Un rondo de bienvenida
Venezuela goleó 4-1 a Bolivia y, pese a ya no tener opción sensata de asistir a Qatar 2022, dio inicio con inmejorables sensaciones a la era de José Néstor Pékerman. La 'Verde' de César Farías quedó maltrecha y expuesta al reencuentro -por partida triple- de Salomón Rondón con el gol.
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Luis Pérez | @luisperezadrian Redactor |
Empezó una nueva era en Venezuela, que vino acompañada con olés por parte de la tribuna del Olímpico de la UCV y actuaciones superlativas de los jugadores de la 'Vinotinto'. Salomón Rondón fue el más aplaudido a su salida del campo, y no era para menos: el atacante del Everton de Inglaterra marcó un hat trick, para así erigirse como el incuestionable capo de un partido que tuvo un punto de inflexión importante: el blooper conjunto entre Carlos Lampe y Diego Bejarano.
Sucede que Bejarano decidió jugar en corto para que Lampe pudiera despejar el balón. Sin embargo, el pase careció de fuerza, lo cual fue aprovechado por otro hombre de buen partido: Darwin Marchís, quien tras trabar el balón definió con izquierda de manera favorable.
Dicho tercer gol no solo agregó cifras al marcador, sino que también supuso el golpe anímico más duro que la Bolivia tendría que afrontar en toda la tarde caraqueña. Para colmo, el escenario quedó condimentado con la expulsión de Leonel Justiniano apenas 6 minutos después. La visita quedó así hipotecada a evitar que los daños sufridos fueran mayores.
De modo previo al tanto de Machís, la diferencia era de solo un gol, pero ya se evidenciaban ciertas distancias futbolísticas en el campo. Entre Bejarano, Jairo Quinteros y José Sagredo no existía coordinación alguna: esto quedó en evidencia en el segundo tanto de Venezuela, cuando Rondón -sin problema alguno- controló el balón y giró 180 grados ante la pasiva marca de los tres defensores altiplánicos.
De hecho, el primer gol también fue obra de Rondón, pero esa vez quien dio inicio a la jugada fue Óscar González: tras recuperar el balón en la mitad de la cancha, el hombre del Monagas SC inició el contraataque. El volante terminó siendo quien asistió para el tanto de cabeza de Rondón.
El único premio que consiguió Bolivia en los 90' fue el tanto de Bruno Miranda; más allá de eso, la deuda del equipo de César Farías se hizo patente. La presión ejercida en los primeros minutos terminó siendo inocua, puesto que el juego de balones largos de Venezuela permitía saltar líneas y preocupar constantemente al arco defendido por Lampe.
Al final, resulta anecdótico que Bolivia siga teniendo chances -matemáticas, aunque poco probables- de clasificar, y Venezuela, incluso tras golear, ya no pueda llegar a la Copa del Mundo. No obstante, el cambio es visible de la mano de Pékerman, en un proceso que podría abrir interesantes perspectivas a la 'Vinotinto' para la siguiente Eliminatoria.
Fotos: AFP
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La ficha del Venezuela 4 - Bolivia 1
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