Minuto 114: Justo en el Blanc
Uno de los escollos más duros que tuvo que superar Francia en su Mundial fue el Paraguay de José Luis Chilavert. Los guaraníes aguantaron estoicamente el cero hasta que apareció Laurent Blanc para quitarles el sueño de los penales y llevar a los bleus a cuartos de final.
Como era característico al inicio de cada partido, Laurent Blanc daba un beso en la pelada al arquero francés Fabien Barthez. Portero y defensa central unían fuerzas en un simbólico acto previo a cada partido para asegurar que el arco de “Les Bleus” quede invicto. Sin embargo, el partido de octavos de final entre Francia y Paraguay en el Mundial de 1998, no sería recordado por el ímpetu defensivo de Blanc sino por el gol que le dio el boleto a Francia a cuartos de final frente a una aguerrida y valiente selección guaraní.
En el estadio Felix Bollaert de Lens, y frente a 31 mil hinchas, franceses y paraguayos disputaron un duelo lleno de tensiones. Al final de los 90 reglamentarios y tras un desmesurado desgaste físico, la estrategia estaba clara. El equipo local tenía que buscar el gol de oro que lo llevase a la siguiente etapa en el menor tiempo posible para recuperar fuerzas y enfrentar a una Italia ya clasificada y más descansada. En la acera contraria, la albirroja aguantaba y rechazaba cada ataque francés con coraje para forzar los penales y buscar en José Luis Chilavert -y la suerte- su permanencia en el Mundial.
El equipo local sufría con el paso del tiempo. Su máxima figuraba, Zinedine Zidane, no jugaba por suspensión y el área paraguaya se volvíainquebrantable por tierra y aire gracias a Francisco Arce, Celso Ayala, Carlos Gamarra y compañía.A falta de un minuto para terminar el primer suplementario, el “mosquetero” Robert Pirés, recoge la pelota cerca al área por el lado derecho y saca un centro preciso para la cabeza de David Trezeguet. En vez de rematar al arco, el franco argentino pivotea la pelota en un gesto técnico fantástico que sorprende a la zaga guaraní y deja solo a Blanc que fulmina el arco de Chilavert con más furia que técnica. Gol de Francia y clasificación.
Barthez corre de un extremo de la cancha a otro para abrazar al autor del gol y compañero de cábalas, mientras el capitán paraguayo levanta a sus soldados caídos en un gesto que dignifica aún más una derrota dura pero tenaz. A la larga, Francia se convertiría en campeona del mundo por primera vez pero en la retina del hincha siempre quedará una selección paraguaya integra; capaz de salir de un estadio derrotada en el marcador, pero nunca en el carácter.
Foto: ole.com.ar; Video: Youtube / Usuario Berurier8623
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