Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comLa selección peruana sufrió la cancelación de tres de sus cuatro amistosos contra Bolivia y Chile debido a los problemas sociales que afrontan dichos países. ¿Cuánto afecta al conjunto nacional este inconveniente?

    Jorge Frisancho | @wolfs_venom15
    Redactor

Para este mes de noviembre, la selección peruana programó dos amistosos -contra Colombia y Chile- para el equipo principal y otros dos cotejos -ambos contra Bolivia- para el equipo Sub-23. Sin embargo, las actualidades política y social de Chile y Bolivia forzaron la cancelación de los partidos que se iban a jugar, lo cual ha caído como un baldazo de agua fría en la Federación Peruana de Fútbol (FPF), pues atenta contra lo planificado y le deja poco margen a ambos seleccionados -sobre todo a la Sub-23- para sus respectivos torneos venideros.

Desafortunadamente para los intereses blanquirrojos, los problemas internos tanto de Chile como de Bolivia afectaron el destino de sus respectivas selecciones, las cuales o bien no pudieron viajar –como en el caso del país altiplánico- o se negaron a jugar el partido –el cual es el caso de los futbolistas del país sureño-. De esta manera, a priori, se pierde la última fecha disponible para poder probar al equipo con miras a las Eliminatorias para Qatar 2022. Si bien los argumentos esgrimidos por ambos rivales son totalmente válidos y batante comprensibles, son los combinados Sub-23 y mayores los que están pagando las consecuencias de tener un universo reducido de rivales potenciales para pactar amistosos.

Precisamente, al ya conocido apretado calendario europeo -el cual se ha vuelto más estrecho aún debido a la creación de la UEFA Nations League-, ahora la Concacaf ha decidido implementar el mismo modelo del torneo mencionado, es decir, dividir a las selecciones miembro de esta confederación en grupos de acuerdo con su clasificación en el ranking de la FIFA. Este torneo ha provocado que las selecciones centro y norteamericanas tengan menos fechas disponibles, por lo que conseguir amistosos se ha vuelto una tarea muy complicada, pues en Europa, África y Asia también se manejan calendarios muy saturados. Es cierto que en el caso asiático hay más posibilidades, pero los amistosos se deben programar con mucha anticipación.

Perú y Colombia vuelven a verse las caras este año: ¿les suma jugar entre sí de modo tan seguido? (Foto: Álex Melgarejo / DeChalaca.com) 

En consecuencia, se ha observado que los últimos cotejos amistosos del Perú han sido ante selecciones sudamericanas. Con tan poco margen de maniobra, los eventos extrafutbolísticos -y muy lamentables- que han ocurrido han perjudicado todo el plan de trabajo del comando técnico encabezado por Ricardo Gareca.

Respecto de este último punto -el hecho de jugar partidos ante rivales del mismo continente, en este caso, Sudamérica- Carlos Queiroz expresó su molestia, pues al jugar tantas veces seguidas ante un mismo rival, disminuye la posibilidad de apelar al "factor sorpresa" dado que ambas escuadras se van a conocer de memoria y no será una prueba tal como buscan los entrenadores. Esta crítica es válida en el sentido de que mientras exista una mayor variedad de rivales los equipos pueden probar diversos esquemas y adaptarse a distintos escenarios; sin embargo, esto se pierde al jugar con un mismo rival que juega siempre de una misma forma.

Finalmente, otro tema que se debe destacar y que agudiza aún más la problemática de poder encontrar rivales para partidos amistosos es el nuevo criterio de la Concacaf para determinar sus grupos para las Eliminatorias a Qatar 2022. Para esta oportunidad, decidió recurrir al ranking FIFA para conformar el hexagonal final, así como aquellos grupos que deben disputar las fases previas. Por este motivo, las selecciones de esta confederación son más "cuidadosas" -por así decirlo- a la hora de elegir a sus posibles sparrings debido a que una derrota en un amistoso les puede perjudicar su posición en el ranking, lo cual conlleva a que se vean perjudicadas a la hora de ser asignadas a sus grupos respectivos. Es lamentable que este experimento perjudique a selecciones ajenas a esta confederación, pues los conjuntos centro y norteamericanos ya no eligen de manera indistinta a sus rivales sino que analizan los pros y contras respecto de sus implicancias en el ranking FIFA. Como se observa, mientras hayan innovaciones de este tipo, será más complicado para las selecciones sudamericanas pactar amistosos y, además, tener un plan B o C, tal como ha sucedido en la presente fecha FIFA.

Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com


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