No hay sexto malo
A inicios de año, Julio Zamora arribó a Melgar con cuatro compatriotas suyos: Federico García, Juan Martín Pietravallo, Julián di Cosmo y Nicolás Amerise. Luego, incorporó un quinto: Roberto Carboni. Todos jugaron por el 'Dominó' en la primera parte del año, y aun cuando Amerise dejó el club para regresar a Rosario y enrolarse en el Central Córdoba, Melgar ya tenía cinco cupos utilizados, por lo cual solo le quedaba chance de contratar un refuerzo foráneo más para la etapa de Series.
Paralelamente, en el torneo de Promoción y Reservas, Melgar alineó en la fecha 10, ante José Gálvez, a un argentino más: Brian Zamora, el hijo del técnico, quien ha venido entrenando con el plantel rojinegro. Dado que existe libre movilidad entre las reservas y el primer equipo, se pensó que de esta forma Melgar habría completado sus cupos de extranjeros para este 2012, por lo cual causó mucha sorpresa que hace algunas semanas se anunciara el fichaje de un sétimo argentino: el delantero Bernardo Cuesta, procedente del Tiro Federal de Rosario.
El hecho de que Zamora no hubiera jugado en Primera no parecía ser óbice para que ocupara el cupo. Jugadores como Johnnier Montaño en Alianza Lima (que no jugó por los íntimos este año en el torneo local) o Martín Perpetua en Universitario (quien solo ha jugado en Reservas) sí ocupan plazas de extranjero en ambos clubes. Entonces, Melgar hizo la consulta reglamentaria a la FPF y se topó con un vacío reglamentario a su favor: a diferencia de Montaño o Perpetua, Brian Zamora no contaba con contrato profesional. Para jugar en Reservas, tener contrato no es un requisito indispensable; basta con tener carné de cancha. En cambio, para jugar en Primera existe un requisito doble: carné y contrato.
Esa ventana reglamentaria le ha permitido a Melgar inscribir a Bernardo Cuesta, y gozar de su magnífico debut con dos goles, uno de taco incluido, en el arco de Sport Boys, que sufrió de paso con el 5-1 la derrota más dura en su historial de visitas al 'Dominó' en Arequipa a lo largo de la historia. Y todo por un contrato no firmado en su momento.
Foto: prensa FBC Melgar
