Perú - Paraguay: El patrón velAscues
El partido fue…
CAMBIANTE. De principio a fin, se vivió un partido intenso pero con un claro dominador en el primer tiempo, en el que Paraguay impuso su propio ritmo y volvió inofensivo al seleccionado bicolor, poniéndolo contra las cuerdas. A consecuencia de ello, llegaría el primer tanto de Roque Santa Cruz, a los 43’, quien aprovechó una de las tantas licencias defensivas que dio Perú atrás y sentenció con un buen remate que se desvió en Luis Advíncula y venció a Pedro Gallese. El complemento se vio marcado por los distintos cambios que hicieron ambos técnicos; la selección se quedó con diez tras la expulsión de Paolo Guerrero por doble amarilla, pero pudo remontar el marcador gracias a las frescas individualidades -Carlos Ascues, Cristian Benavente y Yordy Reyna-, quienes sacaron su mejor versión de sí mismos para rescatar una victoria con pundonor.
Las Fotos
El Capo: Carlos Ascues
Su performance, si no fue soberbia, fue cercana a la excelencia. Ingresó a los 72’ para reemplazar a Luis Ramírez -de flojo partido- y en menos de un minuto ya había generado una clara de gol, que pasó cerquísima del arco de Justo Villar. Ahí nomás, a los 73’, arrancó en gran individual hacia el arco del portero paraguayo y, tras sacarse a los recios defensores, quedó a tiro de gol para sentenciar con un derechazo que puso el suspenso en el parante antes de ingresar: fue el 1-1. Con el envión anímico de haber alcanzado la paridad, el equipo mejoró notablemente y otra vez apareció el volante, a los 82’, para sentenciar con un esquinado derechazo -tras una buena triangulación- que dejó pasmado a un recién ingresado Antonio Franco. Fueron dos goles en menos de diez minutos para el jugador de la San Martín, quien mejora claramente su rendimiento cada vez que viste la blanquirroja.
La Pizarra
Tal vez el mayor acierto de Pablo Bengoechea fue animarse a soltar a los jóvenes jugadores en la segunda mitad, pese a marchar con el marcador en contra. El 4-3-3 propuesto inicialmente tenía a Iván Santillán como lateral izquierdo -ocupando la posición del expulsado Yosimar Yotún-, a Christian Ramos y Alexander Callens como centrales y a Luis Advíncula en su ya acostumbrada posición de lateral derecho. Al medio, Josepmir Ballón partió como ancla, acompañado más adelante por Luis Ramírez y Mario Velarde. Arriba, Juan Manuel Vargas estuvo abierto por izquierda; Jean Deza, por derecha; y Paolo Guerrero solitario en punta. En el complemento, Santillán abandonó el campo por haber sido la zona más vulnerable del equipo; de esta forma, Vargas retrocedió como lateral y permitió que André Carrillo ocupara su posición. Cristian Benavente suplió a Velarde y Yordy Reyna a Deza; no obstante, la expulsión de Guerrero empeoró las cosas y parecía venirse la noche para el cuadro peruano, que se acercaba pero no definía. A los 72’, Ascues y Atoche asumirían el mediocampo y el destino del partido cambió en un abrir y cerrar de ojos. El ingreso de Miguel Araujo por Benavente sirvió para asegurar el resultado con una línea de cinco atrás, tras la expulsión de Reyna.
Víctor Genes, en tanto, partió con 3-4-3 altamente conservador, pero que se volvió mortal ante las deficiencias peruanas en defensa. Luis Cardozo, Pablo Da Silva y Gustavo Gómez estaban en la zaga, mientras que Jorge Moreira e Iván Piris arrancaron como volantes laterales. Al medio, Cristian Riveros y Celso Ortiz se encargaron de la zona medular. La ofensiva perteneció a Ángel Romero, Édgar Benítez y Roque Santa Cruz, quienes cerraron el tridente paraguayo. En el complemento, Genes movió el esquema a un 4-3-3, asentando atrás a Moreira definitivamente como lateral derecho, mientras que Da Silva y Cardozo formaron la zaga, que se completó con Piriz por el carril izquierdo. Lo que haría después sería solamente refrescar el mediocampo y probar alguno que otro jugador en su puesto, como el portero Franco, que gozó de algunos minutos de juego.
Kazuki Ito: Wilmar Roldán
Aceptable arbitraje del colombiano, que no dejó que el partido se le vaya de las manos en ningún momento. Sancionó con criterio, aunque las expulsiones a Reyna y González no parecían tan justificadas; la de Guerrero, sin embargo, sí. El capitán del cuadro peruano pudo haber sido expulsado en el primer tiempo por su actitud retadora pero el principal solo lo contuvo con una amarilla.
Foto: ANDINA