Foto: dfb.deAlemania debutó en Italia 1990 ante la durísima Yugoslavia. A los 71', Rudi Voeller, con una extraña acrobacia, marcó el gol que sentenció la gran presentación teutona: un 4-1 que, según el gran goleador germano, significó el partido más importante para el posterior título.

 

El Mundial de Italia, para muchos, fue el más adormecedor y opaco de la historia; para otros, uno de los más infartantes. Lo cierto es que siempre será inolvidable por el éxito de los villanos, como la victoria de Inglaterra ante el carismático juego de Camerún. El triunfo de la agria pero corajuda Argentina frente al anfitrión del mundial, Italia. La eliminación de Brasil y la de Holanda en octavos, los dos equipos que prometían mejor futbol. Pero el show se lo termino robando el siempre complicado equipo germano, que había salido subcampeón en México 86. Sin embargo, de aquel equipo teutón solo quedaban siete jugadores y cinco de ellos de la base subcampeona: Andreas Brehme, Thomas Berthold, Pierre Littbarski, Lothar Matthaeus y, por supuesto, Rudi Voeller. 

Domingo 10 de junio de 1990. Al caer la noche en el Giuseppe Meazza de Milán, Alemania debutaba en el grupo D ante la dura Yugoslavia. La Maanschaft llegaba a la XIV edición del mundial tras fracasar en la Eurocopa que organizó en 1988, cuando en semifinales fue eliminada por Holanda. Voeller venía de tener campañas aceptables en la Roma de Italia, por lo que era una de las piezas  importantes en el cuadro teutón y uno de los favoritos del público azzurro. Se esperaba que el partido fuera más complicado para los germanos, ya que Yugoslavia había sacado de la competencia a Francia en las eliminatorias.

Los alemanes adelantaron con un estupendo gol de Lothar Matthaeus desde fuera del área. El segundo llegó por obra de Jurgen Klinsmann quien, con un movimiento acrobático, mando un cabezazo cruzado al palo izquierdo del ‘1’ balcánico, Tomislav Ivkovic. Yugoslavia descontaría en el inicio del segundo tiempo, después de un tiro libre ejecutado por Dragan Stojkovic que Davor Jozic convertiría en gol. Diez minutos más tarde, otra vez, Matthaeus, con una jugada inolvidable marcaría el tercero. Casi todo parecía dicho.

Minuto 71

Para sentenciar el primer triunfo de Alemania, Rudi Voeller apareció en, quizá uno de los goles más fáciles que le haya tocado hacer en su carrera. Matthaeus toca para Uwe Bein, y este abre el juego a la izquierda para Andreas Brehme, quien amaga a centrar con la zurda y se saca de encima, fácilmente, a Zoran Vulic; remata al pórtico yugoslavo y el balón, increíblemente, se le escapa de las manos a Ivkovic, Voeller no perdonó y, arriesgando su integridad física, la mandó a guardar. Era el segundo gol que ‘Tante Käthe’ le hacía en su carrera a Yugoslavia.

Alemania clasificó invicto y se cobró la revancha contra Holanda, ante Checoslovaquia ganó sin mucho brillo y pasó a la final vía penales ante Inglaterra. Finalmente, Voeller apareció otra vez ante Argentina y en el estadio de su club, el Olímpico de Roma, para ocasionar uno de los penales más polémicos en la historia de los mundiales, que a la postre hizo que los teutones se coronaran, por tercera vez y después de 16 años, como campeones del mundo.

En una entrevista que el ex delantero da a la FIFA, dice que el partido ante Yugoslavia fue el más determinante en el mundial para Alemania: "El primer encuentro, frente a Yugoslavia, fue sin duda muy importante. Los balcánicos contaban con un gran equipo, que nos infundía un gran respeto y nos hacía temer incluso que las cosas pudieran torcerse. Sin embargo, jugamos un excelente partido y ganamos por 4-1. Fue entonces cuando realmente comenzamos a creer en nuestras posibilidades y a decirnos: "Si podemos derrotar a Yugoslavia de esta manera, podemos llegar muy lejos en este certamen". El posterior desarrollo de los acontecimientos demostró que no andábamos desencaminados al pensar así". Simple y contundente, como su barrida en el arco de Ivkovic

Foto: dfb.de

Comentarios ( 1)add
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escrito por Mario Alberto , April 02, 2010
Estan seguros que la toca? Creo recordar que la barrida simplemente obstruye al portero (y la foto parece darme la razon). En el Peru fue el dia de la segunda vuelta electoral, donde Fujimori arrasa a Vargas Llosa. Saludos.
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