Cienciano - Real Garcilaso: El nuevo imperio
Real Garcilaso batió a Cienciano 0-1 en el duelo cusqueño merced a un tempranero cabezazo de Mauricio Montes. Con dos triunfos a cuestas, el buen arranque celeste pinta para volver a cobrar protagonismo, como el año pasado.
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El capo: Cupo a favor
Si Real Garcilaso mantuvo la mínima diferencia fue en parte gracias al excelente trabajo del arquero Juan Pretel, que evitó chances decisivas de gol de su rival rojo. El guardameta, que es titular en reemplazo de Diego Carranza a la espera de la nacionalización de este último, estuvo presto bajo los tres palos, con mucha agilidad para cortar los centros a pesar de que en los últimos minutos estuvo rengueando tras una dividida. El ‘21’ coronó su estelar actuación al ahogarle el grito de gol sobre el final del juego a Diego Pizarro.
La clave: Arriba, siempre arriba
Que hayan emigrado algunos elementos en la ‘Máquina Celeste’ no hace que difiera en demasía el planteamiento táctico de ‘Petróleo’ García del seguido el año pasado. El técnico garcilasiano dispuso un 4-3-1-2, con el ‘Pitu’ Ramos desde el arranque como dueño absoluto de la pelota parada, vía que el elenco celeste aprovecha muy bien gracias al buen juego aéreo que predomina en ambas áreas del terreno. Fue así como a los 5’ llegó el único tanto del cotejo por obra de Mauricio Montes, quien giró el torso de forma excelente para enviar un certero testazo que se coló en la esquina de Jesús Cisneros.
La calamidad: Flaco ímpetu
El aporte de Carlos Orejuela fue nulo en el ataque imperial, pues ‘Calavera’ no gravitó en alguna jugada significativa. Absorbido por sus marcadores, ni siquiera cuando se recostó por los costados tuvo fortuna para generar peligro, por lo que sus opciones de gol resultaron escasas. Su pobre desempeño se vio reflejado en la impotencia al estirarle un manazo en el rostro de Luis Guadalupe.
El jugadón: Con taco incluido
Sobre la primera mitad, Real Garcilaso mostró pinceladas de buena elaboración de juego. De hecho, la confianza que daba el resultado a favor motivó al conjunto celeste a generar juego. Así, cuando frisaba la media hora, Vildoso combinó con Montes, quien de taco -un recurso válido- asistió a Camarino para que este último libre de marca le pegara de lejos. El balón fue directo a las manos de Cisneros.
El duelo: Pitus y Ratones
Interesantes duelos se vieron en el encuentro de hoy en el que Ramón Rodríguez no pudo sortear la férrea marca de Rolando Bogado; la excepción fue aquella jugada de gol en la que el ‘Ratón’ le ganó arriba, pero que fue anulada por falta sobre los 20’. De otro lado, una intensa lucha fue librada por Fabio Ramos y Santiago Acasiete, quienes se buscaron desde el inicio; resultó tan reñida que hasta el propio ‘Santi’ increpó al ‘Pitu’ por una supuesta falta.
El tapadón: Anticipo inoportuno
En la primera fracción, Pretel se lució para la foto al detener disparos de larga distancia de Johann Vásquez y Cuéllar. Pero el atajadón que lo erigió como figura fue sin duda el que se suscitó en los últimos minutos de la contienda, a los 84’. Una jugada que se fabricó Ramón Rodríguez lo dejó mano a mano con el portero, pero Diego Pizarro se anticipó a su compañero y remató potente. Pretel estuvo ahí para sacar una mano prodigiosa que selló el cero en su arco.
La cancha: Piso resbaloso
El tercer duelo entre clubes cusqueños en el Descentralizado tenía que contar con un marco aceptable de gente. El Garcilaso de La Vega no lució un lleno total –la asistencia arrojó poco más de 18 mil personas-, pero en las tribunas se vivió mucha intensidad al momento de alentar a sus colores. No obstante, el campo también condicionó varios pasajes de las acciones, pues los jugadores de ambos equipos resbalaron cuando iban al ataque, lo que hizo poco fluido el trámite de la contienda poco fluido. Desde luego, las lluvias que se suscitan en estas épocas en el Cusco suelen influir sobre el terreno, que necesita volver a ser el mejor césped natural que tiene nuestro torneo.
Kazuki Ito: Año nuevo, vida nueva
Buen trabajo del colegiado Iván Chang y sus asistentes. La cuarteta arbitral no tuvo inconvenientes en el manejo del partido, que a priori pintaba para ser friccionado. No obstante, Chang condujo las acciones con el criterio de dejar seguir las jugadas para luego amonestar a los infractores, algo que se reclama a nuestros réferis, quienes interrumpen el juego así como las emociones por sacar una tarjeta en el momento menos oportuno. Así, el juez inicia 2013 con la idea puesta en dejar atrás una temporada que le resultó poco feliz con su catastrófico arbitraje en el Cristal - Universitario de la etapa de Series.
Fotos: José Carlos Angulo
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