Los puntos necesarios para llegar al Mundial: La línea ecuatorial

![]() |
Roberto Castro | @rcastrolizarbe Director General |
Las Eliminatorias Sudamericanas son las más difíciles del planeta, y tal aseveración no reviste misterio ni exageración alguna. No solamente es el único de los procesos clasificatorios del planeta en el que los equipos deben enfrentar a todos los demás representantes de su confederación; es sobre todo, por eso mismo, la única Eliminatoria en la que aquel equipo que quiera clasificar deberá enfrentarse ineludiblemente a tres excampeones del mundo. Esto no ocurre, por ejemplo, en Europa, donde -salvo la rarísima excepción registrada este 2018 de que España e Italia compartan un mismo grupo eliminatorio- la generalidad es que para llegar al Mundial un equipo enfrente, a lo sumo, a un excampeón o, en al menos cuatro grupos de nueve, se clasifique sin haberse topado a ninguno.
Así, muy poco puede predecirse de un sistema de torneo muy simple -partidos de ida y vuelta todos contra todos, en el cual los que suman más puntos clasifican directamente o van a repechaje, en función del número de cupos- pero de desenlace complejo. Por la paridad de los equipos, el peso de algunas localías y el desnivel que los buenos o malos momentos circunstanciales de las dos grandes potencias (Brasil y Argentina) hacen en contra o a favor, respectivamente, de sus ocasionales rivales en términos de puntos ganados o perdidos. Esto último significa, por ejemplo, entender que el 'Scratch' de Dunga que perdió 2-0 en Santiago en la fecha 1 de la actual Eliminatoria no es el mismo rival que el que, dirigido por Tite, goleó 0-3 a Ecuador en Quito en la fecha 9.
El punto crítico
Entonces, ¿qué es matemáticamente determinable en un torneo tan reñido a la luz de las seis Eliminatorias que ya llevan disputándose con el mismo sistema? Única y exclusivamente, un número crítico: que la cantidad de puntos equivalente al número de partidos que un equipo disputa en casa es la cantidad mínima necesaria para clasificar directamente al Mundial. Nunca ha pasado que un equipo se haga de uno de los cupos directos sin sumar ese puntaje. A revisar caso por caso.
- Eliminatorias a Francia 1998 (9 equipos, 24 puntos jugados por cada uno como local): Clasificaron directamente Argentina (30), Paraguay (29), Colombia (28) y Chile (25). No hubo repechaje, por lo cual Perú (25) quedó eliminado por diferencia de goles.
- Eliminatorias a Corea/Japón 2002 (10 equipos, 27 puntos jugados por cada uno como local): Clasificaron directamente Argentina (43), Ecuador (31), Brasil (30) y Paraguay (30). Vía repechaje, clasificó Uruguay (27), quien dejó fuera por diferencia de goles a Colombia (27), el otro equipo que había alcanzado el número crítico. Nótese en este caso que la magnífica campaña de la Argentina de Marcelo Bielsa amplió ostensiblemente el margen del líder respecto de los equipos eliminados.
- Eliminatorias a Alemania 2006 (10 equipos, 27 puntos jugados por cada uno como local): Clasificaron directamente Brasil (34), Argentina (34), Ecuador (28) y Paraguay (28). El repechaje lo disputó Uruguay (25), que estuvo 2 unidades por debajo del puntaje crítico en el que fue uno de los procesos clasificatorios más parejos; la celeste quedó eliminada a manos de Australia.
- Eliminatorias a Sudáfrica 2010 (10 equipos, 27 puntos jugados por cada uno como local): Clasificaron directamente Brasil (34), Chile (33), Paraguay (33) y Argentina (28). Vía repechaje, clasificó Uruguay (24), que logró el pasaje pese a haber quedado 3 unidades por debajo del puntaje crítico.
- Eliminatorias a Brasil 2014 (9 equipos, 24 puntos jugados por cada uno como local): Clasificaron directamente Argentina (32), Colombia (30), Chile (28) y Ecuador (25). Vía repechaje, clasificó Uruguay (25), que esa vez sí estuvo por encima del puntaje crítico.
Entonces, ¿qué puede inferirse para la Eliminatoria Sudamericana en curso?
Primero, que con 10 equipos en competencia, ningún equipo que no llegue a sumar 27 puntos podrá clasificar directamente al Mundial. Y segundo, que muy probablemente ningún equipo con menos de 24 puntos pueda aspirar a alcanzar el repechaje.
Así las cosas, el único equipo que por el momento ha alcanzado el puntaje crítico es Brasil: ya suma 27, a la vera de los 18 puntos al hilo que sumó de la mano de Tite en este segundo semestre de 2016. Uruguay (23), Ecuador (20), Chile (20), Argentina (19) y hasta Colombia (18) están en condiciones matemáticas de alcanzarlo también solamente ganando los partidos en casa que les quedan (en las seis fechas que restan, cada cual jugará tres como local y tres de visitante). Además, Paraguay (15) podría alcanzar solo con triunfos en casa las 24 unidades (puntaje crítico menos 3) que a la luz de los antecedentes exige -cuanto menos- el repechaje.
¿Eso quiere decir que los demás ya están matemáticamente fuera?
No. Quiere decir que los demás están obligados, cuanto menos, a sumar de visita todo lo que ya perdieron como locales, además de sumar el equivalente a los 9 puntos que les quedan en casa. Así por ejemplo, Perú, que tiene 14 puntos, necesita no solo ganarle en casa a Uruguay, Ecuador y Colombia; también requiere sumar al menos 1 punto más afuera si quiere tentar el repechaje y 4 si pretende clasificar directamente. Y si, por ejemplo, Perú pierde puntos en casa ante los tres rivales citados, deberá recuperar fuera esa cantidad de puntos perdidos.
Lo anterior conduce a entender que la variable importante para los entrenadores en esta Eliminatoria no es otra sino la desviación de la cantidad de puntos actualmente obtenidos respecto de los disputados en casa. Así, para continuar con el ejemplo peruano, la blanquirroja cedió en casa ya 10 puntos: 3 contra Chile (derrota), 3 contra Brasil (derrota), 2 contra Venezuela (empate) y 2 contra Argentina (empate). De esos, recuperó 6 afuera: 3 contra Bolivia (triunfo en mesa) y 3 contra Paraguay (triunfo). Por eso, precisamente, es que necesita 4 puntos más si quiere clasificar directamente.
En esa misma línea analítica, puede decirse que tienen desviación positiva actualmente Brasil (perdió 2 puntos en casa pero sumó 11 afuera), Ecuador (perdió 5 puntos en casa pero sumó 7 afuera), Chile (perdió 5 puntos en casa pero sumó 7 afuera) y hasta Argentina (perdió 8 puntos en casa pero sumó 9 afuera). Uruguay, que sumó todo lo que jugó en casa, está exactamente sobre la línea. Y por debajo, además de Perú, están Paraguay (perdió 10 puntos en casa y solo sumó 7 afuera), Bolivia (perdió 11 puntos en casa y no sumó afuera) y Venezuela (perdió 14 puntos en casa y solo sumó 1 afuera).
Entonces, ¿lo anterior quiere decir que de los 18 puntos que le quedan en juego, Perú necesita 10 puntos para el repechaje y 13 para la clasificación directa?
No. Quiere decir que eso esas son las cantidades mínimas que necesita para aspirar a ambos objetivos, pero no que le bastarán. Dicho en terminología matemática, es la condición necesaria, pero no la suficiente.
Por lo demás, el juego de los números deja margen para todo en Sudamérica, excepto para meterse por la ventana a la fiesta cuando el crédito no basta. La mejor prueba de este argumento matemático la ofrece el equipo que llegó a mundiales por primera vez en el siglo XXI haciéndose fuerte de local: Ecuador, que en 2002 estuvo 4 unidades por encima del puntaje crítico, en 2006 estuvo 1 por arriba y en 2014, también 1 por arriba. Por eso, la línea ecuatorial en las Eliminatorias de Conmebol la traza la cantidad de puntos obtenidos respecto del puntaje máximo que la localía permite.
Fotos: El Gráfico Argentina, Reuters, Raúl Chávarry / DeChalaca.com, EFE
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
