Blancura rociada con mostaza
Deportivo San Martín y el Barcelona SC de Ecuador empataron 2-2 en el estadio Nacional en un amistoso -como parte de la jornada de solidaridad con los damnificados por el último terremoto- que sirvió para ver caras nuevas en el conjunto santo. Ante el cuadro mostaza de Guayaquil, el 'Chino' Rivera pudo comenzar a medir el roce internacional de su equipo de cara a la Copa Libertadores.
Originalmente, San Martín iba a jugar este domingo contra el encumbrado Sao Paulo de Brasil, pero a mitad de semana se cambió el rival por el Barcelona de Guayaquil. Ante ese cambio, la prueba se presentaba idónea para ver como estaban algunos jugadores que no había utilizado Rivera, pese a tratarse también de un equipo con reconocimiento continental.
Una cara conocida estaba en el banquillo de la visita. Era nada menos que el paraguayo César Mario Jacquet Martínez. El técnico del 'Ídolo Guayaquileño' -como se conoce al cuadro mostaza en su país- ya sabía qué era dirigir en territorio peruano. En su vasta trayectoria, ha dirigido en su país a Tacuary, 12 de Octubre, Sportivo San Lorenzo, Sportivo Luqueño y Guaraní -con este último salió campeón en el 2001-. También entrenó la selección Sub-20 paraguaya en el Mundial de Nigeria 1999. Y pocos meses luego de ello, no le faltó la opción de venir al Perú para dirigir a un equipo tradicional del medio: Alianza Atlético de Sullana.
Jacquet, que en aquella ocasión había sustituido a Teddy Cardama, volvió a Lima en la misma semana en que el técnico nacional ha regresado por quinta vez a Alianza Atlético. El paraguayo asumió en la fecha 11 y dirigió 12 partidos hasta fin de temporada, campaña que culminó con los sullanenses ubicados en el sétimo lugar de la tabla del Clausura. De otro lado, el apellido Jacquet también es conocido en el país en algunos lares del Callao: Justo Pastor Jacquet Muñoz, ex mundialista paraguayo en México 1986, jugó por Sport Boys en el Descentralizado 1993. El lateral izquierdo, que fue habitual participante en las selecciones paraguayas desde 1983 hasta 1991, no tiene ningún vínculo familiar con el DT del Barcelona -y hasta se sabe que la relación entre ambos no es la mejor-.
De otro lado, el del domingo es uno de los escasos partidos contra equipos internacionales que ha jugado San Martín en su corta historia. Sus pocas experiencias se resumen a cinco partidos, todos amistosos. El primero fue en febrero de 2005 contra Once Caldas en Colombia, el cual perdió 2-1. Luego, en enero del año pasado, hizo una gira por el país cafetero en la que venció 0-3 al Real Cartagena y cayó 5-2 ante el Deportivo Pereira. Finalmente, se recuerda el cuadrangular jugado previamente al inicio del actual Torneo Clausura junto a Sporting Cristal, Universidad Católica y Liga Deportiva Alajuelense; cayó 1-4 ante los chilenos e igualó 1-1 frente a los costarricenses. Sin duda, su participación en la próxima Copa Libertadores exige que esta institución seria siga acumulando roce internacional para terminar de encumbrarse como uno de los cuadros más representativos del fútbol peruano.
Quizá pensando en los recambios para esa circunstancia, en el encuentro ante el Barcelona el 'Chino' Rivera optó por probar nuevos elementos en el once titular, como Josepmir Ballón, Daniel Peláez o Atilio Muente, así como dar actividad a los argentinos Juan Manuel Zandoná y Enzo Gutiérrez o al nacional Wilmer Carrillo, que no ha tenido mucha participación reciente. En el complemento alternó incluso el lateral Anthony Molina, integrante del seleccionado Sub-17 en el último Mundial de Corea del Sur.
En tanto, el equipo guayaquileño presentó algunas variables en la oncena titular que presenta habitualmente en su campeonato local, el cual lidera en estos momentos con 21 puntos tras 12 fechas jugadas. Solo viajaron 17 jugadores debido a que algunas de sus principales figuras estaban lesionadas: Marcelo Chelo Delgado, Raúl Noriega, Marlon Ayoví, Fricson George y Danny Vera. Como todo partido amistoso, el partido se desarrolló bajo circunstancias pasivas, pero por pasajes terminó siendo un encuentro en que los dos equipos disputaban cada pelota como si fuera una final de campeonato.
La escuadra blanca empezó asustando con un remate de Peláez de media distancia que chocó en el travesaño. Barcelona achicó espacios en la mitad de cancha, y respondió con una pelota bien quitada por Enrique Gámez, quién efectuó un tiro de media distancia para concretar el 1-0. El portero Marco Flores no llegó a extenderse del todo, y no pudo evitar el tanto.
Se veía una leve diferencia por parte del conjunto ecuatoriano por la predominancia de la fuerza física y el biotipo. La respuesta del cuadro universitario vendría tras un tiro de esquina. Lo vistoso es que el hermano menor de Henry Quinteros, Ronald, cada día esta evolucionando, y regaló al público que estaba en el estadio un auténtico golazo. Fue una especie de volea-tijera contra el césped artificial, que dejó estático al guardameta ecuatoriano Villafuerte.
En el segundo tiempo, los norteños volvieron a ponerse en ventaja. El tanto fue marcado tras una gruesa descoordinación en el área santa, hasta que, completamente solo, el paraguayo Ferreira metió el botín para marcar el tanto. Pero su alegría apenas duró dos minutos, ya que el zurdazo de un recién entrado Ryan Salazar estableció el definitivo 2-2. El 'Soldado' sigue anotando con chompa blanca y se asienta así como titular de cara a los partidos venideros.
