Del arco a la línea de cal
Jacinto Rodríguez y Gustavo Bobadilla son los dos primeros ex goleros paraguayos que se enfrentan como entrenadores en el fútbol peruano.
Algunos clubes nacionales reforzaron sus plantillas en los últimos años con
arqueros extranjeros. Dos de ellos, Jacinto Rodríguez y Gustavo Bobadilla, de
nacionalidad paraguaya, actuaron en el Perú en la década de los años '90 por
equipos diferentes.
Rodríguez llegó al Perú en 1991 y jugó en Sport Boys hasta 1994. Luego, en 1995, y ya nacionalizado peruano, fue contratado por Alianza Lima, y en 1996 volvió al Callao. Y no obtuvo títulos nacionales. Fue internacional juvenil con su país y jugó, entre otros, en Sportivo Luqueño y Cerro Corá.
Bobadilla, ex internacional con su país de origen en los años '80, defendió a Deportivo Municipal (1991-92) y FBC Melgar de Arequipa (1993). Y tampoco dio una vuelta olímpica. El actual entrenador rojinegro trabajaba en El Nacional de Quito, Ecuador, cuando le llegó una oferta para hacerse cargo de la dirección técnica del cuadro mistiano en reemplazo de Rafael Castillo. Su pasado en la Ciudad Blanca favoreció a este ex arquero, que en Paraguay había defendido, entre otros, a Sol de América, Atlético Colegiales, Sportivo Luqueño y San Pedro.
Ambos coincidieron en las selecciones juveniles de Paraguay, aunque nunca pudieron consolidarse como titulares por la presencia de Roberto ‘Gato’ Fernández y Ever Hugo Almeida, este último uruguayo nacionalizado paraguayo. Se instalaron en el Perú en 1991 para finalizar prácticamente sus carreras deportivas y, tras colgar los botines, se pusieron el buzo de entrenadores, faceta en la que se inician de manera autónoma.
Rodríguez, quien tiene 47 años, empezó su carrera como asistente en varios comandos técnicos, entre ellos el de Olimpia de Asunción. Y Bobadilla, de 49, trabajó en varias selecciones de Paraguay hasta que se le presentó la oportunidad de trabajar en Ecuador con Almeida.
Estos dos ex porteros fueron compañeros en la selección de Paraguay, y rivales en la liga de ese país y en el torneo peruano. Y este domingo, en el estadio Miguel Grau del Callao, volvieron a encontrarse en una cancha de fútbol, aunque más cerca de la pista atlética que del arco.
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