Gol y punto
Fútbol versus vóley en el Perú: ¿hay alguna oposición más absurda que esta?
Advertencia: Aunque DeChalaca.com es una página dedicada exclusivamente a hablar de fútbol, varios de quienes escribimos en ella somos también aficionados al vóley, y por ello queremos sentar una posición respecto de una moda que nos parece absurda: pretender poner en bandos opuestos a los dos deportes más populares del Perú cuando se trata de actividades complementarias.
El reciente renacimiento mediático del vóley peruano, tras la buena campaña de la selección nacional de menores y la clasificación del seleccionado de mayores al Mundial de Japón, ha hecho que un sector -algunos periodistas y muchos aficionados- haya traído a colación un viejo tema: la insoportable comparación entre futbolistas y voleibolistas en todo aspecto posible.
1. La plata: No estamos para perder el tiempo argumentando frente a los que reclaman "que no se le dé tanta plata al fútbol, que siempre pierde, y que se le dé al vóley, que gana"; cualquiera que sabe un poco de fútbol y vóley entenderá que las épocas de la manutención estatal se terminaron hace tiempo y que hoy, el mercado paga según lo que cada actividad genera, dentro o fuera del ámbito deportivo.
Lo que más bien habría que preguntarse es cómo hacer para que el fútbol y el vóley generen más dinero del que mueven actualmente en el país, y eso pasa por generar una cultura deportiva que vaya más allá del espectáculo: que el hincha sienta la necesidad de consumirlos como productos por encima de los resultados. Y si eso es una tara en el fútbol, más todavía lo es en el vóley, que en los ochenta llegaba a superar al fútbol en las encuestas como deporte más popular y hoy solo hace noticia cuando la selección tiene un triunfo resonante. En suma, se necesita venderlos mejor, y eso es un problema que ambos deportes podrían trabajar en conjuntos.
2. Los logros: Es absurdo comparar al fútbol peruano con el vóley peruano en este aspecto, porque el primero jamás ostentó el nivel de resultados que sí tuvo en el vóley. En fútbol, el Perú ganó 2 títulos sudamericanos y en vóley 12; en mundiales, la selección de fútbol llegó al sétimo puesto y la de vóley alcanzó el subtítulo; en olimpiadas, la selección de fútbol llegó a cuartos de final, y la de vóley ganó una medalla de plata.
Lo anterior no quiere decir que el fútbol sea mediocre en comparación al vóley; trata de traslucir que cuando se pide a los deportes que "vuelvan a ser lo que alguna vez fueron", si uno está mucho más obligado a ponerse metas altas en el Perú es el vóley, que hoy celebra grandilocuentemente un triunfo sobre Argentina que hace 20 años lograba con las manos izquierdas -y no solo la de Cecilia Tait-. El fútbol, en cambio, está lleno de mitos y supuestos pasados gloriosos que, como se ha visto en repetidas ocasiones en esta página, a veces no son tales. Recuérdese: el Perú en mundiales de fútbol le ganó a Bulgaria, Marruecos, Escocia e Irán. El Perú sí fue una potencia mundial en vóley; en fútbol, jamás.
3. La pasión: Se suele decir que el fútbol sí la genera y el vóley no, lo cual es imposible de generalizar porque cada hincha tiene a bien emocionarse por lo que prefiere. Y en realidad, suena absurdo creer que a alguien a quien le gusten los deportes no le conmueva el esfuerzo y la entrega que la voleibolista peruana promedio ha derrochado a lo largo de la historia cuando viste los colores blanquirrojos.
Mediáticamente, el fútbol está más difundido por un tema comercial. Y eso ha hecho indirectamente que en las tribunas el vóley siga manteniendo un aura más de ambiente familiar, sano que el que se vive en estadios donde a veces hay violencia y delincuencia. Pero no confundamos papas con camotes: una cosa es la pasión que despierta cada juego en sí y otra la incapacidad de los organizadores de los espectáculos o de las fuerzas de seguridad correspondientes de poner controles a ello. Ambos tienen su manera de emocionar: distinto es que haya quienes se quieran aprovechar de eso para despertar otras (bajas) pasiones.
4. La imagen: La maquinaria de los programas y diarios de farándula ha contribuido a formar, en los últimos 15 años, una imagen del futbolista peruano como figura indisciplinada que se ha extendido como sello a todos los ámbitos de la sociedad. Razón intrínseca no les falta: el futbolista peruano es, en promedio, indisciplinado. Aunque nos caigan pésimo, también hay que reconocer que derecho de rajar como quieran les asiste: su misión en la vida es vender a cualquier precio y sacar provecho de la vida privada de los demás.
En realidad, deportistas ordenados hay en todas las disciplinas, y desordenados también; sino pregúntenle a Man Bok Park algunas de las medidas de cuartel que debió tomar con sus pupilas antes de lograr los éxitos de los ochenta. Pero a los que nos importa el fútbol, y también el vóley, o los deportes en general por sobre la mayoría de demás cosas, nos debe tener sin cuidado que la gente de farándula quiera aprovecharse de productos cuya pasión le es ajena para vivir a costa de él. A nosotros no nos importa lo que hace un deportista fuera del campo, sino dentro de él; no nos importa cuánto gana por sueldos, sino cuánto nos hace ganar con sus logros; no nos importa con quién sale el sábado, sino contra quién juega el domingo. Que afuera se ocupen de lo que quieran, pero que nos dejen vivir nuestras aficiones en paz; ellos no pueden determinar a quién vamos a registrar en nuestras alineaciones la próxima fecha, como lamentablemente sí ha ocurrido a veces en la última década.
5. La fufulla: Es azuzada por el sector del periodismo que sabe poco de fútbol y nada de vóley, y que cuando transmite partidos -al no poder ejecutar el mínimo análisis táctico- no tiene mejor ocupación que pasársela gritando cual hincha de popular para rematar con un ruidoso "las mujeres sí ganan". ¿Es un manifiesto de liberación femenina, de petición de igualdad de derechos? ¿O un intento barato de despertar al coro urbano que le echa al fútbol la culpa de todos sus males y para rajando de los sueldos que los futbolistas reciben y que él jamás va a poder recibir?
Un pedido a los verdaderos hinchas del fútbol: no dejemos que la gente que quiere vivir del fútbol nos venda discursos baratos. Lo ideal en el Perú no es que ganen las mujeres: es que ganen las mujeres y también los hombres. Que ganemos todos.
Recorte: revista Ovación
Mostrar/Ocultar comentarios
Para finalizar sentencio con lo siguiente: Todas estas comparaciones absurdas que se hacen, tenganlo por seguro, vendran de periodistas o prensa que necesitan decir ¡CARAJO! para que se les haga caso, necesitan faltar respeto a medio mundo para que se les tome en cuenta. Pueden saber nada o mucho, pero eso no resalta precisamente en su perfil.
La cronica deChalaca muy buena, pero falto meter el nombre de Phili Butters y con eso ya estaria completo. no es bueno dirigirse indirectamente a alguien, Y SI el voley es muy bueno, fuimos potencia claro que si, pero ahora como en el Futbol estamos en franco retroceso, Hay una generacion de juveniles que tal vez pueda repuntar el voley, PERO NO LO ASEGURO, La verdad son hincha de ambos, guardo un aprecio por mi madre y por su emocion cuando vee el televisor, y por el futbol, por que guardo cariño, seguir la Copa Peru, y auque a veces suene masoquista, VER A LA SELECCION o cualquier equipo peruano, conseguir una victoria en el torneo internacional. INCLUSO TENGO UN BLOG DE FUTBOL, y si los dos deportes son hermozos... solo eso
Ahora a mà esa pérdida de la selección de voley en el año 88 en Seul, teniendo algo de 10 añoz , me dejo una imagen de tristeza, de pérdida. No ganaron el oro pues.
Incluso las mismas jugadoras, dijeron que si hubieran tenido mas roce internacional hubieran hecho mejor campaña.
¿Y que pasa con el futbol? Nos llenamos de 50 fechas de futbol domestico, y cuando los clubes o seleccion tienen que competir afuera, hacen papelones.
Para el futbol como para cualquier deporte, la jerarquia, se obtiene compitiendo internacionalmente.
el volley es nuestro deporte insignia acaso? pero tampoco lo vanagloriemos tanto, ya que en el volley nunca generamos esa mistica que si se genero al menos con la generacion futbolistica del 70-85. uno que vive afuera siempre escucha comentarios sobre cubillas, oblitas, uribe, cueto, o el mismo chorri, solano, pizarro , reynoso, pero de veras son pocos los que hablan de la seleccion olimpica de volley del 88 y de sus grandes logros. no tengo nada en contra del voelly, pero creo que esta un escalon arriba mas que el futbol. ojala que el volley siga cultivando triunfos y a ver si asi el gobierno le da mas plata a la FVP, porque nuesta FPF y nuestra seleccion NO PASA NO PASA