Melgar: Nuevas obligaciones
Iván Carpio | @carpio_ivan Editor Regional |
Melgar mantuvo el protagonismo en el año que termina. Tras un inicio incierto, que incluyó una desafortunada participación en Copa Libertadores, el 'Dominó' corrigió el rumbo en la segunda parte del año y se metió nuevamente en las instancias finales del torneo peruano. Ahora, en condición de subcampeón, las metas siguen siendo las mismas para el equipo de Juan Reynoso; pero también las preguntas: ¿será capaz el equipo arequipeño de -ahora sí- hacer frente a la exigencia de jugar dos torneos de alta importancia?
De a pocos
Mientras otros rompen el mercado con jales mediáticos, Melgar por ahora no ha dado muchas luces de sus refuerzos. Sin embargo, 2016 dejó algunas lecciones en este tema. Reynoso ha admitido que una de las razones de la mala campaña en la Libertadores de esta temporada que termina fue precisamente que se cometieron errores en elegir algunos de los nombres que llegaron para ese torneo. Ante ello, parece ser que por estos días se aplica la frase "lento, pero seguro".
Por ahora, los dos únicos refuerzos confirmados son Diego Penny y Carlos Ascues. Mientras tanto, el resto no ha sido oficializado, menos desde el seno rojinegro. Pero no deja de preocupar que ante la partida de jugadores importantes, como Alberto Rodríguez o Bernardo Cuesta no haya habido una respuesta inmediata. Está claro que son ausencias difíciles de cubrir. Y allí nacen las primeras las interrogantes sobre las posibilidades rojinegras de mantener el protagonismo a nivel local y ser competitivo fuera del Perú.
¿Nace una obsesión?
Hace un año, los ojos con los que se miraban la participación en la Copa Libertadores obedecían más al criterio subjetivo y nostálgico de la vuelta a este torneo continental luego de 32 años. Pero hoy, la sensación es diferente para el hincha: no repetir una campaña tan discreta en números como lo que ocurrió en la última edición.
Y si bien el primer objetivo para Melgar no es ganar la copa, se entiende que sí es competir; más aún tras ser sembrado en un grupo que e- en el papel- se presenta tan o más complicado que el que integró a principio de año. Ciertamente, para cualquier club peruano, ello ya representa un verdadero reto, y Melgar no es la excepción.
No es pues, el panorama más apropiado para buscar lavarle la cara al rojinegro en el contexto internacional. Más aún cuando el borrar la mala imagen dejada en 2016 depende, sobre todo, de el nivel de los jugadores que se sumen para esta temporada al plantel de Juan Reynoso.
¿Realmente alcanza?
Pese a éxodo de algunos referentes, Melgar tiene con qué apuntar al título. Partiendo de la cabeza, y más allá de su temperamento o lo impopular que para algunos pueda resultar, la continuidad de Juan Reynoso no hace más que reforzar un proceso que va camino a consolidar a Melgar como un equipo con objetivos más ambiciosos a nivel local. No es para nada utópico, entonces, imaginar a Melgar nuevamente disputando una final.
Empero, si hay una virtud que el 'Dominó' sí tuvo en 2015 (que derivó en el título) y no tuvo en 2016, es la regularidad. Hace dos temporadas, Melgar no fue un equipo de rachas. Sin embargo, en 2016, la obligación de poner toda la artillería en la Libertadores mermó al equipo en el torneo casero y, a la par que sufría en el primero, lo hacía en el torneo peruano. Y es precisamente allí donde nace la gran duda para este Melgar en 2017.
Es, pues, la Libertadores, la cuenta pendiente para Melgar. Si hace una década se le reclamaba dejar de ser comparsa y convertirse en protagonista en el campeonato local, dicha cuenta ha sido saldada. No obstante, ello lo ha llevado a volver a la competencia internacional, en la que aún no ha tenido una nota aprobatoria si se cuenta que también ha estado presente en la Sudamericana.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Foto: Andina, Miguel Zavala / diario El Pueblo de Arequipa