Foto: AFPUn muy discreto encuentro en el Arena da Baixada, repleto de errores de ambos bandos, vio a Bahía lograr lo impensado: ganar 0-1 y revertir la derrota de la ida. Sin embargo, en los penales el cuadro tricolor prolongó el concierto con pésimas ejecuciones y, así, Atlético Paranaense salvó la papeleta para meterse en semifinales.

BRONCA. Pese a la gran ilusión de los hinchas que colmaron las graderías del Arena da Baixada en busca de ver un espectáculo que llenara las expectativas, el cotejo empezó  con malos síntomas. Ya desde el pitazo inicial se reclamaba por todo: el propio DT de Bahía Enderson Moreira, en más de una ocasión, pisó la raya de límite del terreno de juego para protestar ante el réferi peruano Diego Haro supuestos cobros erróneos. Después los jugadores siguieron el mal ejemplo y empezaron los golpes en el verde.

INTENCIONES. La visita dio por algunos instantes indicios de buen juego. A los 16‘, Junior Brumado anotó en la valla del ‘Furacão’ un gol de buena factura, pero la diana de inmediato fue anulada por una falta previa -no se requirió el VAR-. El fallido gol, un par de jugadas a balón parado y la inauguración del marcador a los 47'+ significaron lo mejor de Bahía en la primera fracción y en todo el encuentro.

LO RESCATABLE. En la volante local, Nikão tuvo un segundo tiempo aceptable. Su accionar por el carril izquierdo causó estragos en la defensa visitante. Su marcador, Nino, no supo cómo controlarlo. Otro que entendió que la gambeta es la mejor herramienta para romper una defensa fue Renan Lodi, quien se juntó precisamente con Nikão para darle alguna chispa de creatividad al cotejo.

Renan Lodi protege el balón ante la presión de Flavio. (Foto: AFP) 

SIN RUMBO. Los llamados referentes de ambos equipos, Lucho González en Atlético Paranaense y Lucas Fonseca en Bahía, no aparecieron durante todo el cotejo. El discreto desempeño de ambos capitanes como líderes de sus respectivas escuadras también influyó en el pésimo espectáculo visto. En el país que se caracteriza por su buen trato al balón, destacaron más las seis tarjetas amarillas mostradas por Haro.  

POR LA ÚNICA VÍA. El partido sobrevivía gracias al gol marcado por Douglas Grolli, y así siguió hasta llegar a la tanda de penales. Ya en la definición desde los doce pasos, los errores siguieron presentes, aunque estaba vez solo del lado de Bahía: el 'Tricolor' erró dos de los tres penales que le tocó lanzar, mientras que el ‘Furacão’ fue infalible. Esta llave de cuartos de final dejó un mal sabor de boca por lo visto en los 180‘, aun cuando Atlético Paranaense siga siendo candidato de fuerza y ahora deba afrontar otro duelo brasileño contra Fluminense.               

Fotos: AFP


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La ficha del Atlético Paranaense 0 (4) - Bahía 1 (1)

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