A seguir otro ritmo
Jamaica afrontará su segunda Copa América consecutiva. El objetivo pasa más por cumplir una campaña decorosa al estar en un grupo muy complicado.
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David Sánchez | @dacvalin Redactor |
Jamaica jugará su segunda Copa América consecutiva. El año pasado debutó en la competición y regresó a casa con los tres partidos perdidos y sin goles anotados. Con muchos de los que jugaron en Chile y con mayor experiencia (participaron en la Copa Oro y las Eliminatorias al Mundial), los jamaiquinos buscan tener mejores guarismos.
El técnico: Winfried Schäfer
El alemán pasó buena parte de su carrera como futbolista (volante) en Borussia Mönchengladbach. Como técnico tuvo buenas campañas con Karlsruhe y Al-Ain (a nivel de clubes) y dirigió a un par de selecciones antes de asumir en Jamaica: Camerún (Mundial 2002) y Tailandia. Con los Reggae Boyz consiguió la Copa del Caribe 2014 y un histórico subcampeonato en la Copa Oro 2015.
La propuesta
El equipo base para la Copa estaría conformado por una línea de cuatro en la zaga, dos hombres de marca y otros dos por los extremos en el medio sector y un ataque que debe demostrar contundencia. Más de un jugador puede ser utilizado en otra posición dependiendo del criterio del técnico o del rival a enfrentar.
El pentágono
Ataque: Falta un detalle (Calificación: 3 estrellas)
Schäfer lleva cinco atacantes a la cita, pero no hay ninguno que sobresalga entre todos. En los últimos años varios de ellos fueron decisivos en determinados partidos, como en la campaña de la Copa Oro y Eliminatorias, pero falta sostener dicho rendimiento en especial con rivales más compactos atrás.
Defensa: Toque de jerarquía (Calificación: 3 estrellas)
La figura de Wes Morgan, capitán del sorpresivo Leicester, destaca sobre el resto. Aunque forma parte de la selección recién desde el 2013, no tardó en apoderarse de la cinta. Su pareja en la zaga sería Mariappa, quien también puede alinear como lateral. Ryan Thompson será el encargado de asegurar el arco y tal vez uno de los que más trabaje en la fase inicial. Este es el sector donde menos puede fallar.
Experiencia: Me parece conocido (Calificación: 3 estrellas)
El grupo viene de jugar la Copa Oro y las Eliminatorias mundialistas, lo que le da cierta compenetración. A ello se le suma el hecho que los escenarios que albergarán sus partidos no le son extraños a varios de sus jugadores: La MLS es la liga extranjera que más convocados aporta (seis) y entre lo débil que se ve frente a los demás podría ser un plus. El punto en contra es el escaso roce de varios de sus jugadores, algunos con contados partidos en la selección.
Recambios: También es mi lugar (Calificación: 2 estrellas)
A
demás de Mariappa como lateral, Jermaine Taylor (el que más partidos acumula entre el plantel) y Michael Hector pueden ir a la zaga central. Por su parte, Watson puede subir unos metros y Barnes ir en sentido contrario. La lista se completa con jugadores principalmente del medio local que bien buscarían mostrarse para el futuro (Jamaica aún pelea por pasar de ronda en las Eliminatorias).
Juego colectivo: Puede hacer algo (Calificación: 3 estrellas)
Como el año pasado Jamaica jugaría sin mayores presiones, aunque ello no quiere decir que se preste a un papelón. Puede hacerse sólido de atrás hacia adelante y luego buscar cómo complicar al rival, para luego aprovechar las ocasiones que se le presenten. Apelando a la rapidez por los costados y al acierto de los puntas podría obtener buenos resultados.
El diagnóstico
Aunque no consiguió punto alguno, lo de Jamaica no fue tan malo en la Copa anterior. La tarea de mejorar dicha actuación resulta bastante difícil, puesto que enfrentará a un Uruguay muy ducho, un México más potente que en anteriores ediciones y una Venezuela en recomposición. Lo más probable es que no figure entre los clasificados a cuartos, pero si se lo propone puede complicar e incluso decidir la suerte de los demás integrantes de su grupo.
Composición fotográfica: Junior Chuquillanqui / DeChalaca.com
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