Canal de crecimiento
Panamá afronta la Copa América Centenario con un plantel experimentado que se conoce a la perfección y que complicará a más de uno. Comandados por los héroes Blas Pérez y Luis Tejada, los ‘Canaleros’ buscarán el pase a cuartos en su primera participación en este certamen continental.
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Adrián Cabrejo | @adriancabp Director periodístico |
El fútbol panameño ha experimentado un notable crecimiento en tiempos recientes. Tras quedar literalmente a segundos de clasificar al repechaje contra Nueva Zelanda para Brasil 2014, Panamá puso fin al proceso encabezado por los hermanos Dely Valdés y confió en un experimentado Hernán Darío Gómez. El Bolillo es el encargado de darle un salto de calidad a un seleccionado que afronta su último proceso con varias de sus figuras.
El técnico: Hernán Darío Gómez
Tan polémico como relativamente exitoso a nivel de selecciones. Hernán Darío Gómez dirige a su cuarta selección con la aspiración de dirigir en una Copa del Mundo por tercera ocasión. El popular 'Bolillo' llegó a Panamá con la intención de darle un salto de calidad a un cuadro que ya ha crecido bastante en la década pasada y que intenta dar el zarpazo en la Concacaf. Tiene a favor la experiencia en selecciones como Colombia, Ecuador y Guatemala. En contra la desconcentración de un plantel que se conoce pero que tiende a entrar en lagunas durante algunos tramos de los partidos.
La propuesta
El Bolillo suele proponer un equipo compacto que pueda tener equilibrio en la mitad de la cancha para aprovechar la potencia y fuerza ofensiva que le ofrecen sus dos tanques en el ataque. Se entiende que el esquema a utilizar sería un 4-trapecio-2 con Felipe Baloy como el capataz en el fondo al lado de Harold Cummings. Aníbal Godoy y Valentín Pimentel serían los encargados de la primera línea de volantes, dejando más adelantados a Alberto Quintero y Ricardo Buitrago. El ataque es todo de Luis Tejada y Blas Pérez.
El pentágono
Ataque: Gol asegurado (4 estrellas)
Es posiblemente lo mejor y lo más reconocido que tiene Panamá. Luis Tejada y Blas Pérez tomaron con maestría el legado dejado por los hermanos Dely Valdés y se constituyeron como los referentes y como los principales embajadores del fútbol de su país. Los Canaleros son un peligro para cualquiera con dos tanques arriba que todo lo ven gol, pero que además tienen el suficiente talento como para bajar a buscar el balón.
Defensa: El caudillo y poco más (2 estrellas)
Es quizás el punto más flaco del seleccionado panameño. Todavía cuentan con la presencia del experimentado Felipe Baloy, quien parece ser un fijo en la posición de defensa central. A su lado debería estar Harold Cummings, quien no ha llegado a dar el salto de calidad que se esperaba. Como lateral derecho se debería ubicar Adolfo Machado y por izquierda Luis Henríquez. ¿El problema? La falta de jugadores en un alto nivel de competencia. Solo Baloy, quien ha hecho carrera en México, juega en una liga poderosa.
Experiencia: Hombres más que nombres (4 estrellas)
Es otro de los aspectos a destacar en este seleccionado panameño. Se está tratando de desarrollar un recambio generacional, pero los referentes del plantel elevan el promedio de edad. Jaime Penedo (34 años), Felipe Baloy (35), Luis Henríquez (34 años), Blas Pérez (35 años) y Luis Tejada (34 años) le dan un peso distinto a un equipo que sin ellos estaría absolutamente perdido.
Recambios: Va a costar (2 estrellas)
E
n general Panamá tiene un plantel corto en cuanto a nombres que puedan otorgarle un peso distinto al equipo. En el banco encontramos a jugadores que actúan en el débil torneo local o que militan en ligas centroamericanas. Los principales recambios probablemente sean Roderick Miller para la posición de defensor central, Gabriel Gómez para la de medio interior, Armando Cooper para labores de extremo y Gabriel Torres para el ataque.
Juego colectivo: Cosechar lo sembrado (3 estrellas)
Panamá no es un destello de brillantez colectiva, pero tiene el plus de que la base se conoce a la perfección y que a pesar de la veteranía de sus figuras, están aún marcan la diferencia. Con el conocimiento que tienen todo se hace mucho más sencillo. Su camino es conocido: la agresividad y la presión en la marca, la recuperación del balón, la lateralización del esférico, el centro y el gol. Este es el torneo que los Canaleros necesitaban para mostrarle al continente su progresión y para intentar dar el salto de calidad que los marque definitivamente en busca del objetivo mayor: la clasificación al Mundial.
El diagnóstico
Panamá ha sido ubicado en el Grupo D ante seleccionados potentes como el argentino y chileno, coincidentemente el actual subcampeón y campeón, respectivamente. La serie la completa Bolivia. Es bastante complicado que puedan conseguir la clasificación, aunque sí van a complicar a más de uno y quizás definan el pase a cuartos en la última jornada ante Chile. Si tienen aspiraciones reales entonces el primer duelo ante los altiplánicos es trascendental en ese sentido.
Composición fotográfica: Junior Chuquillanqui / DeChalaca.com
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