Minuto 87: Mueve tu cucú

Para un argentino, la herida del 0-5 encajado por Colombia en el Monumental de River jamás sellará y siempre estará fresca al toparse con alguna referencia. Partiendo desde ese punto, el que ambos seleccionados cayeran en el Grupo B de la Copa América Paraguay 99 suponía un hambre inmenso de venganza hacía los guachos y un reto ambicioso para los colochos.
Argentina iniciaba un nuevo proceso bajo la batuta de Marcelo Bielsa, quien había asumido el cargo un año antes. Por su parte, los cafeteros lucían en el banco a Javier Álvarez, técnico que mostró cosas interesantes pero cuyo periplo terminó al año siguiente cuando la Sub-23 fue eliminada en el Preolímpico de Brasil, cuando los colombianos fueron eliminados tras un increíble 9-0 que permitió la clasificación de Chile que yacía en el aeropuerto esperando su vuelo de vuelta a Santiago.
Fuera de esto, el partido significó todo un record, pues se cobraron cinco penales y solo uno fue concretado. Martín Palermo falló tres y el otro lo erró Hamilton Ricard tras buena atajada del ‘Mono’ Germán Burgos. Iván Ramiro Córdoba se encargó de cristalizar el suyo a los 10’ y tuvo una recordada celebración dirigida a Andrés Escobar, quien ese día cumplía cinco años de fallecido tras su asesinato en EE.UU. 1994. Córdoba usaba la camiseta número '2', y por eso la identificación. Al final ambos cuadros clasificaron a los Cuartos de Final, pero Colombia lo hizo con el puntaje perfecto en el primer puesto mientras que Argentina lo hizo en la segunda posición con seis unidades. Ambos seleccionados fueron eliminados por Chile y Brasil, respectivamente, pero esas serán historias que vendrán más adelante.
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Colombia ganaba 2-0 y Palermo ya había fallado dos penales cuando un jovencísimo y flaco Johnnier Montaño hizo su ingreso al campo de juego con apenas 16 años. Álvarez exigía un juego rápido y profundo para su equipo, mientras que Bielsa no encontraba respuesta a lo que venía sucediendo en el partido.
Montaño recibió el balón en el centro del campo luego de que este le impactara al juez paraguayo Ubaldo Aquino. El volante emprendió una veloz carrera por el medio del campo ante el inofensivo retroceso de los defensas gauchos. Al final, Johnnier se decidió a sacar un fuerte zurdazo que chocó en la espalda de Roberto Ayala y terminó desacomodando a Burgos para sellar la victoria y goleada cafetera.
Aquel fue el despertar para el mundo de Montaño, un volante llamado a más que solo engrosar la lista enorme de supuestos sucesores del 'Pibe' Valderrama. Se fue a Italia, al Parma de Buffon y Adriano, acaso creyendo que sería su salto a un estrellato mundial que por diversas razones no alcanzó. Para los peruanos, acaso, ese fracaso significó la opción de que luego brillara en estas canchas con camiseta de Sport Boys y Alianza Lima. Quién lo habría así imaginado aquella tarde de su golazo a Burgos.
Foto: revista CONMEBOL
