Como en botica
Puntas poco eficaces, sangre, amarillas por doquier, una mano, dos expulsados y auriculares inservibles fueron algunos de los protagonistas del que quizás se convirtió en el partido más intenso de la fecha. Encuentro que dejó en claro que Juan Aurich se sintió más local que nunca en Lima y que la San Martín, a pesar del 1-1, sigue siendo un importante candidato.
Fotos: Gian Saldarriaga / DeChalaca.com
San Martín tuvo un juego aceptable que no fue suficiente para colmar las expectativas de aquellos que esperaban una goleada al Aurich como desquite del sinsabor que le dejó la derrota frente a la Católica de Chile en su último partido de la Libertadores. Y es que ni bien había sonado el pitazo inicial, el Juan Aurich comenzó a ejercer presión por el lado izquierdo y dio origen a un intento de César Sánchez que estuvo a punto de abrir el marcador.
Esto llevó
al cuadro de Santa Anita a reaccionar mediante pelotazos centrales dirigidos a
Roberto Silva, quien pareció necesitar compañía en la delantera y no pudo
ganarle el duelo en el área chiclayana a Luis Guadalupe, de notable actuación
por segundo partido consecutivo. Eb la delantera visitante, Fernando ‘La Rata’ Rodríguez también se
mostró solo y con poco movimiento. Esto condujo a que tanto el argentino como Silva
fueran sustituidos por Roberto Holsen -en el entretiempo- y Ricardo Andrade ‘Ricardinho’
durante el segundo tiempo, respectivamente.
DE TODO UN POCO
El debut de Ricardinho fue solo una de las particularidades que tuvo el encuentro dominguero. El brasileño, que hasta el día de hoy había sido el único extranjero de la San Martín sin minutos de juego en el Apertura, tuvo una actuación discreta al mostrar problemas en definición y en el control del balón.
Fue así que
los goles tuvieron otros autores. El tanto de los santos fue de José Luis Díaz,
quien no pudo celebrar su anotación ya que debió ser trasladado a la Clínica Javier
Prado a raíz de un corte en la ceja luego de un cabezazo con Mario Gómez
durante su definición. ‘Machito’ también sufrió un corte en la cabeza, que por
su menor consideración le permitió disputar el resto del partido.
Cuando la San Martín creía haberse quedado con la victoria, llegó el empate con una definición también de cabeza, obra de José Moisela, a solo 3’ de que culminara el encuentro. Lo destacable fue la calma que mostró el Aurich en su juego, a pesar de tener el marcador en contra.
Por otro lado,
un partido aparte fue el de los árbitros quienes, por ejemplo, fueron
notificados de una supuesta mano de Johnny Lalopú, ocurrida en el minuto 6 del
partido, a través de imágenes de televisión visualizadas durante el
entretiempo. 
Se desconoce si esta imprecisión tuvo que ver con la decisión de
Víctor Hugo Carrillo de deshacerse de los auriculares antes de iniciarse la
segunda mitad del encuentro. El árbitro, posteriormente, señaló que los
referidos artefactos presentaban fallas, por lo que entorpecieron su trabajo.
Otra polémica arbitral se dio a raíz de que Mario Gómez hizo su ingreso al campo dos veces cerca de la zona donde estaba la pelota en juego luego de recibir atención médica por su mencionada herida en la cabeza. A esto se suma el hecho que el lateral izquierdo jugó parte del encuentro con el short ensangrentado, hecho que está prohibido por el reglamento.
Las tarjetas también formaron parte del show. Fue así que Carlos Zegarra y Alexander Sánchez abandonaron en el cotejo durante la primera mitad al agredirse mutuamente luego de una falta del primero sobre el segundo. Además, se repartieron 10 tarjetas amarillas a raíz de la calentura que invadió a los jugadores luego de las mencionadas expulsiones.
AURICH ALIMEÑADO
Dejando las controversias de lado, el Juan Aurich demostró estar cada vez más “alimeñado”. Esto no solo a raíz de las buenas actuaciones como visitantes de Andreoli, Lalopú y Guadalupe, sino también por el número importante de hinchas que acompañó al cuadro chiclayano en la jornada dominguera. Estos seguidores hicieron de las suyas en el San Martín y dejaron bastante relegada a la ‘Muela’ con sus cánticos a viva voz.
Como colofón, cabe destacar la imagen del ‘Cuto’ Guadalupe, quien al parecer se ha convertido en el nuevo ídolo de los hinchas norteños. No dejaron de aclamarlo durante todo el encuentro. Con razón dicen que Chiclayo es la ciudad de la amistad.
El gol con sangre entra: el extraño tanto del argentino Díaz
¿Hacía cuánto Aurich no empataba en el estadio San Martín?
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