Cristal fue por el resultado a Arequipa. Pese a que terminó dominado por Melgar, consiguió sacar un punto que le sirve -y bastante- en su propósito de alejar definitivamente el fantasma de la baja. El 0-0 fue el mejor reflejo de que el equipo de Oblitas ha entendido por fin que la categoría se salva, ante todo, sumando como y donde se pueda.

Foto: diario Correo de Arequipa

No se trata de que Cristal la haya sacado barata en Arequipa ni mucho menos. Durante el primer tiempo, los rimenses supieron controlar bien el partido en mediocampo, y entre la velocidad de Damián Ísmodes y la entrega del ‘Chorri’ Palacios -si hubiera un Mundial de Esfuerzo, hace rato que estaría clasificado- supieron llevar peligro al arco del uruguayo Jorge Rodríguez.

El cotejo fue intensamente disputado, como acá luchan el balón 'Cachete' Zúñiga y 'Pinza' Hernández (Foto: fbcmelgaraqp.com)Sin embargo, el quid del asunto pasa porque cuando a Cristal le empezó a faltar algo de aire, el planteamiento de Oblitas fue enteramente racional. Si al inicio de la segunda fracción había hecho, luego de semanas de entredichos, reaparecer a Bonnet para pasar a jugar con doble centroatacante, cuando empezó a verse arrinconado por el ‘Dominó’ no se hizo resquemores para replegarse y apelar al rechazo simple. Prueba palpable de que si hoy Cristal está salvando la categoría, es porque en las últimas jornadas comenzó a jugar como equipo chico, calculador, de esos que mendigan puntitos donde los dejan y rascan la olla al final de los 90 minutos.

Está claro que el Melgar de ‘Rafo’ Castillo no es una perita en dulce para nadie, amén de que su irregularidad lo tenga en la tabla varios escalones por debajo de lo que su potencial sugiere. Con los hermanos Zúñiga -Christian ingresó para el complemento- en una tarde con las luces apagadas y Gárate volviendo a sus tiempos de botines cruzados, fueron los volantes de marca quienes llevaron peligro con sus remates de media distancia sobre el pórtico de Delgado: El juez Arellanos, como es costumbre, tuvo una mala actuación y se 'comió' dos claros penales, uno en cada área (Foto: fbcmelgaraqp.com)Roberto Coáguila unas veces, otras el siempre regular Víctor Oviedo. Llanos y Portilla también hicieron su parte desde los laterales. Pero el portero rimense, aunque siempre con su antipática actitud hacia los rivales de por medio, esta vez estuvo muy acertado y le puso un candado al arco.

En ese contexto, los rojinegros sí pudieron quedarse con la ventaja durante los minutos finales, sobre todo cuando los centros empezaron a rondar el área rimense con frecuencia y comenzó a crecer la figura de Villalta como principal eje de la zaga -aun por debajo del nivel que tuvo antes de su lesión, en Quito bien podría haber hecho algo por la selección-. En esa andanada y cuando restaba muy poco (84’), ‘Rafo’ insistió con una carta que le ha sido poco provechosa en las últimas jornadas: el ingreso del colombiano Francisco Villalba. Casi como si fuera una ley, en su primera intervención el moreno falló un gol increíble, al rematar contra el suelo y desviado cuando estaba a cinco metros de Delgado. Por algo la gente de la barra León del Sur lo tiene entre sus “engreídos”. Su rúbrica era la adecuada para firmar el 0-0, resultado atípico para los cotejos entre Melgar y Cristal en Arequipa. Mayo de 2006: En un partido en el que predominó el juego brusco, Melgar y Cristal empataron 0-0 por primera vez en Arequipa en las últimas dos décadas (Recorte: Líbero, 01/06/06 p. 14) De hecho, es la segunda vez que ocurre desde que ambos elencos comenzaran a enfrentarse de manera regular luego de la reducción de equipos del año 1992 (la otra fue en el Apertura del año pasado).   

Al final, Cristal salió satisfecho no solo por el buen negocio efectuado, sino porque varias de las piezas que comenzaron siendo de emergencia en esta etapa oscura que el equipo atravesó durante el segundo semestre del año se han consolidado como figuras. Carlos Lobatón aplicado en su nueva función de volante mixto, Marcos Delgado convertido quizá en la gran promesa de volante de contención que el fútbol peruano reclama y José Mesarina asomando como interesante opción para el carril derecho. Por allí el balance es positivo. Pero la agenda celeste aún debe colocar un check al gran compromiso: el del próximo fin de semana ante Municipal, rival directo si los hay en la búsqueda de alejar definitivamente los fantasmas de la baja que tanto asustaron La Florida durante los últimos tiempos.

Si bien de los ediles puede esperarse cualquier cosa, quizá lo único predecible sea que al San Martín irán con uñas y dientes afilados para jugarse la salvación. Y que a nadie le sorprenda si Cristal lo espera cerrado, receloso y calculador, como equipo que decentemente quiere seguir siendo de Primera.

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