Aunque ya no estuvo en el campo para la tanda de penales, Pablo Felipe tuvo un papel importante en el partido que consagró a Atlético Paranaense campeón de la Sudamericana 2018. El atacante anotó en el tiempo reglamentario -el gol lo erigió de paso entre los máximos artilleros del torneo- y supo asociarse para generar peligro en campo de Junior.

Ilustración: Lenin Auris / DeChalaca.com

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