Foto: GloboesporteEn un partido lleno de goles, Gremio venció por 3-1 a un sensible y a ratos frustrado Rosario Cenral. Brilló con luz propia Leonardo, por su actuación decorosa y sus goles, que le abren al tricolor gaúcho la ruta hacia los octavos de final.

Miguel Marca | @migueelmarca
Redactor

El Capo: Lateral constante y elegante

Leonardo jugó un partido con un rendimiento muy alto. Su participación en el campo contrario denotó autoridad y mucho aplomo. Anotó dos goles, uno tras un pase de Jean Pyerre y otro en el cual el lateral derecho negriazul sacó un tiro cruzado imposible para el guardameta Jeremías Ledesma.

La Pizarra: El balón no se negocia

Renato Gaúcho dispuso un 4-3-3 con mucho despliegue por las bandas. Entre el buen Everton y André Felipe atacaban la endeble zona lateral de Rosario Central. La volante de Gremio cumplía una labor determinante al recuperar y repartir el balón con buenos pases y alta efectividad. En esa zona Maicon, el capitán, es quien silenciosamente cumple la labor más importante.

Quien no pudo revertir la situación fue Diego Cocca. El exentrenador de Racing Club mandó 4-2-3-1 que careció de un hombre desequilibrante; alguien que no sea estático y haga jugar a sus compañeros. Las pocas veces que Rosario Central tuvo el balón, lo desperdició en balones largos que pocas veces causaban sorpresa.

La Clave: El distinto

Everton supera en el duelo a Molina. (Foto: Vavel) 

Everton se divierte con el balón a cada momento, con su objetivo puesto en el arco contrario. El extremo amaga, lucha, recupera, distribuye y sorprende. Si bien el orden táctico prima en el once de Renato Gaúcho, es Everton quien tiene pase para moverse en todo lado y causar dolores de cabeza al rival.

La Calamidad: Sin rencores, André

Corría el minuto 70 del encuentro cuando, tras un tiro de esquina a favor del cuadro canalla, Leonardo recuperó la pelota y se la dio a André Felipe, quien desde su área corrió con destino el arco contrario. Tras esa larga carrera, ya a unos 20 metros del pórtico de Jeremías Ledesma, el delantero local se apresuró y remató: quién sabe si lo hizo por desesperación o ahogo, pero lo cierto que el balón tuvo como destino un cartel publicitario que estaba a unos 10 metros de distancia de la portería rosarina.

El Tapadón: Cuando se le requirió, siempre estuvo

Paulo Victor apareció a los 73' con una mano salvadora tras un cabezazo potente y con destino de gol de Germán Herrera. El balón venía tras un centro del lado derecho y el delantero saltó para impactar el balón, pero allí estaba, seguro, el portero de Gremio.

El Jugadón: Con pase al volante

Jean Pyerre avanza con seguridad ante la presión de Villagra. (Foto: Prensa AFA) 

Los ataques de Gremio se daban por el lado izquierdo. Everton, quien disfrutaba pasar y regresar por ese lado venía avisando lo peligroso y determinante que podía ser. Por ello, a los 30’, apareció para centrar al pie de Jean Pyerre, quien con exquisitez colocó el balón a un lado del arquero Jeremías Ledesma y se quedó inmóvil mientras el balón entraba suavemente.

La Cancha: De buenos pasajes

El público en el Arena do Gremio estuvo a la altura de un cotejo de Copa Libertadores. Como todo estadio brasileño, el escenario gaúcho se mostraba lleno en todas la tribuna habilitadas. De más está decir que el campo lució en magnífico estado para jugar al fútbol en primer nivel.

Kazuki Ito: Rojas es puro amarillas

La cuarteta encabezada por Andrés Rojas se robó parte del show. En jugadas intrascendentes aparecía el árbitro colombiano; y en jugadas en las que realmente se lo requería, brillaba por su ausencia. Por otro lado, Rojas repartió tarjetas sin discriminación alguna y cuajó una actuación apenas regular.

Los Goles

Fotos: Globoesporte, Vavel, Prensa AFA


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La ficha del Gremio 1 - Rosario Central 0

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