Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comLa Segunda División, que este año ha expandido su proceso de descentralización, mira con cierta cautela lo que podría pasar con el desenlace de la Copa Perú: los 16 equipos que están en la Etapa Nacional podrían ocupar las mismas plazas de hasta seis clubes del torneo de ascenso.

 

Si hay un aspecto que ha venido diferenciando a la Segunda en los últimos años es su proceso de descentralización, la cual se adoptó en 2006 y, de manera progresiva, ha ido incrementando la distribución de clubes de diferentes localides del Perú. En 2014, por ejemplo, nueve equipos del torneo de ascenso no pertenecen al departamento de Lima, cuatro pertenecen a Lima provincias, uno es del Callao y apenas dos de Lima Metropolitana (uno de ellos, Pacífico, funge de local en Huacho). En suma, el producto cumple con creces la idea de expandirse a lo largo y ancho del territorio nacional.

Tal figura, desde luego, podría replicarse en 2015, pero habría que prestar atención a un detalle importante, y que bien podría generar una figura hasta aquí poco recurrente en la Segunda: que haya dos equipos que puedan ocupar una misma plaza, situación que -se entiende- podría acuñar el concepto de rivalidad en un torneo que solo ha cobrado expectativa por el hecho de otorgar el ascenso al campeón. Sería, sin duda, un novedoso atractivo que le otorgaría otro matiz a este campeonato y, de paso, le permitiría focalizar -o impulsar- identidades marcadas por rivalidades futbolísticas.

No debería ser un chancay de a sol

Hay dos casos puntuales que, de acuerdo con los equipos que están en la Etapa Nacional, podrían darle vida a esta figura; obviamente, y de acuerdo con el reglamento, siempre que obtengan el subcampeonato de la Copa Perú. El primer caso es el del Aurora Chancayllo, equipo del distrito de Chancay, provincia de Huaral, en el Departamento de Lima, que es el actual campeón de la Región IV y, de al menos obtener el acceso a la Segunda División, se va a topar con otro equipo que ya se ha ganado un respaldo en esta localidad: el Deportivo Coopsol.

Aurora Chancayllo y Coopsol sostiene una singular comunicación para programar sus partidos en el Rómulo Shaw Cisneros (Foto: Marco Villaflor)

Desde luego, para ambos no habría otra opción y tendrían que compartir el estadio Rómulo Shaw Cisneros entre fecha y fecha. Es más, hasta se puede avizorar reciprocidad entre los dos clubes, como ya lo destacó DeChalaca tras el gesto coopsolista para la programación del duelo del Chancayllo en el partido de ida de octavos de la Nacional. Lo importante, eso sí, es destacar que el Aurora Chancayllo es uno de los clubes más representativos de Chancay, con un arraigo importante y que, quien sabe, podría opacar la supervivencia del Coopsol.

Buen aforo siempre habrá (si les va bien)

El otro caso que podría dar pie a la posibilidad de que dos clubes ocupen una misma plaza en la Segunda División es el de los actuales representantes de la Región III: Sport Loreto y Santa Rosa. Ambos, si llegan a este torneo, podrían compartir localía con el Defensor San Alejandro, que es el distrito de Irazola, de la provincia de Padre Abad, pero por falta de un escenario acorde en su localidad funje como dueño de casa en el estadio Aliardo Soria Pérez.

Acá, la figura que se descarta de plano es el de un desnivel de aficionados en el partido de uno u otro equipo: el aficionado pucallpino, como el de la selva en general, siempre se ha caracterizado por ser futbolero y abarrotar las graderías hasta en un partido de resonancia amateur. Por ello es que es poco probable que dejen de gozar algún tipo de respaldo. Figurativamente, eso sí, el que se llevaría las preferencias sería el Sport Loreto, que es el equipo más popular del departamento de Ucayali. Una pésima campaña, eso sí, podría convertirse en un factor clave, y en ese sentido el aficionado de esta localidad si es poco condescendendiente: basta recordar el triste paso del Tecnológico en la Segunda 2010, sobre todo cuando ya estaba lejos de la salvación.

Más casos, pero diferenciados

Alfonso Ugarte y Sport Victoria no deberían tener mayores complicaciones con los escenarios donde jugar (Foto: Puno Deportes)

Hay cuatro posibilidades más de plazas para compartir en la Segunda 2015, pese a que las situaciones podrían ser diametralmente distintas. El caso más concreto es la de una eventual llegada del Defensor Zarumilla a este campeonato: pese a ser de Nasca, no se desacartaría la posibilidad de que encare partidos en el Picasso Peratta de Ica, en el que podría coincidir con el Sport Victoria, siempre que este año conserve la categoría. Este, por tratarse de dos equipos con amplia popularidad en sus respectivos distritos, sí tiene la pinta para ser acaso el cruce con más rivalidad entre todos los que actualmente están en la Etapa Nacional y podrían llegar a la Segunda.

Un caso parecido, pero más que nada por obligación por temas de desplazamiento, es que el que podría surgir con el Unión Fuerza Minera, del distrito de Putina, de la provincia de San Antonio de Putina, en Puno, con la posibilidad de coincidir en el estadio Enrique Torres Belón de Puno.

Distinta, más bien, es la situación del Defensor La Bocana, del centro poblado Parachique, en el Distrito de Sechura (provincia con el mismo nombre), que de llegar a la Segunda debería jugar como local en el recientemente remodelado estadio Sesquicentenario de su localidad y no tendría por qué compartir plaza con el Atlético Torino. Lo propio debería ocurrir con el Sport Chavelines Junior, que pertenece a la provincia de Pacasmayo y debería de jugar en el estadio Municipal de dicha ciudad, por lo que tampoco tendría por qué compartir plaza con el Mannucci. 

Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: Marco Villaflor, Puno Deportes


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