Dos meses y una semana
Particulares reflexiones del personaje que respira fútbol luego de la jornada del martes en la Champions League.
Foto: liverpoolfc.tv
Es
viernes por la noche y en los previos de la playa hay aires de pachanga. Son
exactamente las 1:55 de la madrugada y solo faltan 5 minutos para que venga el
guardabosques de la playa a decirnos que apaguemos la música por el bien
social. Pasado el turno de Juan Luis, La Línea y Rikarena, el último track de la noche antes de salir a la
juerga molesta a las chicas, que no entienden, y emociona a los que sí
entienden.
Suenan los violines y una de esas chicas a las que siempre se le ocurre decir algo pregunta: ¿por qué mierda ponen ópera, ah? Die Meister, die Besten, les meilleurs equipes, the Champions... Nos ponemos la mano derecha en el pecho, cantamos mirando el cielo tratando de encontrar las estrellas. Fin de previos con el himno de la Champions como broche de oro, como broche de estrellas. Solo faltaban tres días de los insufribles dos meses y una semana en que el mundo entero se quedó sin el mejor campeonato de fútbol del planeta.
En la transmisión de ESPN alguien dijo que la verdadera Champions empezaba recién en esta fase, y yo estoy 95% de acuerdo. Yo creo que no arrancó hoy, yo creo que arranca mañana. Buenas noticias: el Madrid perdió y Gerrard metió un gol de billar. La repetición con la cámara detrás del arco es exquisita. Se puede ver “por dónde pasó” la pelota. Mañana es un día de fiesta. Arsenal vs. AC Milan, en Londres. Celtic vs. Barca. Lyon vs. Manchester United. Creo que los dos meses y medio valieron la pena, así el tour del trofeo de la ‘Orejona’ no pase por Lima.
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