Luis Miguel Escalada: Por otro romance
Luis Miguel Escalada es un delantero que sabe de altibajos. Figura en Ecuador, muy discreto en otros lares, busca repetir el éxito ecuatoriano en el Descentralizado. En Cristal esperan que lo logre y que lleve a la celeste, con sus goles, al final de los años sin títulos.
Pasaporte
Luis Miguel Escalada (Ceres, Provincia de Santa Fe, 27 de febrero de 1986) mide 178 centímetros y su último registro indica que pesa 89 kg. La directiva de Sporting Cristal lo contrató para reforzar el ataque celeste que en la temporada pasada dejó qué desear. Sin embargo, sorprende que haya optado por un jugador de las características de ‘El Pichu’, pues es un delantero de área y en el Rímac se necesita alguien que vaya por fuera. Otra incógnita que surge a partir de la llegada de Escalada a Cristal es cómo le pueda ir con la celeste. Es un jugador que a lo largo de su carrera alternó buenas con las otras. Es joven y ha pasado por muchos equipos que lo gozaron con suerte de cara al gol (solo en Ecuador). Otros, lo sufrieron por su falta de efectividad goleadora (en Argentina, Brasil y Estados Unidos). Se espera que la carrera de ‘El Toro’, en el Perú, entre en franca escalada.
Prontuario
Escalada hizo las divisiones menores en el club bonaerense Boca Juniors. Alfio Basile lo hizo debutar en cuadro 'Xeneize' en 2005, pero no le dio muchas oportunidades más. Apenas jugó seis partidos y tuvo que armar el bolso de viaje. No sabía que el itinerario sería largo, pero sí que iba a empezar en Emelec de Ecuador. No pudo irle mejor en su primer año fuera de su país. Al menos en lo personal: mientras su equipo se resignaba a alcanzar solo el segundo lugar del torneo, Escalada conseguía el primer lugar de la tabla de goleadores. Las 29 anotaciones conseguidas en su primer año en Ecuador le valieron ser jalado por la LDU. El cuadro blanco de Quito, que ya había empezado a destacar en el continente, lo compró por un millón de dólares. Escalada hizo 16 goles esa temporada y se fue como goleador del equipo y campeón nacional. Los goles y el título logrado lo llevaron a un destino más atractivo, no solo futbolísticamente hablando. De nuevo a juntar las cosas en la maleta para viajar a Rio de Janeiro, pues el Botafogo lo ordenó en sus filas. En Brasil le fue decididamente mal y fue prestado a Gimnasia de Jujuy de su país y luego pasó a Newell’s Old Boys, todo en 2008. En los tres equipos no sumó 20 partidos y no consiguió hacer cuatro goles. La eficacia lo abandonó, pero no la suerte. En 2009 viajó de nuevo, esta vez al país de las oportunidades donde esperaba encontrar una para reivindicar su juego. En Estados Unidos fue campeón con el Real Salt Lake, pero él jugó poco y anotó menos: cinco partidos y un gol. Viaje de regreso al Ecuador, donde lo recibió el menos glamoroso Deportivo Cuenca. Allí lo quisieron poco a pesar de los 15 goles que marcó. Es que se fue apenas pudo y eso le dolió a los hinchas del Cuenca que lo acusaron de “gordo comegoles”, y es que andar por encima de los 85 kilos para un tipo que no es tan alto no va tan bien con la forma que debe tener un futbolista.
Curiosidades
Luis Miguel Escalada tiene una historia rica en anécdotas en su corta pero colorida carrera. A los once años firmó por Boca Juniors y a esa edad cobró su primer salario. Claro que no llegaba ni a los 150 dólares. En el club de la ribera jugó de diez, pero luego el ‘Chino’ Benítez, su técnico, lo ubicó como centrodelantero. En esa posición destacó por sus goles y llegó a la selección Sub-17. No fue al mundial de la categoría por causa de una inoportuna lesión.
Perspectivas
Escalada tiene dos responsabilidades: uno con Cristal y otra consigo mismo. Se debe a su persona una destacada actuación en la liga peruana, pues fracasó en cada campeonato que disputó que no sea el ecuatoriano. Como hombre de fútbol, sabe que tiene ese pendiente. Con Cristal, debe marcar los goles que se necesitan bajo el puente. Allí Miguel Ximénez sigue siendo la primera opción, pero la segunda es él. Sin dudas está por delante de Andy Pando o de Héctor Cruz, sobre todo por lo que le costó a la institución traerlo. Son más de 300 mil razones para ponerlo a hacer los goles.
Composición fotográfica: Gian Saldarriaga / DeChalaca.com
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