Fabián Cuéllar: A ponerse monos
Tras un buen paso por Bolivia, el ‘Mono’ Cuéllar llega a Cusco para convertirse en el nuevo armador de un Cienciano que necesita resurgir.
Pasaporte
Fabián Andrés Cuéllar Trujillo nació el 21 de junio de 1985 en Neiva, en el departamento de Huila, Colombia. Mide 177 centímetros y pesa alrededor de 75 kilogramos. Es un talentoso volante creativo y posee un envidiable remate de larga distancia.
Prontuario
Cuéllar, mejor conocido como el ‘Mono’, perteneció a varias escuelas de fútbol en Neiva e, incluso, llegó a jugar con la selección de menores de Huila. Esto llamó la atención del Deportivo Cali, que lo sumó a sus filas. Sin embargo, Cuéllar nunca jugó por el cuadro caleño y debutó profesionalmente en Atlético Huila, en 2004; allí lució un muy buen nivel y permaneció tres años. Posteriormente, fue fichado por el Monagas de Venezuela, donde se erigió como el mejor extranjero. No obstante, a mediados de 2008, se reincorporó a Huila: pese a que tuvo buenas actuaciones individuales, el equipo merodeó los últimos puestos. En 2009, ancló en Santiago Morning de Chile, donde apenas jugó tres partidos dada la poca confianza del comando técnico. En 2010 pegó la vuelta a Colombia, esta vez para militar en Deportivo Pereira, por entonces dirigido por Oscar Quintabani. Su último equipo fue La Paz FC, donde estuvo en 2011 y 2012.
Curiosamente
Fabián Cuéllar sufrió muchas lesiones que impidieron su despegue. El 2006, se lesionó de la rodilla y no volvió hasta mediados de 2007. En 2008, con Huila, sufrió otra lesión: este fue, prácticamente, el motivo por el cual se desvinculó del equipo amarillo y probó suerte en Chile.
Expectativas
Cuéllar viene como el ‘10’ que necesita Mario Viera para que Cienciano pueda aspirar a algo más que salvar la categoría. Su buen remate de lejos puede ser una cualidad mortífera en la altura.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Video: Youtube / Usuario: MJ Arteaga
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En altura siempre hay que pegarle fuera del area, el balon va mas rapido y se dificulta mucho la tarea del arquero.