República Checa - Grecia: Guerreros checos
El capo: Banda tuya
Buen partido de Petr Jiracek no solo por el tempranero gol, sino también por su compromiso para la marca en el segundo tiempo, cuando Grecia se volcó por el empate. Aun así, hubo otros que destacaron en ambos equipos, en el cuadro heleno, Dimitris Salpingidis, fue clave para la recuperación griega mientras que Tomas Rosicky condujo bien los hilos de su equipo durante el primer tiempo.
La clave: Arremetida del ‘chato’
Luego del golpe del primer gol, Grecia no pudo recuperarse ni meterse en el partido y República Checa sí hizo todo lo contrario. Aprovechó su momento y con un gran pase de Rosicky a Theodor Gebre Selassie que sacó un pase atrás que Vaclav Pilar anotó de arremetida. Los dos goles fueron difíciles de recuperar para los griegos en el resto del partido.
El estadio: Color rojo
Otro gran estadio y otro gran marco de público en Warclaw, Polonia. En esta ocasión, la mayoría fue checa. Así, el rojo dominó la mayor parte de las gradas del estadio, aunque la hinchada griega se hizo escuchar también. Las caras pintadas y los disfraces de guerrero griego no faltaron.
El duelo: Dos contra uno
La banda derecha fue la más fuerte de República Checa en ataque y curiosamente también fue por donde más atacó Grecia cuando el partido iba 1-2. Jiracek, el mejor del partido, chocó siempre con el lateral izquierdo heleno José Holebas a quien le ganó usualmente el duelo. En el segundo tiempo, el volante checo tuvo que preocuparse en controlarlo para que no se juntara con Giorgos Samaras. Fue un lindo enfrentamiento que terminó ganando el checo, por poco.
El cambiazo: Se fue Mozart
Tomas Rosicky no regresó al campo tras el medio tiempo, probablemente por un tema de cansancio físico. Su equipo lo extrañó y mucho. Daniel Kolar no fue ese “cerebro” que necesitaba su equipo y Grecia comenzó a ganarle la mitad de la cancha. La ausencia de su mejor hombre hizo también que las opciones de gol checas se redujeran.
La calamidad: Se le pasó
Los dos goles rápidos de República Checa terminó por sepultar las opciones griegas en el partido, o en todo caso puso todo cuesta arriba. Kostas Chalkias fue responsable del segundo gol (aunque podría haber hecho algo más en el primero) luego de manotear sin fuerza el centro raso de Gebre Selassie. Una molestia en la espalda hizo que sea cambiado en el primer tiempo, lo que no le permitió recuperar su bajo nivel con atajadas de mérito posteriores.
El jugadón: Toque largo
Cuando Grecia se había tirado hacia adelante, República Checa tuvo una contra muy buena. Por la banda izquierda, David Limbersky combinó bien con Pilar que se escapó por la banda izquierda. El ‘14’ llegó al área pero sobre el final tuvo un control largo y perdió el balón.
Kazuki Ito: Sin problemas en francés
La terna francesa encabezada por Stéphane Lannoy no tuvo mayores inconvenientes y no tuvo jugadas polémicas. Se reclamó que no hubo offside en la jugada del gol anulado a Grecia en el primer tiempo, pero se pudo ver en la repetición que sí había una pequeña posición de adelanto. Por lo demás, controló el juego fuerte con las amarillas. Sacó las justas.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
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