Vallejo - Aurich: Suma cero
El capo: Juventud, divino tesoro
En un partido en el que destacaron los defensas por encima de los atacantes, Diego Otoya cumplió con solvencia la labor encargada por el técnico Rivera, pues despejó el peligro por su zona y se anticipó correctamente a Tejada o Chiroque. En el equipo visitante, Leandro Fleitas también cumplió una labor importante cerrando bien su zona y colaborando con algunas jugadas de ataque.
La clave: El valor de defender
El empate sin goles se debió principalmente a la buena labor de los defensores, que cumplieron con la misión encargada por sus respectivos entrenadores. Tejada y Jiménez no tuvieron muchas ocasiones de gol debido a las marcas asfixiantes que tuvieron durante el cotejo. Por ello, los volantes optaron por rematar de larga distancia en varios pasajes del partido.
El tapadón: El gigante Diego
Corrían apenas 6’ cuando la Vallejo empezó a lanzar al área de Aurich centros que no podían ser despejados por completo. De esta manera, Paolo De la Haza recibió un centro por la derecha y empalmó de derecha un remate que Diego Penny desvió al tiro de esquina con una notable estirada.
La joyita: Palo con ‘Pana’
En un encuentro de ida y vuelta, a los 30’ los volantes de Aurich decidieron avanzar por el medio del campo. En eso, Michael Guevara le envió un pase largo a Luis Tejada al corazón del área. El delantero panameño eludió su marca y quedó frente a Hermoza; sin embargo, su remate final se estrelló en el palo, ahogándose el grito de gol del cuadro visitante.
El duelo: Por aquí no pasas
Luis Guadalupe ha regresado a la zona defensiva de Juan Aurich con el mismo ímpetu y, a veces, con una vehemencia que puede costarle a su equipo. El zaguero cumplió con la misión de opacar la labor de Roberto Jiménez, quien no tuvo casi ningún remate de peligro hacia el arco de Penny. Sin embargo, sobre el final, hizo una jugada peligrosa innecesaria que pudo costarle un gol en contra al Aurich.
El cambiazo: ‘Chino’ de amargura
No le funcionaron los cambios a Víctor Rivera. El ingreso de Velázquez no tuvo el efecto esperado pues Aurich se cerró bien en la zona defensiva y no permitió que los delanteros locales disfrutaran de ocasiones de gol. Asimismo, las salidas de Alexander Sánchez y Johan Sotil mermaron el ataque local, pues ni Daniel Sánchez ni Saulo Aponte fueron solución para romper el cerrojo visitante.
La cancha: Público para todos los gustos
Buena concurrencia de espectadores en el Mansiche (no se dispone aún de la cifra oficial). Se pudo apreciar hinchas de ambos equipos que alentaron a lo largo del cotejo, algo positivo pues es necesario que las barras acompañen a sus clubes así jueguen fuera de sus ciudades. Asimismo, se observó en tribuna preferencial al flamante entrenador de Juan Aurich, Franco Navarro.
Kazuki Ito: Ojos bien abiertos
Arbitraje correcto de Iván Chang, quien no se complicó en pasaje alguno del partido. Las dos amonestaciones se ajustaron al reglamento y no hubo mayores reclamos por las faltas sancionadas.
Fotos: diario La Industria de Trujillo
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