Alianza Lima - Botafogo: Apaga-fogo
Hace 25 años Alianza Lima venció 1-0 a Botafogo con gol del brasileño Claudio Adao. Aquel amistoso sirvió para rendir tributo a Didí en el día de su cumpleaños. Además, fue el primer triunfo del serbio Simo Vilic, técnico que llegó a La Victoria para acabar con la crítica situación del cuadro íntimo.
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Roberto Gando | @Roberto_Gando Editor |
El nonagésimo aniversario de Alianza Lima se celebró por partida doble en 1991. Primero, cuando el 16 de febrero le ganó por penales a la Universidad Católica de Chile, equipo que acabó con José ‘Chemo’ del Solar de arquero; y luego, cuando el 8 de octubre recibió a Botafogo de Brasil, uno de los clubes históricos de su país y que llegó acompañado por Didí, quien así celebró en suelo peruano sus 63 años de vida.
Las postales
Recibir en La Victoria al extécnico íntimo fue solo uno de los atractivos que ofreció Alianza durante esa jornada, en la que además se consiguió el refuerzo de César Cueto -ya retirado de forma oficial- y de los también brasileños Claudio Adao -goleador del campeonato de 1990 con Sport Boys- y Roberto Dinamite -ídolo máximo en Vasco da Gama-.
El espectáculo no empezó como esperaban los poco más de 7,800 espectadores en Matute, pues pese a que se anunció la presencia del cantante Antonio Cartagena, este no se hizo presente al aducir problemas de salud. La baja asistencia se entendía por la pobre campaña del equipo blanquiazul, que llevaba cinco encuentros sin ganar en el campeonato. El último de esos partidos fue un empate sin goles ante San Agustín, choque que significó el debut del DT serbio Simo Vilic, quien así regresó al fútbol peruano tras su experiencia al mando de Unión Huaral entre 1989 y 1990.
Esa tarde poco cambió en el juego aliancista, pues solo un grosero error del árbitro Carlos Mansilla permitió anotar al local cuando se jugaban 43 minutos. La acción la protagonizó Adao, quien batió al golero Ricardo Cruz luego de controlar el balón con la mano. Ya en el descanso, en las tribunas se reavivó la expectativa por lo que pasaba en el estadio, pero no por el juego, sino porque se sorteó un auto. Al final, el ganador resultó ser un afortunado hincha de Universitario que asistió a Matute con ganas de ver fútbol.
En el complemento no pasó mucho más en la cancha salvo por los cambios. En Botafogo, por ejemplo, hizo su ingreso Marcelo Bujica, delantero que en 1996 arribó como refuerzo a Alianza y que se quedó el siguiente año para ser campeón. Con el 1-0 el plantel blanquiazul no solo ganó el amistoso, sino también cierto aire para recuperar posiciones en el Torneo Regional, en el que luego sumaron hasta cuatro triunfos consecutivos.
Ese repunte convenció a la directiva de Alianza Lima a depositar toda su confianza sobre Simo Vilic, quien pese a no clasificar al octogonal que daba acceso a la liguilla por el título, mantuvo su cargo para la siguiente temporada en la que los íntimos esperaban armar un cuadro con jugadores de las canteras. Su misión, sin embargo, quedó inconclusa, pues falleció durante el verano de 1992.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diario Ojo
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