Un granate en el verde
Este domingo Atlético Torino recibirá a Sportivo Huracán en el estadio Campeonísimo de Talara en uno de los cotejos más atractivos de la octava fecha. Por ello, evocamos uno de sus enfrentamientos históricos, el que se llevo a cabo en la Finalísima de la Copa Perú de 1975.
El inicio de todo
El cuadrangular final de la Copa Perú de 1975 reunió a Atlético Torino, Sportivo Huracán, Deportivo SIMA del Callao y la Compañía Peruana de Teléfonos de Lima. Además, este torneo, a diferencia de las ocho ediciones anteriores, no otorgó ningún cupo para la Primera División pues la Federación Peruana de Fútbol decidió separar el balompié aficionado del rentado.
En la fecha final de este cuadrangular se enfrentaban Torino y Huracán en igualdad de puntos: los talareños vencieron por 1-0 a SIMA del Callao y la CPT, mientras que los arequipeños hicieron lo propio con un marcador de 2-0 en ambas ocasiones. De esta manera, el ganador de este duelo sería el campeón del torneo.
Paridad sin resolución
El sábado 20 de diciembre de 1975, luego del cotejo preliminar en el que la Compañía Peruana de Teléfonos derrotó por 1-0 al SIMA, saltaron al césped del estadio Nacional Torino y Huracán con la consigna de lograr el título. El elenco talareño alineó de la siguiente manera: Valladares; Rojas, Agusto, Hernández y R. Vargas; Novoa y Zapata; Montero, Vargas, J. Zapata y Carrillo. Por su parte, Huracán envió al campo al siguiente once: Castillo; Alvarado, Pérez, Bustamante y Quiroz; Neyra, Torres y A. Neyra; Santalla, Núñez y Pacheco.
El cotejo comenzó con mucha intensidad, producto de ello, a los 9’ Torino se adelantó en el marcador a través de su capitán Enrique ‘Sívori’ Vargas que recibió un centro desde la derecha de Montero y, ante la indecisión del portero Castillo, envió el balón a las redes arequipeñas. Además de Vargas, en el primer tiempo destacó José Novoa pues se encargó de distribuir el juego y poner el orden en el mediocampo de su equipo; sin embargo, Zapata, Vargas y Montero se desgastaron en el primer tiempo, lo cual les pasó factura en la segunda mitad del juego.
En la etapa complementaria, Sportivo Huracán presentó una modificación que terminó resultando clave en el trámite restante del cotejo: Jorge Torres ingresó por Pacheco. Precisamente, a los 52’ Torres dio el primer aviso al enviar un potente remate hacia la portería de Valladares. Ocho minutos después llegó el empate arequipeño por obra del propio Torres que fue habilitado por derecha y envió un remate imposible de atajar para el arquero talareño. Luego de ello, Huracán contó con las mejores ocasiones para desnivelar el marcador, principalmente a través de Torres, Neyra y Santalla pero no pudo anotar el segundo gol. Por ello, con el 1-1 final, ambos equipos tuvieron que ir a un encuentro de desempate para definir al campeón.
No fue un lunes cualquiera
Dos días después se llevó a cabo el cotejo definitivo entre Torino y Huracán en el mismo escenario, con el arbitraje de Pedro Reyes. Las reglas estipulaban que ante un eventual empate se jugarían dos tiempos suplementarios de quince minutos cada uno y, de persistir la igualdad, se ejecutarían penales. El ‘Taladro’ saltó al campo de juego con la siguiente oncena: Valladares; Rojas, Córdova, Maldonado y Lolandez; Novoa y R. Vargas; E. Vargas; Zapata, Montero y Jorge Zapata. En tanto, el Globito arequipeño envió la siguiente alineación: Castillo; Alvarado, Bustamante, Pérez y Zúñiga; G. Neyra, O. Torres y A. Neyra; Santalla, Núñez y Jorge Torres.
El cotejo mantuvo la misma dinámica del partido anterior; no obstante, fue Huracán el que se adelantó en el marcador: a los 11’, Arturo Neyra anotó con un remate a rastrón de zurda tras un pase de Óscar Torres luego del cobro de un tiro libre. El elenco arequipeño siguió atacando, pero no supo aprovechar las ocasiones de gol que se le presentaron. Por el contrario, Torino empezó a tener mayor protagonismo y a los 28’ José Zapata se encargó de decretar la paridad tras una arremetida en el área rival que hizo estéril el esfuerzo del arquero Castillo.
En el segundo tiempo, Torino aprovechó las licencias que le otorgó su rival y obtuvo la ventaja definitiva en el momento preciso. A los 60’, José Zapata envió un centro desde la banda derecha y su hermano Jorge conectó el balón de ‘palomita’ para marcar el 2-1 a favor de los talareños. Los minutos restantes se tornaron emotivos pero el marcador no se movió más. Con ello, Torino fue el campeón de la Finalísima de la Copa Perú de 1975 ante la algarabía de los aficionados norteños que se dieron cita al estadio Nacional.
Luego de la premiación, Carlos Bustinza, técnico de Torino, señaló que su equipo merecía ascender al torneo profesional luego de haber disputado alrededor de 85 partidos, no obstante, las reglas ya estaban dadas y no hubo marcha atrás por parte de la Federación Peruana de Fútbol. A diferencia de aquella ocasión, este domingo Torino deberá defender el liderato compartido con Coopsol, teniendo como rival a un Sportivo Huracán que se mantiene invicto de visitante, lo que hace que será un choque tan cerrado e intenso como los de 1975.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diarios Extra y La Crónica
escrito por felinho , June 08, 2013
escrito por Juan Alberto Arica Mendoza , June 08, 2013