Santo cuarteto
San Martín
ratificó su poderío ofensivo al vencer 4-0 a la Vallejo en un partido
en el cual se los poetas se jugaban buena parte de sus opciones de
ingreso al "grupo de los siete". Los santos, ya consolidados en este
grupo de élite, acechan el tercer puesto de Cienciano tras la gran
tarde de 'Pedrito' García y el emergente juvenil Christian Cueva.
¿Había goleado antes la San Martín a la Vallejo?
Fotos: Abelardo Delgado / DeChalaca.com
El partido prometía por lo que se jugaban los dos equipos. Pero se vio opacado por la urgencia de última hora de cumplir con la Bolsa de Minutos. No obstante, el requisito le sonrió a San Martín, pues el único jugador de la categoría empleado por el cuadro santo resultó la figura del encuentro.
Se llama Christian Cueva y participó en tres de los cuatro goles del encuentro. Muy diferente fue la suerte corrida por los juveniles trujillanos: los poetas presentaron a dos para ir acercándose a los 207 minutos que deben. A ello se sumó la ausencia de una figura fundamental como Erick Torres.
LA CUEVA DEL LOBO
A los 9 minutos Vallejo, en un inicio entusiasta, ya se veía perdido en la cueva. La flamante aparición alba, Christian Cueva, le dio un pase excepcional al infalible Pedro García para inaugurar la cuenta. No pasarían cinco minutos para que el propio Cueva pusiera su sello personal con la segunda anotación del match.
Los minutos siguientes manifestaron el conformismo del cuadro de Santa Anita, facilitando la siesta de media tarde de los casi nulos espectadores en el estadio San Martín. Así, entre el silencio y los bostezos, llegó la goleada. Otra brillante asistencia de Cueva llegó a los pies de García y eliminó cualquier esperanza poeta. El paupérrimo nivel mostrado por la visita hacía presagiar una goleada de ribetes basquetbolísticos.
NO RIMA
Para el segundo tiempo ambos equipos realizaron cambios poco llamativos. Asomó un vago despertar trujillano, pero la mala fortuna estuvo del lado ‘poeta’. En la primera jugada de peligro, Carlos Orejuela dejaría la cancha lesionado por una patada casual de Atilio Muente. Su reemplazo, Gabriel García, no dio la talla.
El equipo dirigido por Viera comenzó entonces a divagar y el cuarto gol, anotado por Roberto Ovelar -quien, demostrando una técnica ya conocida, dejó atrás al portero para marcar con pierna cambiada-, cayó de maduro. Lo que vino luego fue un trámite extremadamente pausado, y se alternó el protagonismo las deficiencias norteñas y el conformismo santo, reconocido al final del cotejo por el técnico Víctor Rivera.
Con este resultado, la Vallejo se ha dejado pasar por Alianza Atlético, que ahora tiene la primera opción de quedar entre los siete primeros. La inconsistencia del equipo vallejano ha acabado restringiendo aspiraciones mayores.
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