For Éber malón
Boca pegó con precisión quirúrgica para doblegar por 2-0 a un Cruzeiro que se vio perjudicado por la absurda expulsión de Dedé. El increíble yerro del réferi paraguayo Éber Aquino -pese a la utilización del VAR- distorsionó el tramo final de un partido entretenido y condicionó la revancha para los de Belo Horizonte.
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Mario Azabache | @Mario_Azabache Columnista Editorial |
SALDO PENDIENTE. Ni Boca Juniors ni Cruzeiro cuentan con el privilegio de lucirse actualmente en lo más alto de sus respectivas ligas. Sin embargo, tampoco es que ambos la pasen mal a nivel doméstico: los de Guillermo Barros Schelotto marchan en la tercera casilla de la Superliga argentina -a 3 unidades del líder Racing- y los de Mano Menezes aparecen en el sétimo lugar del certamen brasileño -a 16 puntos del líder Sao Paulo-. Pero lo que queda claro es que el gran objetivo de ambos para este semestre radica en conquistar el título de la Libertadores 2018.
NEUTRALIZÓ AL ENEMIGO. El plan del elenco visitante se ejecutó casi a la perfección en la primera media hora de juego: con un despliegue impecable de Henrique y Bruno Silva en la zona de contención, los de casa no hallaban la forma de conectar a Pablo Pérez -usual primera opción de pase- con el eje ofensivo xeneize. Así, Boca solo quedaba a expensas de los intentos individuales que se podían generar desde los flancos. Una fórmula predecible que parecía condenar a la intrascendencia a Nahitan Nández y Cristian Pavón.
FROTE LA LÁMPARA. Pero bastó una acción asociativa para torcer el trámite en un par de segundos: a los 36', Pablo Pérez filtró un pase puñal para dejar a Mauro Zárate en el mano a mano con el arquero Fábio. Y el ex Vélez Sarsfield definió con una calidad innata para colocar el primero, que generó un gran desahogo en 'La Bombonera'. La muralla mineira se había derribado y los locales mejoraron su semblante colectivo a partir de ello.
RITMO FRENÉTICO. La etapa complementaria trajo consigo el tramo más emotivo de la noche porteña. A los 48', Rafinha le sombreó el esférico a Esteban Andrada y, cuando ya se disponían a celebrar el empate ante la TV en Belo Horizonte, apareció Wilmar Barrios para salvar al arco local en la misma raya. Instantes después, los xeneizes, al más puro estilo de los antiguos malones de las pampas gauchas, respondieron con un remate de Mauro Zárate que impactó en el poste derecho. Una especie de ida y vuelta que sugería todos los indicios para desembocar en algún gol más para la cuenta global.
¿PARA QUÉ TE TRAJE? En medio de esa intensidad y desenfreno, un craso error del paraguayo Éber Aquino condicionó este primer round y, por qué no decirlo, el resto de la llave: tras apelar al VAR, el árbitro expulsó a Dedé por un choque fortuito con Esteban Andrada. Una decisión absurda que se complementó con el buen gol de Pablo Pérez, a los 82', para castigar a Cruzeiro con un 2-0 que deja una tarea difícil de remontar para la revancha en el 'Mineirao'.
Fotos: Conmebol
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La ficha del Boca 2 - Cruzeiro 0
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