Buffet en casa vieja
Se debió esperar toda una Eliminatoria para que la selección peruana tenga la ocasión de reaparecer en el escenario que mejores recuerdos le trae, el ahora remozado coloso de la calle José Díaz, lo que ha coincidido con un partido que se espera sea el paso inicial para dejar atrás años de frustración. Al frente estará el equipo paraguayo, que no guarda precisamente buenos recuerdos de sus anteriores visitas al Nacional en partidos oficiales. Sin embargo, esta historia no es reciente, ya que en el primer enfrentamieto entre ambos en territorio peruano la victoria se quedó en casa.
Marcando historia
Era 1939, año en el
que las butacas de madera del Stadium Nacional albergaron el Campeonato
Sudamericano que se desarrolló en Lima durante el verano. Con el torneo a
mitad de camino, la jornada doble que se pactó para el domingo 29 de
enero podía resultar clave para definir qué selecciones podian seguir
con opción de convertirse en el nuevo monarca del continente tras la
deserción de Argentina (el vigente campeón) a participar en la
competición.
En el preliminar de aquel día, Uruguay debía medirse contra Chile, un encuentro en el que los charrúas partían como favoritos luego de encajarle seis goles a Ecuador en su debut. El combinado sureño, en cambio, llegó muy golpeado a este compromiso, y no solo por haber perdido sus dos primeros partidos en el torneo: cinco días antes, su país fue sacudido por un terremoto que hasta la actualidad ha dejado su huella como el más fatídico en pérdidas humanas en la historia chilena. Por ello, a modo de homenaje, la jornada futbolística empezó con un toque de corneta que dio paso a un sentido minuto de silencio. Al final, el choque culminó con un disputado 3-2 en el marcador a favor de los orientales, que de esa forma alcanzaban a Perú en la cima de la tabla de posiciones con cuatro unidades.
Tiempos para definir
Tras la victoria uruguaya, el conjunto peruano quedó obligado a sacar
los puntos en su partido, al mismo que llegaba con gran apoyo de la
afición local, aunque no tanto de los extranjeros afincados en Lima, que
simpatizaban más con Paraguay tal como los medios de entonces señalaban
en los días previos. Con el arbitraje del chileno Alfredo Vargas y la
asistencia de dos linesman escogidos entre la delegación de jugadores
ecuatorianos, los gritos de ¡Chin Pum Perú! empezaron a sonar en el
estadio cuando los jugadores aparecieron en el campo. Primero salieron los
paraguayos, con una bandera peruana en manos, bajo la guía de su
capitán Jacinto Villalba. Minutos después fue el turno de los jugadores
peruanos con Raúl Chappell al mando, quien obsequió un gallardete al
cuadro rival.
Perú, con el inglés Jack Greenwell como técnico, alineó a Juan Honores
en el arco; Arturo Fernández y Raúl Chappell en defensa; Segundo
'Titina' Castillo, Pablo Pasache y Carlos Tovar en el mediosector;
mientras arriba quedaron 'Prisco' Alcalde, Víctor Bielich, 'Lolo'
Fernández, 'Campolo' Alcalde y Arturo Paredes. Enfrente, el once de
Paraguay fue con Manuel González en la portería; Antonio Invernizzi
junto a Juan Félix Lezcano como defensores; José Ibáñez, Jacinto
Villalba y Diego Ayala en la volante; y para el ataque el quinteto
formado por Marcial Barrios, Tiberio Godoy, Eduardo Mingo, Miguel Ortega
y Ricardo Aquino; todos bajo la dirección del entrenador paraguayo
Manuel Fleitas Solich.
El partido en si se decantó desde el saque inicial peruano, que tomó
la iniciativa en ofensiva teniendo a su línea media como soporte.
Apenas a los 8', Perú dio el primer aviso cuando, tras combinación entre
'Titina', Pasache y Tovar, el balón llegó a los pies de 'Campolo', quien
sacó un remate que culminó chocando en el poste. Tres minutos después,
llegó el primer gol del partido cuando, tras centro de 'Prisco' Alcalde,
Bielich logró eludir a Lezcano en el área para luego ceder el esférico a
un desmarcado 'Lolo' que no esperó para sacar un remate de los suyos:
potente y colocado.
Espectáculo compartido
Ante el constante peligro en su sector, la
pareja central guaraní debió emplearse a fondo para alejar todo lo que
se les acercaba sin importar si era pelota o jugador contrario. Por
ello, las faltas y el juego fuerte empezaron a arreciar. Aún asi, el
dominio del equipo de la franja roja se mantuvo pese a las ocasiones erradas, como un cabezazo de 'Pichín' Bielich que salió desviado.
Quien no falló fue 'Lolo', que a los 30' apareció en el área para, de
cabeza, anidar el balón en la portería paraguaya tras dos corners
seguidos ejecutados por 'Prisco'. Iba 2-0 a favor de Perú, marcador con
el que culminó el primer tiempo pese a las continuas acciones de peligro
generadas por el local.
En el segundo tiempo el trámite resultó el mismo en los primeros minutos
de reinicio, lo que varió solo tras la salida de un golpeado Teodoro
Alcalde para el ingreso de Adelfo Magallanes. Pero el cambio no resultó,
ya que el delantero pasó desapercibido desde que entró al campo, lo que
originó que el juego empezara a cambiar de rumbo con la oncena de
Paraguay en busca del descuento con mayor insistencia. Esa voluntad
guaraní se apagó a los 79' con el tercer gol peruano, anotado de tiro
rasante por 'Campolo' Alcalde tras recibir un balón que 'Lolo' tomó
luego de un centro de Paredes. Con la culminación del partido, Perú
obtuvo no solo el trofeo 'Legación del Paraguay' que el encargado de
negocios de Paraguay en Lima había puesto en juego, sino también la
punta del Sudamericano que en la fecha final se decició a favor de la
selección peruana.
Ahora, 72 años después, Perú y Paraguay se verán nuevamente las caras; esta vez en un torneo diferente, pero en espera que el saldo de entonces se repita para arrancar con pie derecho un renovado ciclo peruano.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diario La Crónica