Foto: Prensa FPFTras más de cinco meses de para, Cristal no se opacó y salió a atropellar a Boys con un contundente 1-4. Los rosados solo soportaron en la primera etapa las arremetidas celestes, que enmendaron los yerros en definición y consumaron la goleada.
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Lenin Auris | @Lenin_Auris
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¿Al equipo que golea no se lo rebate? Cuatro goles, dominio en la mayor parte del juego y fortaleza -táctica y física- superior que el rival parecerían arguentos suficientes para minimizar las carencias del vencedor. No obstante, Sporting Cristal maquilló ciertas deficiencias de marca en el mediocampo, los habituales problemas del juego aéreo en defensa e inconvenientes a la hora de definir -goleada de por medio-, sobre todo en el primer tiempo. Sport Boys se encontró con el empate y se convenció de su poder para dañar una vez ubicadas las debilidades del rival. Pero el combustible de la 'Misilera' duró los 20 minutos finales de la etapa de inicio, cuando el equipo de Marcelo Vivas estuvo incluso cerca de voltear el encuentro. Tras el descanso, el ímpetu rosado decayó y los tantos celestes fueron goteando mientras las energías porteñas se ahogaban sin poder escapar de la goleada.

La Pizarra: Movimientos categóricos

Boys: El 4-2-3-1 porteño remarcó un cambio en el habitual bloque defensivo usado antes de la suspensión del campeonato: en el lateral izquierdo apareció el categoría 2000 Pedro Daniel García en reemplazo de de Joao Ortiz. Otra ausencia importante fue la de Jesús Chávez, emblema de la temporada pasada y del inicio de la presente. Tanto Hansell Riojas como Adrían Zela tuvieron serias dificultades para contener el ataque rimense; incluso el segundo, en intento de despejar un balón, produjo un autogol. Luis Ramírez, con lentitud pero con pases precisos, fue el hombre fundamental para aprovechar las licencias de la volante de marca rival: asistió a Claudio Villagra para concretar el empate. Sin embargo, un minuto después de su mejor aporte se lesionó y Boys perdió el toque sutil que solo podía darle 'Cachito'. El inconveniente rosado en el complemento fueron los goles rápidos y consecutivamente encajaos, sumados al resquebrajamiento de la capacidad física. Aunque un balón le quedó solo frente al arco a Adán Balbín, disparó muy alto: era el segundo tanto, que tal vez habría modificado el ritmo del encuentro cuando aún faltaban 20' por jugarse.

Cristal: Los dirigidos por Roberto Mosquera presentaron como novedad a Jhon Marchán, quien tuvo un buen primer tiempo y fue vital en el arrollador inicio celeste. El venezolano fue artífice de dos claras ocasiones de gol que desperdiciaron tanto Emanuel Herrera -alejado de su efectividad acostumbrada- y Washington Corozo, quien luego se resarció con creces. Los laterales Renzo Revoredo y Nilson Loyola encontraron facilidades por sus bandas y consituyeron otros puntos de apoyo al ataque. No obstante, cuando el cuadro cervecero perdía el balón se vio afectado por errores en la coordinación y seguridad en la marca. Muestra de ello es el gol rosado; tanto Adán Balbín como Luis Ramírez ganaron dos divididas consecutivas que concluyeron con el tanto de Claudio Villagra. Sin embargo, las buenas triangulaciones y la efectiva ubicación en ofensiva consolidaron la goleada, que pudo ampliarse porque tras el tercer gol y con casi 40 minutos por disputar, Cristal le cedió espacio al rival, lo esperó y cuidó el balón. Tras un larga pausa, a 2' del final Kevin Sandoval concretó la goleada.

El Capo: Omnipresente

Corozo celebra su tanto, acompañado por Marchán, también clave en la goleada. (Foto: Prensa FPF) 

Asistió a Nilson Loyola que produjo el autogol de Adrian Zela, consiguió un golazo desde el borde del área -que tranquilizó a los celestes-, dio el pase para el tanto de Kevin Sandoval. Así fue la participación de Washington Corozo: el ecuatoriano fue primordial en la goleada, todo agregado a su aporte para mantener el balón en área rival cuando la marca y la recuperación porteña asomaron.

Kazuki Ito: Aquí mando yo

La cuarteta dirigida por Manuel Santivañez, quien estuvo bien ubicado siguiendo las jugadas, estuvo alejada de polémicas. En una acertada intervención, el juez de los bigotitos dejó seguir las acciones tras una barrida de Renzo Revoredo, quien le ganó el balón a Sebastián Penco en un movimiento que a primera impresión pareció penal, pero no lo fue. Ya en los minutos de adición, expulsó a Claudio Villagra por una fuerte falta contra Johan Madrid.

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Fotos: Pedro Monteverde / DeChalaca.com; Prensa FPF


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La ficha del Boys 1 - Cristal 4

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