El Perú de siempre en el fútbol de ahora

Perú vuelve a Chile para jugar un partido amistoso. Ahí donde solo hemos ganado dos veces en toda nuestra historia. La estadística es clara y muestra un panorama que hoy se ve perfectamente dibujado en las realidades de cada uno. Estamos en las mismas. Sale uno que otro jugador con talento, obedecemos a la lógica del plan a largo plazo y mantenemos a un técnico involucrado en el proceso anterior, pero nunca es suficiente. Lo poco que sumamos no alcanza para llegar en azul a fin de mes. Son muchos los factores que determinan que Perú avance de costado, si es que podemos decir que avanza. La selección es el reflejo de lo que vemos los fines de semana en nuestro campeonato. No hace falta adjetivar para entender lo que hablamos.
Chile es la otra cara de la moneda. De la mano de un dirigente sumamente capaz como Harold Mayne-Nicholls supo continuar las obras que de a pocos iban estructurándose en su fútbol. Terminó de institucionalizar el fútbol que, aunque errores puede tener, cuenta con más aciertos. Se logró un cuerpo técnico de primer nivel hace algunos años. Cuando se fue se consiguió otro. Y de los jugadores, ni hablar. Las joyas de su selección están presentes en las mejores ligas y en los mejores equipos del mundo.
Mientras cada año Perú vuelve a tropezar con errores cometidos previamente -haber vuelto a los torneos cortos es el caso paradigmático-, Chile utiliza lo aprendido para crecer. Este será el choque del viernes 12.
De las convocatorias y otros demonios
El tema de la semana pasada fue la convocatoria de Bengoechea, en la que aparecieron nombres que muchos pensaban ya habían sido reciclados. Y no solo eso. La ausencia de nuevas figuras que condujo a la crítica común de que nada ha cambiado. De hecho, hasta en los círculos de mayor apoyo a la selección se ha podido evidenciar una fuerte crítica a la acusada inmutabilidad del esquema-proceso de Sergio Markarián.
Más allá de posibles conflictos que puedan existir entre las más altas esferas del mundo futbolístico, acá hay temas que escapan a lo futbolístico y que mueven y apuntan el manejo a determinada dirección. Aparece, pues, otro elemento diferenciador -y uno bastante grande- entre Chile y Perú.
Todo parece indicar que hay presión para convocar a lo mejor que tenemos -sin importar lo que eso signifique en términos de renovación- para afrontar el partido en Valparaíso. Estamos hablando netamente de un tema político. Esa es la realidad. Las elecciones al sillón de la Federación Peruana de Fútbol se vienen en menos de un mes y no da buena cara regresar de Chile con una goleada en el bolsillo.
En DeChalaca hemos dicho hasta el hartazgo que no creemos que el bullying mediático a la FPF sirva de algo per se para mejorar el fútbol peruano. Pero tampoco nos parece que todas las decisiones que se tomen sigan un criterio predominantemente político o apoyado en exitismos del momento como un buen resultado en un Clásico del Pacífico. Veamos una vez más a Chile como contraejemplo: perdió en Lima por Eliminatorias, y un año después un palo separó a su equipo de hacer historia. Mientras tanto, acá lo veíamos por televisión..
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Foto: ANDINA
