El rugido del silencio
¿Cómo decir que León presentó pelea siempre si para esta penúltima fecha ya estaba fuera de la lucha por llegar, siquiera, a la Copa Sudamericana? Fácil, en los quince partidos que perdió solo en dos de ellos fue superado por dos goles (perdió 2-0 en la cancha de Melgar y Real Garcilaso le ganó 0-2 en Huánuco) sus otras trece derrotas fueron por apenas un gol. Además de esas quince derrotas exiguas, también empató otras quince veces, cinco de ellas como visitante. Además, al término de las primeras 30 fechas se colocó en el noveno lugar a solo puntos de la zona de clasificación a Sudamericana, pero a quince de Libertadores.
Sin duda que está posición no cayó bien en tienda crema y se decidió destituir al técnico Aníbal Ruiz, quien tuvo problemas con parte del plantel y tuvo, sin duda, mala suerte con los resultados porque en el fútbol, si había deuda, era bastante corta. Tal vez chocó que se haya quedado tan alejado de la Libertadores, pero es innegable que Cristal, Real Garcilaso y Vallejo trabajaron bastante mejor desde el inicio. No solo que León, sino que estuvieron por encima de todos los demás como lo demuestra la tabla a una sola fecha del final del Descentralizado. Luego, ya en la etapa de las series, con dos derrotas de local, tres empates también en Huánuco y un bajo promedio fuera de casa, se consumó lo que se podía prever desde setiembre: León no iba a tener presencia internacional en el 2013.
Esto significó la ruptura de una racha corta pero trascendente: la de dos años consecutivos de clasificación a Copas. El cuadro huanuqueño regresó luego de quince años a la Primera división y lo hizo pisando muy fuerte, con lo que esta temporada representa una desilusión para su gente. Pero el trabajo sigue ahí, todo aquello que se sembró en estos últimos años puede seguir cosechándose. A no abandonar la chacra solo por una mala estación porque Huánuco, con su León, tiene mucho todavía por darle al mercado.
Foto: Jhon Guevara / Revista Alto Mayo
escrito por leo , November 20, 2012