquemas en un mismo encuentro.
Este hombre de fútbol empezó a enamorarse del Perú con este equipo. Luego trabajó en Alianza, Aurich y Municipal. Nunca más se quiso ir de nuestro país y aquí se quedó a residir hasta que falleció en 1992.
No pasaba nadie
La crema de Hohberg empezó con Humberto Horacio Ballesteros en el arco; sin embargo, ‘HH’ tuvo que ceder su puesto, con el correr de los partidos a Luis Rubiños quien disputó más encuentros en aquella temporada. Así entonces, la oncena usual tuvo a 'Lucho' en el pórtico, mientras que en la defensa se lucían don Eleazar Soria como marcador de punta derecho, el capitán Héctor Chumpitaz, Fernando ‘Gato’ Cuéllar y Juan Manuel Toyco, quien en todo el año no se cansó de arar el carril izquierdo. Cuando Cuéllar no estaba, su posición era tomada por Carlos Carbonell.
Un dato para destacar de esta defensa que apenas permitió 46 goles en 47 partidos es que cada uno de sus integrantes consiguió anotar. Y no pocas veces. ‘Chumpi’, siempre aguerrido no solo en defensa sino también cuando pasaba al ataque, marcó seis veces en el año. El ‘Gato’ Cuéllar estaba ahí nomás en coraje y también en capacidad goleadora: anotó cuatro veces. Soria se demoró en ‘mojar’, recién lo logró en la fecha 22, pero desde entonces hasta el final sumó cinco goles. Toyco trabajaba más para el equipo, pero aún así se dio maña para anotarle a León el día que la 'U' le ganó al cuadro huanuqueño por 3-1. Y Carlos Carbonell, quien tuvo menos inclusiones en el equipo titular, hizo un gol cuando los cremas derrotaron 4-0 al Alfonso Ugarte de Puno.
Algunas veces, claro, esta magnífica defensa tuvo problemas. Como que en cinco oportunidades le hicieron tres goles, pero a cambio entregó el arco en cero en 21 ocasiones. Entre estas, cuatro fueron de manera consecutiva, mientras que en dichos partidos consiguió marcar nueve goles. ¿La curiosidad? Solo uno de ellos fue logrado por el goleador Oswaldo Ramírez.
El complemento de la sólida zaga fue la volante. Los integrantes de la línea media del equipo se encargaban más de recuperar que de sumarse a la ofensiva. No era necesario trepar: arriba había puro monstruo. Siempre (o casi siempre) estuvieron Julio Aparicio y Rubén Techera. Ellos eran los dos que jugaban cuando se hacía 4-2-4, pero si era 4-3-3 se les sumaba Carlos Romero o César Peralta. Los volantes también eran goleadores, especialmente Techera, quien marcó ocho veces. Los otros lo hicieron bastante menos, como Peralta, que solo le anotó al Piérola en Arequipa. Anecdótico resulta que ese mismo día, Aparicio hizo otro de los tres goles con que ganó la 'U' y el autogol de Salguero cerró la cuenta.
Hicieron un 69
El ataque de la 'U' del ’74 era francamente fogoso. Entre los delanteros hicieron 69 goles. Ellos eran Juan Carlos Oblitas, Percy Rojas y Oswaldo Ramírez, cuando jugaban tres atacantes. Si eran cuatro los que disponía Hohberg, estaba también Marcos Portilla -quien también tuvo oportunidad de ser titular muchas veces- o si no un chiquillo que empezaba a hacerse un nombre (¿les suena Juan José Oré?). Un grupo de abusivos que hizo que Universitario termine solo cuatro partidos sin anotar en todo el año.
Percy Rojas fue quien menos suerte tuvo de cara al arco. A pesar de marcar solo siete goles fue contratado por Independiente de Avellaneda para la siguiente temporada, en la que ganaría la Copa Libertadores junto a Eleazar Soria. Marcos Portilla hizo ocho y Juan Carlos Oblitas marcó 12 veces. La sorpresa fue la actuación del entonces juvenil Juan José Oré. ‘JJ’, ya desde chiquito, mostró su amplísima capacidad goleadora; por suerte para la crema, lo hizo en este gran equipo que lo volvió una pieza muy importante para su funcionamiento. Dieciséis dianas, con dos dobletes incluídos, fue el saldo que dejó Oré en su año de estreno como futbolista.
Un párrafo aparte merece el goleador de aquel equipo. Oswaldo ‘Cachito’ Ramírez no se cansó de hacer goles en todo el año. Logró un hat-trick y tres dobletes, antes de que le apague la mecha goleadora en la fecha 41. No consiguió marcar en la liguilla final, donde el equipo se consagraría finalmente campeón, pero para entonces ya había apuntado 26 goles y no se estaba para pedirle más. ‘Cachito’ fue, sin duda, la figura del aquella escuadra plagada de estrellas.
Las cataneadas
Este equipo crema fue una verdadera máquina que muchas veces se pasó de revoluciones y consiguió varias goleadas a lo largo del torneo. Para empezar nomás, en la primera fecha consiguió un motivador 1-5, en Trujillo, frente a Manucci. Ese día, ‘Cachito’ metió tres y Portilla puso los otros dos. Después le hizo lo mismo al ‘Muni’, en la decimotercera jornada. Aquella vez, los ánimos ediles estaban por los suelos y la 'U' aprovechó para barrerlos. Oré anotó dos veces; Oblitas, una. Los otros dos los marcó, ¿quién más? ‘Cachito’ Ramírez.
Pero a falta de más partidos ganados por 5-1, la 'U' ganó cuatro veces por 4-0 -ó 0-4, para mantener el rigor-. La primera víctima fue Alfonso Ugarte en la cuarta fecha. Dos meses después le ganó por el mismo marcador al Deportivo Junín en Huancayo. El 24 de agosto repitió el score frente a su ‘lorna’ favorita, el Carlos A. Mannucci. En aquel encuentro, Percy Rojas logró su único doblete del año. Luego los cremas tendrían que esperar hasta el año siguiente (porque el Descentralizado terminó de jugarse en marzo del ’75), exactamente hasta el 5 de enero para ganarle por 0-4 a Frigorífico. Ese equipo tenía un nombre muy útil para el verano que se iniciaba, pero no para estar en la Primera División. Juan José Oré y Juan Carlos Oblitas hicieron dos goles cada uno en aquel match.
Los partidos más bravos y la vuelta
En este aspecto se puede considerar a los partidos favorables y a los que no dejaron sonrisas. En este último campo se debe recordar el encuentro en que los merengues cayeron, en Lima, frente a Unión Huaral. Ese 1-2 significó un punto de quiebre importantísimo en el desarrollo del resto de la campaña. Era la novena fecha y la 'U' acumulaba su segunda derrota. "Mucho", se dijo a sí mismo el que a la postre sería el campeón, y dio un golpe de timón.
Otro partido importante fue en el que le devolvieron el favor a los naranjeros. En Huaral, Universitario se impuso por 0-3 y con ello no solo tuvo una revancha deportiva, sino que alcanzó al mismo Unión Huaral en la punta de la tabla. Aquel equipo huaralino, que era conducido dentro de campo por el gran ‘Pedrito’ Ruiz, fue un durísimo rival de Universitario en la lucha por el título. Otro 3-0 importante fue el logrado contra Cienciano en la fecha 28. Ese resultado cobró gran valor, no solo por lo abultado del marcador, sino que cortó una antipática racha de cinco partidos seguidos que acabaron en empate. Las crónicas de entonces criticaron al equipo merengue por haberse “olvidado de ganar”, pero poco se consideraba que de esos cinco partidos, tres los jugó de visita en Arequipa, Puno y Piura (frente a Melgar, Ugarte y Grau, respectivamente) y otro fue frente a Sporting Cristal.
Los clásicos también fueron importantes. La 'U' ganó los dos partidos de la primera etapa. Fue 0-2 como visita (Aparicio y Rojas fueron los autores de los goles) y 3-0 de locales (‘Cachito’, don Eleazar y ‘JJ’). Alianza tuvo una venganza bastante escueta cuando se llevó el clásico de la fecha final de la liguilla. Ese fue el primer clásico que se disputó en Matute (llamado “Monumental de Alianza” por un cronista de la época) y el triunfo por 3-1 se quedó en la nueva casa, pero la 'U' ya era campeón y se presentó con suplentes. La presión le jugó en contra a los blanquiazules y no aprovecharon la circunstancia para llevarse una goleada histórica el día de estreno de su estadio.
Una campaña así de buena no podía acabar sino dando la vuelta. Universitario completó 36 partidos sin perder cuando derrotó por 1-0, en la liguilla final, al Unión Tumán. El 23 de febrero, un solo gol de Juan Carlos Oblitas bastó para coronarse como el mejor del Descentralizado de 1974. Un resultado típico de la crema: corto, sobrio, solvente y sin aspavientos. Y así fue que los de Odriozola fueron campeones otra vez.
Composición fotográfica: Gian Saldarriaga / DeChalaca.com
Recortes: revista Ovación
escrito por Kaiser , January 24, 2011
escrito por Alonso , January 24, 2011
Que vengan mas.
escrito por Paulo , January 24, 2011
escrito por Alonso , January 27, 2011
escrito por Antonio , January 27, 2011
escrito por lolo de caujul , March 11, 2011
escrito por Lucho , May 27, 2016
Buen artÃculo.
escrito por Elias , April 21, 2019