Jugando Solitario
Los 90 años de Octavio Espinosa esconden una serie de detalles inéditos: desde la auténtica ortografía del nombre del club hasta curiosidades sobre su origen y los clásicos que afrontó. Acá, vamos al rescate de esas tradiciones.
Más allá de que deportivamente Estudiantes de Medicina haya conseguido una mejor colocación en su paso por Primera División, Octavio Espinosa es indiscutiblemente el equipo más grande de Ica, por la hinchada que convoca y por la vigencia que tuvo en la máxima categoría: 14 temporadas, contra apenas tres del cuadro morado. La historia del 'Solitario del Sur', no obstante, no es muy conocida y merece estudiarse para aclarar algunas dudas que han subsistido sobre ella.
La fundación
A inicios de siglo, la actual calle Paita, en la parte norte del centro de Ica, se llamaba Malambito. Era un conjunto de casas predominantemente tipo chozas, de material noble; una zona de gente morena y humilde. Allí, un 21 de mayo de 1923, en la casa de la familia Arias, sita en el Callejón de Villagarcía, se celebró la primera sesión para fundar un club que identificara a la zona. Por sugerencia de Bartolomé Apéstegui, se decidió entonces tomar el nombre del aviador Octavio Espinosa. Doña Justa Arias, matrona familiar, fue la encargada de lavar las camisetas, que desde el primer día adoptaron el color rojo.
Entre los fundadores del club estuvieron vecinos de la actual calle Paita como Cornelio Fuentes Cordero, uno de los primeros porteros de Espinosa y además padre de Félix, quien fuera zaguero de Alianza Lima y además padre a su vez de Luisa Fuentes, la eximia voleibolista. También estuvo la familia Olaechea Uribe, cuyo hijo Andrés fue padre de Jorge 'Mango' Olaechea. Pero el primer presidente designado fue Roberto Falconí Huasasquiche, quien duró poco; en su lugar fue designado Agustín Bocanegra, empresario con vocación de periodista, bajo cuya batuta se dio impulso inicial al club. Este participó en un inicio en las dos ligas existentes en la ciudad: la Liga Asociativa de Ica y la Liga Federativa de Ica. Ambas, en 1926, se fusionaron para conformar la Liga Distrital de Ica, entre cuyos fundadores estuvo Octavio Espinosa.
El nombre y su ortografía
Octavio Espinosa Gonzales fue un periodista nacido en Lima en 1882, quien se dedicó a la aviación civil. En 1920, murió en vuelo víctima de un luctuoso accidente al chocar sobre la hacienda Oquendo con el aeroplano del piloto estadounidense Walter Pack. Cuenta la tradición Oral que Espinosa, en uno de sus vuelos, había llegado a aterrizar en Ica; no obstante, el experimentado y muy reconocido periodista iqueño José Luján, quien ha hecho una minuciosa revisión de los archivos periodísticos del diario La Voz de Ica, señala que no existe registro periodístico de tal suceso, que por su naturaleza habría sido un acontecimiento en la ciudad para la época. Como fuere, el hecho es que al parecer de eso tomaron referencia los vecinos de la calle Paita para bautizar al equipo.
No obstante, una duda eterna es si el nombre del club es "Octavio Espinosa" (con "s" final) u "Octavio Espinoza" (con "z" final). Al respecto, la tradición habitual en Ica ha sido escribirlo con "z", cual es el apellido castellano. Sin embargo, el diario La Voz de Ica recibió en la década de los setenta una carta de la hija de Octavio Espinosa Gonzales en la que ella solicitaba una aclaración al respecto pues su apellido se escribía con "s", por lo que entendía que el espíritu de los fundadores había sido respetar eso y por tanto había existido una deformación del nombre del club en la tradición oral. Por tanto, el diario más antiguo de Ica -en una pauta que también sigue DeChalaca.com- escribe el nombre del club como "Octavio Espinosa", aun cuando en algunos documentos oficiales se coloque con "z".
Los clásicos
Por su origen eminentemente barrial, Octavio Espinosa desarrolló temprana rivalidad con otro cuadro surgido en la misma calle Paita, a dos cuadras de distancia, en la 5: el Jorge Chávez. Este último se creó posteriormente y justamente tomó el nombre del famoso aviador peruano para ser una alternativa a Espinosa; adoptó camisetas verdes, similares al jersey que solía lucir Chávez hasta su muerte en Domodossola. Surgió así el "clásico aviador", uno de los primeros que tuvo el fútbol iqueño en su historia.
Sin embargo, el Chávez desapareció a mediados del siglo pasado, por lo cual Espinosa extendió su rivalidad a otro equipo fundado en la década de los veinte: el Sport San Martín, con quien protagonizó el principal clásico iqueño a partir de la extracción: mientras los de la calle Paita conglomeraban a los morenos y autóctonos, el San Martín, que venía de la zona sur de la Ica antigua, era un equipo de "blanquiñosos", como dicen los antiguos iqueños (una especie de Alianza - Universitario en sus orígenes). El clásico se prolongó hasta en 2011 San Martín perdió la categoría; actualmente milita en la Tercera División Distrital de Ica. Con Sport Victoria, el equipo más antiguo de Ica (fundado en 1916), Espinosa nunca tuvo mayor rivalidad; el rival de los blanquinegros, más bien, fue siempre el Sport Bolognesi, surgido -como el Victoria- en las cercanías de la plaza del mismo nombre, y desaparecido en los años setenta.
Los ídolos
Espinosa, como es natural, tuvo como primeros jugadores representativos a quienes surgieron de la vena de sus fundadores. Así, los hijos de doña Justa Arias, los gemelos Serafín y Alejandro Franco Arias, se encumbraron como los grandes ídolos del club en la década de los cuarenta, junto a su primo Ricardo Flores Arias. Posteriormente, en los sesenta, el club tuvo en sus filas al jugador iqueño más famoso de la historia: Adolfo Donayre, el 'Caballero del Deporte', quien había surgido en el Sport Bolognesi y luego de brillar en Centro Iqueño, Alianza Lima y Sporting Cristal jugó en Espinosa en Primera para retirarse de las canchas con sedas rojas en la Finalísima de Copa Perú de 1973.
Entre la camada más próxima, indiscutible recuerdo dejaron en la segunda etapa espinosista en Primera los hermanos Jesús y Freddy Torrealba, quienes posteriormente acabaron transferidos a Universitario. Sin embargo, ambos, por ser pisqueños de nacimiento, no tienen tanto impacto entre los hinchas rojos como un nativo de la ciudad: 'Miguelón' Martínez García, quien jugó en el equipo cuando este no estuvo en el Descentralizado, en los años setenta.
La primera etapa profesional
Entre 1961 y 1965, Espinosa vivió uno de los ciclos más brillantes de su historia al consagrarse pentacampeón de la Liga Distrital de Ica. A partir de tan magnífica campaña, fue invitado por la FPF a tomar parte del primer torneo Descentralizado de la historia en 1966. Su debut se produjo el 14 de agosto de ese año, ante Defensor Arica, que lo derrotó 0-1 en el Picasso Peratta. Para la historia quedaron los apellidos Tipiani, Campos, Benítez, Ramírez, Martínez, Anchante, Ormeño, Herrera, Franco, Uribe y Jhong como los primeros que vistieron las sedas rojas en la máxima categoría.
Espinosa quedó penúltimo en aquel torneo, con 12 puntos y solo 3 partidos ganados. Las bases del Descentralizado indicaban que solo el equipo provinciano mejor ubicado (que fue Atlético Grau) subsistiría en la Primera. Sin embargo, Espinosa, vía la Copa Perú de 1967, logró su inmediata reinserción en el torneo del mismo año: en una campaña pareja, comenzó venciendo a CNI y Juan Aurich, para luego caer ante Alfonso Ugarte de Chiclín (a la postre campeón) y empatar contra FBC Melgar. En el partido decisivo, Espinosa venció 3-1 a Cienciano y se clasificó tercero del hexagonal, con lo que garantizó el retorno. En ese momento, Espinosa quedó como único cuadro representante del sur del Perú en el Descentralizado, puesto que Melgar (cuarto en la Finalísima) y Cienciano (sexto) quedaron afuera; eso inspiró al músico iqueño Luis Quiroz Conca a componer una canción llamada Solitario del Sur en honor a tal condición excluyente, la cual quedó perennizada como himno del club y dio origen al apodo con el cual se lo conoce.
El segundo retorno
Espinosa cumplió su mejor campaña en 1968, cuando acabó quinto del Descentralizado detrás de Cristal, Aurich, Alianza y la 'U'. Pero en 1971 defeccionó y acabó penúltimo, con lo cual descendió a la Liga de Ica. Allí jugó hasta que en 1983, fue invitado por la FPF a tomar parte de la Segunda Experimental, en la cual fue líder casi todo el torneo, pero al final sufrió una mala racha que acabó relegándolo. Como ya se ha explicado en esta página web, se decidió desactivar esta Segunda Experimental para dar paso a los torneos Regionales, en cuya Zona Metropolitana fue reubicado Espinosa a partir de 1984, con lo que volvió a Primera con una derrota 0-1 ante Boys el 4 de marzo de aquel año.
Así, Espinosa se mantuvo en Primera durante las ocho temporadas que duraron los Regionales. Su mejor campaña, como ya ha repasado DeChalaca.com, se produjo en 1988. Con la reducción de equipos, en 1991, el 'Solitario' pagó pato: tras un terrible I Regional, quedó muy condicionado en la segunda parte del año en el puntaje acumulado y acabó descendiendo con seis jornadas de anticipación, al caer 3-1 contra Sport Boys en el Lolo Fernández el 27 de octubre de 1991, por la fecha 16 del II Regional Metropolitano. Semanas después, el 17 de noviembre de 1991, Espinosa se despidió de Primera con una victoria 2-0 sobre Internazionale de San Borja que apenas convocó a 96 espectadores a las tribunas del Picasso Peratta. Rolando Asseretto y Ricardo Quintana fueron los autores de los últimos goles que hasta hoy tiene el 'Solitario' en la máxima categoría.
El presente
Espinosa bajó a jugar en el Torneo Zonal de 1992 y luego se mantuvo en Segunda División hasta 1993, cuando acabó último y volvió a la Distrital de Ica. Desde entonces, no ha conseguido consagrarse campeón distrital, aunque en 2012 sí alcanzó el cetro provincial.
Este año, sin embargo, el equipo, dirigido por Carlos Cortijo, sí había obtenido el primer lugar en la Liga Distrital de Ica. Lamentablemente, un descuido administrativo hizo que en el partido ante José Carlos Mariátegui se incluyera a solo cuatro jugadores oriundos de Ica cuando el mínimo establecido por las bases de Copa Perú para este año es de cinco nacidos en la región. Eso le hizo perder los puntos en mesa y ceder el título al Santa María. No obstante, como subcampeón igual ha clasificado a la Etapa Provincial de Ica, en la que el domingo 19 de mayo debutó con un empate 2-2 ante Huracán de Pueblo Nuevo en Los Aquijes. Así, por ahora está en carrera para recobrar el brillo de antaño.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: panoramio.com; aofap.org; diarios La Crónica y Correo de Ica; Facebook
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