El rojo que manda
A 10' del final Cienciano logró vencer el arco de Penny y venció a Bolognesi por la mínima diferencia con gol de Carlos Solís. Ahora el cuadro imperial comparte la punta del Grupo 4 de la Copa con el Nacional uruguayo y sigue peleando para pasar a la segunda fase de la Copa. Por el otro lado, el equipo de Reynoso aguantó bien, pero el saldo final lo deja con un pie fuera de la Libertadores.
Foto: Diario del Cusco
Capturas: Fox Sports Americas
Sin duda, para ninguno de los dos equipos era útil el empate con miras a seguir en competición en la Copa, pero los arcos parecían cerrados. Todo cambió cuando se abrió
el marcador en el minuto 79, momento en que Solís
metió el testarazo para batir a Penny y sentenciar qué cuadro peruano mantendrá las primeras opciones de pelear por la clasificación en el Grupo 4.
SIN TONO DE GOL
Navarro, que el último fin de semana recibió un duro jalón de orejas de parte de Juvenal Silva por haber sido goleado por la San Martín con un equipo netamente suplente, estaba obligadísimo a sacar adelante el partido. Mandó a la cancha a toda la artillería pesada que le había dado resultados en la Copa, pero le costó más de lo esperado que ella se entendiera en el terreno de juego. Tanto Sawa, Chiroque y Vassallo no hallaban la fórmula para invadir el área tacneña y se perdían en imprecisiones. Juan Carlos Bazalar, como en sus viejos tiempos, era quien mandaba en mitad de cancha, y se animó a echarse encima la conducción del equipo, al punto que se convirtió en factor principal para que se abriera el marcador en la segunda etapa.
Por su parte, Reynoso alineó una formación que le estaba dando resultados durante la mayor parte del primer tiempo; equilibrada defensiva y ofensivamente. Si hubiera seguido apelando a brindar un poco de juego vertical y no meterse tanto atrás como lo hizo durante el segundo tiempo, quizá otra habría sido la historia. Dejó a Gonzales VIgil y Ross en la banca y apostó por una línea de cuatro volantes, conformada por Uribe, Novoa, Linares y Vásquez, y más adelante puso suelto a Ramírez, quien jugaba más adelantado para ayudar en ofensiva al solitario Mostto.
La síntesis del primer tiempo dejó un control de juego por parte del equipo cusqueño, pero también evidenció la fragilidad de la zaga imperial cada vez que 'Bolo' mandaba centros al área. Como un envío de Ramírez para que Mostto la cabeceara al travesaño superior de Juan Flores que causó bastante susto en el Garcilaso.
A DIEZ MINUTOS
Aguantando los ataques del conjunto imperial, el 'Coronel' estaba sacando un resultado que no lo beneficiaba en demasía para sus aspiraciones de clasificación, pero le servía algo para contrarrestar los puntos perdidos en casa frente al Nacional uruguayo. Se animó poco a llegar al arco de Flores, salvo mediante algunas opciones de contragolpe que pudieran encontrar mal parado al conjunto imperial.
Así, el juego empezó a fluir en el equipo cusqueño, y la altura a matar las piernas del conjunto escarlata. Cienciano comenzó a gestar varias oportunidades de marcar, no necesariamente muy claras, pero sí inquietantes. Sawa y Vassallo ya no sabían cómo hacer para que la pelota entrara al arco de Penny. La férrea defensa central conformada por Ostersen y Balbín despejaba toda pelota en el aire, pero a 10 minutos del final se les acabó el oxígeno de tanto saltar. Solís entró como en su casa y de un frentazo incrustó la pelota en el arco de Penny para esclarecer el panorama del Grupo.
'Bolo' tuvo las posibilidades de llevarse un punto a Tacna, pero la desconcentración a poco del final del partido terminó por dejarlo casi eliminado de la Copa. Navarro, en cambio, salvó los puntos que le compensaban la goleada del fin de semana, y pese a que su equipo no haya hecho un gran partido, en el Cusco ya se sabe -por experiencia propia- que en la Copa todo lo que signifique sumar en casa reditúa a fin de cuentas, y mucho.
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