Aurich: Al norte de la Rivera
Aurich culminó un 2015 bastante irregular, tanto a nivel doméstico como internacional. De hecho, quedó en el décimo puesto de la tabla acumulada del Descentralizado y no logró pasar de la fase grupos de la Copa Libertadores, a pesar de que dio pelea hasta el último partido en grupo complicado, en el que llegó a empatarle a domicilio a un River Plate posteriormente campeón del certamen. Esta inesperada campaña le hizo quedarse con las manos vacías en el 2016, lo que de todas maneras le servirá para plantearse nuevos retos de cara a este nuevo año.
Uno de estos retos será mantener la estabilidad del club, tanto económica como futbolísticamente. Por ello, esta temporada está llamada a ser una de renovación total, por lo que, probablemente, tampoco se encuentre dentro de los candidatos para pelear el campeonato. Este proceso necesariamente tomará tiempo y se dará progresivamente. Por lo pronto, los primeros cambios se han dado en el nivel del plantel, en el que varios han alistado maletas y buscado nuevos horizontes.
Nuevo ciclo para el ciclón
Para empezar, nuevos aires soplan para el ‘Ciclón’ con la llegada de Víctor Rivera, tras un paso a la cabeza de Selección Sub-20 y un amplio trabajo en menores. Desde aquí, hay que tener en cuenta de que se trata de un nuevo ciclo para los chiclayanos, pues la partida de Roberto Mosquera le puso fin a una etapa de dos años, durante la que alcanzó a ser ganador del Apertura 2014.
Recuérdese que el ahora flamante técnico aurichista dirigió a la César Vallejo por tres años, desde 2011 hasta 2013. Este fue el último club en el que estuvo al mando; con eél logró una clasificación a la Libertadores (2012) y otra a la Sudamericana (2013). En su primer año con el cuadro poeta no pudo despuntar y ello deja la interrogante de si Rivera reflotará el proyecto aurichista desde un comienzo o habrá un tiempo de maduración. Su vigencia y capacidad son incuestionables, pero todo indica que la suya es una apuesta a largo plazo que puede ofrecer dos inmediatos desenlaces posibles.
El primer desenlace podría ser netamente positivo. Solo basta con recordar al Rivera que fue bicampeón en el 2007 y 2008 con San Martín, a pesar de tener un equipo joven institucionalmente y que nadie tenía en el radar. En efecto, supo darle protagonismo y buen juego al club albo, logrando coronarse dos veces consecutivas y colocando a los de Santa Anita entre los clubes más competitivos del torneo peruano. ¿Sucederá lo mismo con Aurich? La situación luce similar, pues el conjunto norteño no ha destacado últimamente y necesita un entrenador con nuevas ideas que pueda reflotar su fútbol. No obstante, ciertas variables -como un plantel corto- podrían jugarle en contra.
El otro potencial desenlace es el más sombrío. Se trata de un técnico que tendrá que adecuarse nuevamente al trabajo de club, tras pasar por las divisiones menores de la selección. Esto podría originar que su estadía en Chiclayo sea difícil desde un inicio, a lo que se le sumaría el reto de enfrentarse al que podría ser su octavo año sin conseguir un campeonato en términos personales. A ello, hay que agregar la presión de la directiva de volver a poner a Aurich en primera plana rápidamente. Todo esto se da en un medio futbolístico en el que, por demás, es difícil que un estratega pueda ver respetado su proceso de planificación y trabajo.
Horizontes claros
Con la llegada del ‘Chino’ Rivera, también se sumaron como refuerzos Víctor Cedrón (ex Vallejo), Oshiro Takeuchi (ex León), Elsar Rodas (ex Cristal) y Juan Carlos Arce (ex Alianza Atlético). Además, se conoce que jugadores como Jair Céspedes, Hernán Rengifo, Germán Pacheco, Óscar Vílchez, Juan Goyoneche, Deyair Reyes, Marcos Delgado y Miguel Manzaneda dejaron Chiclayo para labrarse un futuro en otros clubes.
Como se puede observar, el éxodo de nombres es extenso y Aurich deberá encontrar los reemplazantes apropiados, ya que muchos de los citados -en su momento- supieron marcar la diferencia en el ‘Ciclón’ y hacerlo un cuadro respetable futbolísticamente, cuando rindieron en su máxima capacidad. Incluso, lo llevaron a disputar un torneo internacional. Se sabe que muchos juveniles del club tendrán más espacio en el presente año, pero se necesita una base sólida de jugadores si se busca volver a ser protagonista.
Para concluir, el corto plantel que hasta el momento presenta Aurich parece dejar como objetivo inmediato el de la consolidación como institución para, en un futuro no muy lejano, volver a pelear de palmo a palmo con otros clubes que se están erigiendo como candidatos sobre la base neta de una gran inversión y un trabajo ininterrumpido de sus respectivos técnicos. De hecho, Melgar sería un ejemplo de un cuadro que supo trabajar con paciencia para después cosechar los resultados, y a ello podría apuntar la directiva del 'Ciclón'.
Bajo esas condiciones, lograr la clasificación a un torneo internacional podría ser un muy buen premio si se mantiene regularidad en el año, y ello podría ser una buena inyección de capital que sirva para este resurgir aurichista. Mientras, Rivera tendrá que apelar a toda su experiencia para hacer de este equipo uno que no se termine perdiendo con el pasar de las fechas. La mesura, en todo caso, deberá ser la principal característica del cuadro rojo para este año.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: diario La Industria de Chiclayo, prensa Juan Aurich